Secret Love | TojiIta

4. Dibujaste estrellas sobre mis cicatrices

La mañana de Yuuji había avanzando lentamente, el cansancio era notorio en su rostro, pero su sonrisa siempre permanecía en él, iluminando a las personas que lo rodeaban. Actualmente se encontraba en una tienda de articulos de arte, pues necesitaba abastecerse de algunos materiales.

Dibujo técnico, había resultado ser una clase  bastante satisfactoria, que decir de su clase de pintura, en la cuál había comenzando un nuevo proyecto.

La idea era trabajar en un rostro, por lo que Yuuji no pudo evitar trabajar en un lienzo que mostrará el atractivo de Toji.

Se sonrojo, al pensar en él.

Hizo un puchero y seleccionó dos tubos de óleo   color verde, de distinta tonalidad, pues quería que su pintura fuera perfecta, representando aquella mirada verdosa penetrante que tenía el hombre.

Ojos verdes que lo contemplaron con tanta adulación y deseo.

Camino hasta encontrar una gran variedad de pinceles, seleccionando un par. Suspiro al observar los precios, sabía que su billetera se encontraba algo apretada, con respecto al dinero, pero necesitaba cambiar algunos de sus viejos materiales.

Realizó el pago de aquellos insumos y camino de vuelta a su universidad.

La hora en su celular marcaba las 6 pm, debía llegar para prepararse, debido a que su práctica comenzaba en media hora.

No recuerda cuando comenzó, su fascinación por el voley, (deporte con el que siguió en la Universidad), solo que acepto con mucho entusiasmo la invitación de un amigo, para unirse al club en la escuela, debido a que era considerado alguien bastante atlético y se le daban mejor que a la mayoría, éstas actividades.

Pero en el fondo,Yuuji  solo quería compartir con los demás y no solo, con Megumi.

Anhelando dejar atrás el rechazo...

No solo se fascinó con aquel deporte, aquello se convirtió en su zona de confort, disfrutando del contacto de su mano con el balón, al rematar cada pase del colocador, esforzándose al máximo por anotar puntos que impulsaran a su equipo al triunfo.

Y porqué debía mantener su beca deportiva, aquella que le permitía estudiar.

━━━━

Más tarde, su práctica había dado por finalizada, por lo que se encontraba en el vestuario, trás haber tomado una ducha, quitando el sudor y el cansancio acumulado en sus músculos.

Después de colocarse una camiseta, su mirada se concentró en la cicatriz que estaba presente en su muñeca izquierda. Sujeto la extremidad con su otra mano, cubriendo aquella fea marca con sus dedos.

Recuerda que cuando niño, los golpes eran parte de su vida cotidiana.

Y  las cosas tampoco cambiaron al cumplir los 15 años. Yuuji se metía en peleas, defendiendo a los demás y a él mismo, de aquellos bravucones que pertenecían a la escuela, en la que asistía.

Una tarde en particular, regreso a casa con el labio reventado, además de la nariz sangrando y Toji lo vió, pues eran vecinos.

Flashback

Todo había ocurrido en una tarde de verano, bastante calurosa, ansiaba llegar a la casa que compartía con su abuelo, para ducharse, limpiando sus heridas y posteriormente dormir, para recuperarse del dolor físico.

—Mierda, chico.

Yuuji, se detuvo ante la voz del hombre, el cuál se encontraba fumando afuera de su casa.

—Buenas tardes, señor Fushiguro,—Mencionó, con la voz apagada, observando el suelo y evitando la mirada del mayor.

— Esos malditos mocosos, — Gruño el Fushiguro mayor, acercándose al chico, para sujetarlo suavemente de la barbilla.

Yuuji se sonrojo por la cercanía, además del toque del hombre.

— N-no es nada, — Murmuró nervioso.

— Si vuelven a tocarte, me ocuparé de ellos,—Su voz era fría, su mirada reflejaba molestia, pero su toque hacia Yuuji era suave, gentil al limpiar la sangre del labio del chico, con su pulgar.

