De camino a casa de Haymitch el frío congela mis huesos, pero creo que el frío viene de dentro de mí, el día ya se oscureció así como mi ánimo al saber que Katniss corre peligro por el simple hecho de ser demasiado obvio, en todo el trayecto no dejo de culparme a mí mismo por hacerle ver a Snow que Katniss es la persona más importante para mi, y eso, solo me hace mas vulnerable. Cuando llego a mi destino mi mentor ya está esperando afuera, me mira con el gesto hundido y se que lo ha visto irse.
Pasa chico- me dice mientras despeja la entrada.
Tuve una visita poco agradable- dejo su abrigo en el perchero de la entrada y lo sigo al comedor.
¿Qué es lo que quiere?- pregunta bebiendo de la botella que ya estaba sobre la mesa. Por un instante lo que acaba de pasar me abruma demasiado y empiezo a sentir una presión en el pecho demasiado fuerte.
Sabe de Katniss- me limito a decir ahogándome con las palabras, pongo las manos sobre la mesa y cubro mi rostro. Haymitch le da otro gran trago a su botella.
Dime cuales fueron sus palabras exactas, a Snow le encanta que leamos entre líneas- intento tomar un respiro profundo y concentrarme.
Le cuento todo lo que Snow me dijo, no fue demasiado, pero con eso bastó para erizarme todo el vello del cuerpo y sentir el peso del mundo sobre mis hombros.
Distracción- dice Haymitch dando un pequeño sorbo con gesto pensativo.
Lo miro expectante mientras bebe.
Snow quiere que hagas un show para que todos olviden como ganaste. Al parecer quiere un romance.
Cuando mi mentor plantea el plan se que Katniss se negara rotundamente, por lo que sé y he visto de ella, no le gusta depender de nadie, sé que me odiará por ponerla en peligro a ella y a toda su familia y amigos. Además de que será una odisea convencerla si también olvidamos lo cobarde que soy cuando estoy con ella, pero haré lo necesario para protegerla y si tengo que fingir un romance lo haré aunque salga lastimado, lo único que quiero es que Katniss y su familia estén seguras sin importar que me suceda.
En un intento por hacer que me odie menos al día siguiente voy temprano a la panadería, hago mis deberes y unos diez bollos de queso extra que pago a mi padre, a las nueve de la mañana voy a su casa para ver si puedo ayudar en algo, cuando llamo a la puerta Prim es quien abre, al verme esboza una sonrisa tímida y me hace pasar.
Katniss llegará en un rato- dice su madre cuando me ve sentarme.
Le agradezco y le entrego los bollos, Prim los mira con ilusión pero no los toca, así que le digo que puede comer los que quiera y ella emocionada toma uno que come con calma pero puedo ver la satisfacción en su rostro y eso calienta mi corazón.
Cuando llevo media hora esperándola platicando con su madre sobre el estado de Gale todos comenzamos a ponernos nerviosos.
Ya tendría que estar aquí- dice Prim.
Entonces recuerdo la advertencia de Snow, la alambrada ya estará electrificada hoy, como el imbécil que soy les pregunto por dónde entra Katniss al bosque, Prim no quiere decirme hasta que les digo lo de Snow y asustada me explica el lugar y trata de ir conmigo pero le pido que tenga todo preparado para cuando llegue si está lastimada, la dejo hecha un mar de lágrimas y a su madre con gesto preocupado, me excuso y salgo directo hacia La Pradera. En todo el trayecto imágenes de una Katniss electrocutada o con el cuello roto me atormentan, no puedo creer que fui tan estúpido como para olvidar que ella estaría ahí desde temprano, lo que parece un poco incensato de su parte ya que tan solo ayer castigaron a Gale.
Despejo esos pensamientos de mi mente y me concentro en llegar a Katniss pero la nieve no me ayuda en absoluto.
