CAPÍTULO 5: Lugar seguro

2.3K 168 6
                                    

                                           Leah Malfoy:

Estaba saliendo de ese sitio, odiaba ser el centro de atención, caminé lo más rápido que pude, aflojé mi corbata sentía que no respiraba, mis palpitaciones eran rápidas y fuertes sobre mi pecho, empecé a temblar y transpirar.

No, no podía pasar, no de nuevo, estaba mejorando.

A mitad del pasillo encontré el baño, sin pensarlo entré, me apoyé sobre el lavamanos y me eché agua sobre la cara, buscando una forma de tranquilizarme, la cual no encontré.

Mierda tranquilízate, vamos Leah, tú puedes -me dije a mí mismas

Mi respiración se volvía cada vez más agobiante, mis piernas se debilitaban y sentía que me iba a desvanecer ahí mismo, apoye mi cuerpo sobre la pared y me deje caer al suelo.

Me acurruqué en mi propio cuerpo y lloré, lloré por miedo a morir, lloré por no ser suficiente, lloré por mi hermano y familia, lloré por todo lo que nunca había llorado. De un momento a otro frene y no, no porque quisiera, ni porque ya no tuviera lágrimas, sino porque alguien había entrado y no podían verme así, no a una Malfoy.

-Hola, ¿hay alguien? -Preguntó una voz conocida.

Me pare arreglándome la ropa y el cabello, luego me asome y vi a la persona que tanto me irritaba.

-Ah, eres tú Granger

-Si... ¿estas bien?

La mire confundida, más que nada porque ella se había preocupado por... ¿mi? ¿se notaba tanto que estaba mal?

-¿Porque no lo estaría?

-No lo sé, no te ves muy bien... o sea si, pero... ya sabes, triste -dijo un poco nerviosa.

-¿Desde cuándo te preocupas por mí?

-Aamm...bueno el otro día me comporte muy grosera, tal vez no era tu intención lastimar a la araña.

-Pues no, no lo era -solté enojada.

-¿Segura que estas bien?

-Si, ¿no escuchas o qué?

Pasé por su lado chocando su hombro y salí del baño para dirigirme en busca de un Hufflepuff, ya que había recordado que él quería que nos juntemos, de hecho, me hacía falta hablar con alguien, o al menos distraerme.

Tome mi celular y abrí el chat de Ced, y le pregunte donde nos reuníamos.

Ced

Hola Leah, estoy por salir de mi sala común, ¿te parece esperarme fuera de mi sala común?

Ah y por cierto, lo chicos no pueden venir, espero no te moleste

No, no me molesta, nos vemos ahí.

Caminé hacia la sala común y me di cuenta que había olvidado de decirle a los chicos, pero decidí mejor ir sola, luego hablaría bien con ellos. Cuando llegué espere fuera, hasta que vi salir a un chico alto y con su ropa de casa.

-Hola

-Hola

-Lo siento estaba con tarea, no me dio tiempo a cambiarme.

-Está bien, yo tampoco me cambie, estoy hecha un desastre.

-Estas bien, bueno vestida si, ¿pero realmente estas bien? -Dijo empezando a caminar.

-¿Porque lo dices?

Sabía muy bien a que se refería, realmente me sentía fatal y por alguna razón con Cedric no trataba de disimularlo, no como lo hacía usualmente.

-Es que te vez cansada y triste. - mirándome preocupado.

-Estoy bien... bueno la verdad si me estresa un poco esto del torneo, pero sé que estaré bien. -Le dije confiada.

Bueno... confiada entre comillas, porque la verdad es que lo que menos tenía era confianza en mí misma y realmente tenía la necesidad de soltar todo, decirle que tenía miedo, que necesitaba ayuda, que no sabía si podría con esto, pero no podía. Mi personalidad no me lo permitía.

El solo me miro desconfiado, pero no insistió y se lo agradecí por dentro.

-Tengo una idea, bueno... dos, pero la segunda la haremos otro día, ¿te parece? -animado

-Bueno... -sonriendo -¿qué haremos?

-Ven -estirándome la mano para que la tome y lo siga.

Nos tomamos de las manos y me llevo a un lugar hermoso dentro del bosque prohibido, era un sector que no había tantos árboles, solo alrededor, se escuchaban los pájaros y el sonido de las hojas chocar entre sí, parecía un lugar muy tranquilo y relajante.

-Probablemente esperabas un lugar mejor, pero créeme es muy tranquilo, al menos de día.

-Es hermoso ¿sueles venir?

-Si... cuando quiero estar solo y pensar, te quería traer aquí para que charlemos tranquilos.

-Bueno ¿y de que quieres charlar?

-No le sé, de lo que tú quieras...-suspiro y me miro- mira Leah, en realidad te traje para que lo que sea que digas o hagas en este lugar, solo quede aquí, da igual con quien lo hagas, ya sea con tus amigos o... contigo misma, se cómo sea puedes hacer lo que tú quieras sin juzgarte, puedes ser tu misma. te note algo estresada, asique pensé que este seria el mejor lugar para ti.

Lo mire y escuche atenta, entendía por completo, me estaba dando un lugar seguro, para ser yo misma sin miedos y realmente lo agradecía, pero había un problema, este no era cualquier lugar, era SU lugar seguro.

-Ced...

-Ya se lo que vas a decir, pero Leah te has vuelto muy especial para mi en casi nada de tiempo y si lo sé, apenas te conozco, pero sé que necesitas este lugar más que yo -dijo de una forma muy sincera.

Mirándolo y sonriendo corrí hacia él y lo abracé, el me envolvió con sus brazos en mi cintura de una forma cariñosa y yo puse mi cara entre su cuello aun con una sonrisa, enseguida su aroma entro por mis fosas nasales y sonreí aún más, realmente el me alegro el día.

-Gracias Ced, este lugar sin dudas también será tuyo -saliendo del abrazo mientras sonreía.

Espero que les guste el capitulo y voten porfis.

<3

𝑇𝑂𝐷𝑂 𝑃𝑂𝑅 𝑇𝐼 (Hermione Granger)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora