Life Love ❣︎ Minsung

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Hay una fecha que le causa escalofríos a Minho, cada vez que se acerca tiene el impulso de tomar su celular y marcar un número que ya no recuerda, pero siempre logra mantenerse distraído y dejar que ese sentimiento vaya disminuyendo al pasar de las horas. En las noches, cuando el día está acabando es el peor momento, porque no hay mucho que lo distraiga y de un forma u otra termina pensando en ello. Ese año encontró una manera de distraerse, y es que ni él se esperaba que un compañero de modelaje a quien apenas conocía le invitara a una fiesta. En un principio su intención no fue acudir, pero la incomodidad se hacía más grande con cada minuto por lo que optó sólo aceptar y pedirle a Felix que lo acompañase.

Cuando consiguiente hablar con el modelo la noticia le dio más risa que pena; era el invitado de un invitado. En una celebración tan grande nadie notaría que ellos no conocían ni siquiera el motivo. Caminaron entre la gente y saludaron personas que sí conocían, disfrutaban a pesar de no haber estado en la lista de invitados que el anfitrión debió haber hecho.

—Hwang Hyunjin. — le dijo felix casi de sorpresa. —Así se llama quien vive aquí.

—¿Qué más descubriste? Detective. — le sonríe porque realmente no le importa quien sea el tal Hwang.

—La fiesta es por el cumpleaños de su pareja. Este fue su primer pago como modelo; una fiesta para su novio. ¿No es infantil?

—Su primer sueldo, que haga lo que quiera con él, después de algunos notara que no es suficiente.

Se concentra en su bebida y piensa que ha escuchado ese nombre antes, no consigue ubicarlo por lo que decide sólo dejarlo pasar. Deja que sus pensamientos se alejen, no los quiere cerca porque sabe que terminará en lo mismo de cada año. Felix lo toma del brazo.

—¿Quién será Hwang Hyunjin?— le pregunta asomándose de entre las personas. Minho se encoge en hombros. —¿Será el alto? Parece modelo. Demonios, se acerca. — Felix se da la vuelta disimulando.

Mingo se ríe de la actitud de su pareja, es él quien se la pasa diciéndole que no sea infantil y termina por intentar esconderse del anfitrión de una fiesta. No logra escuchar bien con tanta música, pero reconoce que sí se acercan a ellos por el rabillo del ojo, se pregunta si deben esconderse o irse, tal vez sólo deba saludar y fingir que si los conocen, o no hacer nada.

—¿Había tanta gente que decidiste entrar porque pensaste que nadie te vería?

Reconoce su voz y el recuerdo lo azota. Fue la última noche del año cuando por primera vez un chico entró a su casa, y lo hizo sin haber sido invitado. Debería reírse de la coincidencia, pero está en blanco. Sus labios se abren sin soltar palabra alguna.

—Me alegra verte de nuevo, disfruta la fiesta.

Cuando eleva su mirada sólo puede verlo alejarse, su cabello ha sido teñido y puede ver un curioso pendiente oscilante sobre su oreja. Mentir se le da bien, pero no puede fingir que aquello no ha sido un duro golpe, no sabe que hacer, quiere y no quiere ir detrás de él. Felix toma su mano porque hasta él se ha percatado que se ha ido.

—¿Lo conoces?— Minho asiente. —Entonces también conoces a Hwang.

Al diablo con Hwang, Minho no puede dejar de buscar a Jisung. Quiere verlo.