— No es necesario señor Fushiguro, puedo con ellos, — Le sonrió, mostrándole el pulgar.

Toji lo miró, alzando una ceja, para tomarlo de la muñeca y arrastrarlo hacia su casa.

— Puedes ocupar la ducha, te limpiare esas heridas. — El hombre, lo adentró a la casa que compartía con su hijo, cerrando la puerta y empujando al chico al sofá, para que se sentará .

— Pero, mi casa,— Susurró,  alzando su mirada hacía Toji, que se encontraba de pie, sosteniendo una camiseta negra y un pantalón de buzo.

— Sabes dónde está el baño, — Lo ignoró entregándole las prendas.

Yuuji suspiro, resignado tomando la ropa de las manos del hombre, para encaminarse hasta el baño. Se quitó su ropa sucia, cubierta por la sangre y la tierra, para entrar a la ducha.

Se lavó, quitando suavemente la suciedad, teniendo cuidado con sus costillas magulladas.

Cuando estuvo limpio, seco su cuerpo, para agarrar la ropa que el hombre le había entregado, colocándosela. Notando que a pesar del aroma a detergente, la esencia de Toji estaba presente.

Se sonrojo, sintiendo como aquella camiseta de gran tamaño, cubría su cuerpo, dándole una sensación de confort.

Salió del baño, para dirigirse a la sala, ubicándose nuevamente en aquel sofá negro, donde el mayor permanecía, aguardando por él.

Para dejar qué él hombre, curará su rostro.

No podía evitar que su corazón latiera con rapidez, ante la cercanía y el toque cuidadoso que empleaba Toji, para cuidar de sus heridas.

Así que cerró los ojos, para evitar su penetrante mirada.

Por su parte, Toji sabía que el chico pasaba la mayor parte del tiempo solo en aquella casa, debido a que su abuelo estába en el hospital.

— Megumi llegará con pizza para la cena, así que, quédate , — Le guiño un ojo al pelirosa.

— De acuerdo, — Yuuji respondió, otorgándole una pequeña sonrisa.

—Todo estará bien, Yuu, — Murmuro el pelinegro, acariciando con suavidad la cabellera rosa, del chico.

━━━━

Sus recuerdos se vieron interrumpidos, por el sonido, del timbre de su celular, mostrando en la pantalla un nuevo mensaje, logrando que su rostro se iluminara, colocándose con rapidez, una sudadera con capucha roja y agarrará su bolso.

"Te estoy esperando, chico "

Con pasos apresurados, salió del gimnasio para dirigirse a la salida, en donde se encontraba un hombre montado en una motocicleta negra kawasaki ninja.

Se sonrojo, al observar a Toji de brazos cruzados luciendo una chaqueta de cuero.

—Iremos a mi departamento?, — Preguntó curioso.

El hombre negó con un movimiento de cabeza y le guiño un ojo, entregándole un casco.

—¿Te quedas a dormir conmigo hoy, cariño?, — Le mencionó, colocándose su casco, encendiendo la motocicleta.

Asintió, sonrojándose,  agradeciendo que el casco cubriera su rostro totalmente avergonzado, por las palabras del mayor. Se subió, abrazando la cintura de Toji, él cuál, se aseguro de que el chico estuviera seguro, para acelerar, dejando atrás la universidad de Yuuji.

Yuuji disfrutaba del viaje, abrazando al hombre, apoyándose en aquella espalda ancha.

Y para sí mismo susurro;  Dibujaste estrellas sobre mis cicatrices.

──────♡──────

¡Hola!

Tome la decisión, de publicar dos capítulos esta semana. (ya me estoy organizando para poder publicar con mayor continuidad).
(Ｔ▽Ｔ)

Gracias por los comentarios que dejan, leerlos me motiva a seguir.

Cuidense mucho.

Dani ♡