Baile

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Felice estaba preocupada por Wilhelm su Instagram estaba inactivo así como sus otras redes sociales.

—Tal vez ya eligieron a la princesa con la que va a compartir su vida — hablo una de sus amigas

—Si eso hubiera sucedido creeme que ya estaría en todos los medios de chismes— Felice hablo un poco molesta mientras volvía a recargar la página obteniendo siempre el mismo resultado.

Felice dejo su teléfono por la paz, pues la clase ya estaba por comenzar.

Agust se acercó a Sara mientras ella caminaba distraída por el pasillo.

—Iras a las caballerízas?— August la detuvo.

Sara se sonrojo y desvió la mirada, August estaba extrañamente más guapo de lo usual.

—Esta noche tendremos un baile, me gustaría invitarte— August sonrío coqueto mientras tomaba su mano.

Sara estaba en shock no podía creer que la estuvieran invitando a un baile.

—Pasare por tí — August se despidió de ella.

Sara suspiro enamorada y emocionada lo que le acababa de pasar era irreal.

La reina entro en la habitación del príncipe, se veía molesta.

—No puedo creer que te escaparás del castillo — hablo molesta

—No puedo creer que quieras que continúe aqui— Wilhelm se puso a la defensiva.

—Solo quería que tu mente estuviera despejada para que pudieras volver al instituto y terminarás tus estudios — la mujer alzó un poco la voz

Wilhelm se quedó sorprendido, pues él creía que lo nombrarian rey y su vida con Simon se había terminado.

—Hoy tendremos un baile en el instituto y anunciaremos tu regreso en cuanto termines los estudios volverás al castillo y te convertirás en un rey— la mujer se alejó de su hijo y salió de la habitación.

Wilhelm podía ver la luz al final del camino.

Llegada la noche Sara estaba estresada, no encontraba que ponerse.

—Cariño llegó un paquete"! — Su madre le hablo por las escaleras y Sara salió disparada mientras se preguntaba porque había llegado un paquete para ella.

La caja no decía nada solo llevaba una nota.

"Serás la más bella de todas".

Sin firma solo decía eso y Sara supo al instante que se trataba de August.

—Vaya un admirador secreto — Sonrío su mamá con ternura

Sara se sonrojo hasta las orejas, tomo el paquete y se fue hasta su habitación.

Con cuidado habría la caja y pudo ver lo que había dentro.

Un hermoso vestido de gala acompañado de un antifaz.

~Que cliché~ pensó al tiempo que sacaba el hermoso vestido.

Dentro de la caja venían otras cosas como los tacones que hacían juego con el vestido y un hermoso ramillete.

Simon entro en la habitación de su hermana y la vio probándose el vestido, quedó impactado.

—De donde lo sacaste?— pregunto mientras observaba los detalles del vestido.

—Eso no importa está hermoso— Sara estaba muy emocionada.

—Cariño, puedes bajar"!— su madre volvió a gritar.

Sara salió y se topo con una verdadera escena de cuentos de hadas, August llevaba puesto un precioso traje en color azul marino.

—Nos vamos?— August le dio la mano mientras le echaba un vistazo a Simón.

Simon continuaba emocionado por su hermana.

Ambos chicos se fueron y al pasar un pequeño tiempo la puerta sonó.

Simon abrió la puerta y los guardaespaldas de Wilhelm entraron.

—Su alteza lo espera— mencionó uno de los uniformados.

Su madre al igual que el estaba sorprendida pues al parecer sus hijos tenían buenos prospectos.

—Tenemos un tiempo exacto, así que por favor venga con nosotros le conseguiremos un traje a la medida — Simon estaba asombrado todo eso parecía un cuento de hadas

Jovenes altezasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora