(2.3)

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Las vacaciones de primavera prácticamente ya habían llegado, solo había que terminar ese día escolar, y después, los alumnos de la secundaria municipal de Estrellazul podrían gozar un mes entero en completa libertad.

Algunos iban a salir, quizá para visitar a familiares lejanos o simplemente para pasear fuera de Estrellazul. Otros se quedarían en la ciudad, seguramente disfrutando del sol y la playa en compañía de sus familiares y amigos, justo como deseaba hacer Choi Beomgyu.

Pero claro, los exámenes antes de vacaciones siempre resultaban un auténtico dolor de cabeza. Solo unos cuantos profesores querían apresurar sus evaluaciones de tal manera, pero desgraciadamente el profesor de física era uno de aquellos desalmados.

Ahí estaba Yeonjun con el ceño fruncido ─una imagen muy común de ver─, el lápiz entre los dientes, el examen en la paleta de su pupitre y una nube de humo espeso saliendo de los engranajes en su cabeza.

«El milímetro de mercurio y el bar son unidades de medida para la presión, pero su unidad de medida oficial en el SI es el...»

"Uh... ¿El pascal?"

"¡Sí, el pascal!"

"Y otra unidad de medida de la presión puede ser el numero de uñas que me he mordido hoy. ¿Siguiente pregunta?"

Bien, no estaba tan mal. Yeonjun no se encontraba perdido por completo, aún le sería posible salvar el estúpido examen.

La buena memoria del renegado era capaz de recordar algunos datos. Por fortuna, la mayoría de las preguntas eran teóricas y solo unas cuantas implicaban ejercicios matemáticos ─que no eran tan difíciles─. Yeonjun estaba seguro de poder contestar correctamente al menos dos terceras partes del examen, lo cual era un milagro. Solo debía confiar en la suerte para contestar al tanteo otra buena cantidad de preguntas y conseguir así un decoroso siete.

O aunque fuera un seis. Un seis estaba perfecto para el renegado, pero definitivamente no quería reprobar.

Si reprobaba, iría arrastrando la materia el resto del ciclo. Tendría que sacar un diez perfecto en lo que sobrara de la rúbrica anual ─algo casi imposible─, o de lo contrario, sería un hecho que recursaría.

No podía recursar ninguna materia estando en último grado; ni siquiera una sola. Eso significaría recursar el año entero, pues no obtendría el certificado de secundaria y no podría inscribirse al bachillerato al corriente con los demás estudiantes.

Además, ya iba atrasado. Había recursado primero y segundo grado; llevaba casi cinco años en la escuela secundaria cuando lo normal era terminarla en tres. El director ni siquiera le permitiría recursar una tercera ocasión, ¿quién demonios quiere tener en su escuela a un maldito renegado durante seis años? ¡Ni hablar!

De seguro lo expulsaría.

Boy, I, boy, I, boy, I know~. I know you got the feels~...

Yeonjun salió de sus amargos pensamientos y soltó una silenciosa risa ahogada cuando escuchó al chico popular cantar bajito aquella canción de k-pop. No la identificaba mucho, pero sabía que era de Twice.

Beomgyu se veía concentrado en su examen a pesar de estar cantando. Era una imagen tierna, aunque eso el renegado jamás lo iba a admitir. El "chico perfecto" movía la cabeza rítmicamente de una forma suave, apenas notoria. Tenía la mejilla apoyada en el dorso de su puño derecho y en esa misma mano sostenía un lápiz. Sus cejas permanecían ligerísimamente fruncidas porque se encontraba leyendo; y unos cuantos mechones de cabello le cubrían la frente, acentuando con sombras su rostro.

🐱 LO$ER = 🐶 LO♡ER [YEONGYU]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora