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ㅤㅤㅤAnastasia había expresado sus teorías en un vomito verbal que su familia entendió con dificultades. Ponerse al corriente sobre sus nuevos descubrimientos era lo primero y lo más importante. Estaba aprovechando la ausencia de los humanos para llegar objetivamente a un buen lugar sobre lo que iban a hacer.
—Si Victoria está detrás de esto, ¿por qué no lo vi venir? —Alice era la escéptica, no le gustaba no tener la razón.
—Está jugando con los puntos ciegos de tu visión —contestó su padre, y a Ana le hubiera gustado decir te lo dije. —¿Quién era el neófito?
—No lo sé. Fue Garrett quien me lo dijo.
—¿No te dijo cómo se veía? —volvió a cuestionar.
—Por supuesto, luego nos sentamos a tomar el té y también discutimos sobre la revolución francesa —su hermano le dio una mala mirada por su sarcasmo. —Se trata de Garrett, claro que no dijo mucho.
—Sabemos que vienen hacia aquí —concluyó Jasper. —Sabemos que son muchos, y nosotros no somos suficientes.
—Garrett se ofreció a ayudar —comentó la rubia.
—Un vampiro no hará una gran diferencia.
—Oh, créeme, Garrett sí hará una gran diferencia —lo contradijo Carlisle. —Pero tendrás que entrenarnos. Nunca enfrentamos neófitos.
—Ni a nadie —murmuró Rosalie con pesimismo.
—Debemos empezar pronto...
—Pero no ahora —Edward interrumpió a su rubio hermano y miró a su tía. —¿Anastasia? —la mencionada frunció el ceño.
—¿Qué? —preguntó confundida.
—¿No tienes algo que compartir? —cada vez estaba más confundida con las preguntas de su sobrino.
—Les dije todo lo que descubrí.
—¿Y que Charlie se vaya a convertir en uno de nosotros no es algo que también descubriste? —la pregunta salió de Alice.
En ese momento se dio cuenta que las barreras de su escudo estaban bajas. Rápidamente las subió, pero ya era bastante tarde.
—¿Charlie ya tomó la decisión? —preguntó Rosie con sorpresa. Mucho más atenta a la situación que antes.
—No, claro que no.
—Estás mintiendo —dijo Edward con una sonrisa arrogante.
—Cierra la boca, mocoso impertinente —ordenó con sus dientes apretados.