Cuando estoy cerca apresuro más el paso y la veo, está colgando de una rama tratando de cruzar la alambrada, siento que el corazón se me detiene y corro hacia ella, pero soy muy lento y la veo caer del la gran altura del árbol, grito su nombre al ver que se queda quieta en el suelo, finalmente llegó a esta y tocó su rostro con desesperación al ver que sus ojos están cerrados.
¡Katniss, Katniss! Abre los ojos preciosa- la veo fruncir el ceño y abrir sus bellos ojos grises.
¿Qué haces aquí?- me dice molesta.
!Eso no importa! ¿Estás bien? ¿Puedes levantarte? ¿Te duele algo?
Ella se ruboriza e intenta levantarse, hace una nueva de dolor y la ayudo colocando un brazo bajo su espalda, cuando intenta ponerse en pie suelta un grito ahogado, revisamos su pie izquierdo y nos miramos preocupados al ver que está muy hinchado.
¿Puedo llevarte en brazos? - le pido más que preguntarle, ella suspira exasperada e intenta caminar, pero le resulta muy doloroso, me mira ruborizada y me deja llevarla.
La tomo tímidamente, coloco un brazo bajo sus rodillas y otro en su espalda, la levanto con suavidad contra mi pecho y siento como mi corazón se acelera, su aroma me envuelve y siento cada una de sus curvas contra mi, no debo olvidar que soy un caballero así que me controlo y voy lo más rápido que puedo a su casa, tropiezo al principio pero me acostumbro fácilmente.
Tu pierna- me dice Katniss apenada. Suelto una pequeña risa.
No te preocupes, eres muy liviana- ella frunce el ceño y voltea a otro lado.
¿Qué haces aquí? ¿No deberías estar en la panadería?.
La pregunta es qué haces tú aquí, no es muy sensato venir cuando justo ayer empezaron los castigos, esto es peligroso Katniss.
Sé bien lo que hago, no soy estúpida, Gale necesitará más morfina y tengo que pagarte lo demás.
Me contesta muy molesta, y soy un imbécil por decirle eso, pero realmente estaba con esa duda.
Ya te había dicho que no es necesario que me pagues nada.
No aceptaré tu lastima.
La verdad es que no lo hago por lastima.
Ella me mira interrogante pero ya estamos en su casa, Prim nos abre y nos conduce rápidamente a la cama de Katniss, ya que la mesa sigue ocupada por un inconsciente cazador.
Prim y su madre revisan el pie de Katniss, al parecer solo es un esguince, pero no podrá apoyar el pie por lo menos por dos semanas a lo que Katniss está demasiado molesta, pero su furia estalla cuando Prim le lleva dos bollos de queso para el desayuno.
¡Primrose no toques eso! ¡No puedo pagarle esto también!
Pero son un obsequio Katniss, Peeta los ha traído para ti.
Le dice ella con ojos de cachorro, Katniss me mira furiosa.
Prim ve con tu madre.
Prim se apresura y sale del pequeño cuarto dejándome solo con ella en la habitación.
¿Qué es lo que buscas? No me voy a acostar contigo.
Me dice firme y con las mejillas ruborizadas, yo abro mucho los ojos y también me ruborizo.
Katniss, solo quiero ser tu amigo y ayudarte.
Nunca lo habías intentado, ¿que te mueve ahora?
Pienso en darme valor y decirle todo lo que ha pasado, pero se que si lo hago así me odiara para siempre y no quiero eso, quiero que un día me ame, quiero besar sus labios, protegerla, quiero que ella disfrute estar conmigo, que hable conmigo de su día, quiero tocar todo su cuerpo y que tengamos una vida de felicidad. Así que tomo una decisión.
Cásate conmigo.
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La esposa del vencedor
FanfictionEn los septuagesimo cuartos Juegos del Hambre Prim nunca es seleccionada, por lo que Katniss no se presenta voluntaria, sin embargo, Peeta si es el tributo masculino del Distrito 12, sorprendentemente gana los Juegos, al volver como vencedor la vig...