Capítulo 15

45 3 1
                                    

Hola a tod@s primero que todo les quiero dar las gracias por los tan buenos comentarios del capítulo anterior y en Whatsapp realmente no saben cuan feliz estoy y por ello para mostrar mis gratitud he decidido...  publicar hoy ;-) jajaja bueno fin de juego les dejo disfrutar de este capítulo a ver que harán hoy Sara  y "Eric" besos no olvides comentar y votar gracias.

  Era domingo brillante y un poco caluroso la familia Rae se preparaba para ir a la iglesia ese era el momento de Sara para buscar a ayuda «que más ayuda que un religioso ¿verdad?» pensó allí frente al espejo del tocador de su habitación  mientras cepillaba su cabellos haciéndole ondas subes mira el reflejo y miro a «Él Estrés» allí observándola sentado en su cama mordiendo su pulgar.
No se puede negar que se sentía incomoda y mas porque «un FANTASMA, ALUCINACIÓN, ESTRÉS o como se le llame te observe, te hable, te siga solo a TI y a nadie más» eso hace que se estremezca y más aun el pensar en ayudarlo en una idea suicida, como lo es ayudar a esclarecer su caso «definitivamente me enviaran de inmediato a algún hospital mental» dijo en un suspiro de nerviosismo.

–No tendrías porque decirlo–dice aun mirándola sin dejar de morder su pulgar.

Aquella respuesta y la hizo pensar si lo que ella misma habia dicho era muy obvio o él lee mentes.

–Y ¿qué pasaría si lo digo?–dijo nerviosamente.

–Pues te enviarían a Redcliff… es un hospital mental–dice lentamente–tú decides.

Ella volvió a cepillar sus cabellos sin abandonar el nerviosismo pero decide darle la cara y preguntar.

–un momento ¿tu lees mentes o…–pero en ello escuchar el tocar de puerta muy característico que haría su padre mientras ella cierra los ojos decepcionada por la interrupción– ya bajo…

Ya al salir de casa junto con su familia se giro porque la sensación de sentirse observada no la abandonaba NUNCA asi que sube su mirada hacia las ventanas de la casa y allí justo en la ventana de su habitación estaba la silueta de él…

Ya en el auto papa y mama cantaban una canción infantil para Susy que igual cantaba sonriente en su asiento para autos mientras Sara miraba por la ventana debatiendo en su cabeza si decir o no decir «Ser O No Ser… por Dios esto parece una obra de teatro» pensó.

  Ya se encontraba entrando junto con su familia a la iglesia, Sara no podía evitar  mirar a los feligreses de la comunidad allí saludándose unos con otros, e inclusive a ellos. Asi continuaron hasta llegar a los bancos ella poso la mirada al frente mirando aquel hombre allí frente al escenario donde daría su sermón ese domingo, su creciente nerviosismo logro que comenzara a sudar su frente y sus manos, su corazón palpitara muy rápido y que su estomago rugiera asi que llevo sus manos a su estomago.

–Mama ¿puedo ir al baño?–dijo mirando a su madre–no me siento muy bien.

Ya en el baño de damas cerró la puerta con seguro sin notar que habían chicas allí  en el tocador al girarse se las topo y con una sonrisa nerviosa se giro para quitar el seguro.

Luego que el baño quedara solo para ella paso el seguro y camino hacia el tocador abrió la llave del agua y metió sus manos bajo el sintiendo el correr  de esta mientras se mira al espejo y noto todo su rostro siendo atacado por el sudor, bajo sus ojos ¿Ojeras?, sus mejillas ¿Rojas? Y su labio ¿Temblando?

– ¿Quién eres tú?–  se dijo a si misma.

Al salir del baño un poco solo un poco más relajada y debatiendo en su cabeza “decir o no decir” escucho desde los parlantes la voz del pastor que ya habia comenzado con su sermón, Sara comenzó a sentir otra vez el malestar pero esta vez con algo un poco diferente.

–por favor un agua–dijo con voz entre cortada mientras colocaba sus manos en el mostrador con un billete de 20 dólares.

Realmente estaba sedienta los nervios la carcomían. Ya con solo pensar en decir «hey hola veo un fantasma ¿tiene cita para un exorcismo?» la hacía querer no entrar ¿Cómo puede sonar algo como lo es “hey pastor veo un fantasma hay cura ya que la psicóloga me dijo que es estrés y no pienso que lo sea” tan normal? «Aquí ni en un millón de años» pensó. Tomando valor entro a la iglesia nuevamente bueno realmente no se le puede llamar valor cuando tu madre te consigue  con un botella de agua en las manos y te obliga a entrar.

–Ya estate quieta Sara– le susurra su madre mientras vemos a una Sara removerse nerviosa en su asiento, su mente no dejaba de dibujar el momento en que ella le diría al pastor lo que le está sucediendo «si la psicóloga me diagnostico estrés el pastor me dirá…» esa es la cuestión ¿qué le diría?
–Sara hija ¿estás bien?

–No lo sé ahora–dice con voz apagada mientras mira sus manos temblorosas.

Llego el momento esperado, término la misa ya todos los feligreses se preparaban para ir a las afueras de este recinto espiritual ya que el pastor Watson habia planeado un almuerzo dominical sorpresa «genial» pensó amargamente mientras caminaba hacia el escenario.

–disculpe ¿puedo hablar con usted en privado?–sintiendo como sus manos, y rostro están siendo empapado por el sudor y sin hablar de su labio vibrador.

Allí se encontraba Sara sentada frente al escritorio del pastor Watson en su despacho sus manos y su rostro no paraban de hacer gestos exagerados mientras explicaba sin muchos detalles el acontecimiento de su vida.

–Entiendo–murmuro el pastor– ¿estás durmiendo bien?, ¿lees la biblia?

Sara asentía mientras pensaba «apuesto que a sus adentros dirá está LOCA»

– ¿y?... ¿bien me ayudara?

–esto es inaudito–grito con todas sus fuerzas mientras caminaba por la acera luego de escuchar por dos horas, DOS HORAS el sermón que le dio el pastor Watson en su oficina sobre “tener una vida cristiana y otras cosas más”–es inaudito.

–la vida es inaudita si lo sé–dice con voz aburrida.

Sara se detiene en seco y se gira para encararlo.

–Esto es tu culpa–dice furiosa.

–Sip culpa al muerto–rueda los ojos–por Dios Sara no dejes que el estrés y el resentimiento te gane, Sálvame.

–Antes muerta–le grita y sigue caminando aun más furiosa.

–entonces no te liberarás de mi ni yo de ti nunca–grita.

Sara se detiene y gira para mirarlo y este tiene una expresión en el rostro que gritaba «Sabes que tengo razón»

–Eso nunca–se dijo a si misma y siguió caminando hasta que ve una tienda Starbucks miro salir a Clara la hermana “rara” de Gabriela juntos con unos amigos Dark «ella me ayudara» pensó.

Luego de que Sara fuera rechazada por la hermana de Gabriela, Clara. Ella, Sara se encontraba en el suelo de su habitación buscando en Google «cómo desaparecer un fantasma» luego de que los resultados le parezcan inútiles e improbables a cada clic que da.

–haber ¿cuándo dejaras de ser tan estérica y comenzaras a Salvarme?

–Nunca–le dedico una mirada a «Él estrés» ya que estaba acostado en su cama mientras ella solo le da una probada a su té hirviente–no puedo esperar a que desaparezcas para siempre y por siempre–dijo aunque en su interior comenzaba a desanimarse.

SÁLVAMEDonde viven las historias. Descúbrelo ahora