Jovenes altezas

Te necesito

Sara acarició al caballo frente a ella.

El animal parecía algo incómodo con su precencia últimamente Sara no estaba de humor.

—Sucede algo?— Felice se le acercó.

—Disculpa?— Sara miro a Felice.

—Te ves diferente, te sucede algo?— Felice volvió a preguntar.

—Sucede que creí que le gustaba a un chico pero ahora parece como si no existiera— Sara estaba molesta

—Preguntale directamente— Felice se acercó a su caballo

August esperaba pacientemente afuera del salón de Simón

Simon salió observando su celular e ignorando por completo a August.

—Vaya que soy invisible— August mencionó sarcástico mientras se acercaba a Simón.

—Lo siento es solo que...— Simon dudó en si decirle lo que estaba pasando —olvidalo—

August sintió un malestar ver a Simón distraído y no ser la razón de ello le frustraba.

—Tu eres primo de Wilhelm crees que el esté bien?— Simon lo miro esperanzado

—Si el siempre está bien— Simon no pudo distinguir el tono molesto de August

—Por que no salimos esta noche?— Agust lo tomo en curva.

—Que?— Simon estaba eseptico pues no podía creer que August lo invitará.

—Si solo tú y yo— August sonrío

Al final del día Simon llegó a su casa tiro su mochila y se dejó caer en la cama la cita de August había sido muy inesperada.

August estaba feliz por primera vez el y Simon estarían solos.

Wilhelm por otro lado se escapó del castillo tras a ver tomado valor y muchas copas de vino, nadie le había puesto vigilancia pues como se encontraba en el castillo sus guardaespaldas fueron asignados a otras áreas.
Comenzó a correr apenas y cruzó el lumbral, necesitaba ver a Simón.

Simon salió de la ducha comenzó a vestirse cuando su celular comenzó a sonar.

—Simon— la voz borracha de Wilhelm se escuchaba del otro lado de la línea

—Will?— Simon estaba sorprendido

—Me gustas mucho— Wilhelm comenzó a reír

—Will que estás diciendo— Simon trataba de entender a Wilhelm y su extraña confesion —Donde estás?—

—Todo es falso— Wilhelm observo a su alrededor la nieve comenzaba a caer ligeramente pegándose a su cabello y ropa —Todo es falso, todo el mundo es falso—

—Will por favor dime dónde estás?- Simon comenzó a ponerse los tenis nervioso

—Nadie es real, las personas son de metal—Wilhelm comenzó a reír nerviosamente se sentía mareado el alcohol estaba haciendo estragos en el —Nada es real, pero lo que si es real es mi amor por ti—

Simon se detuvo en la puerta esa había sido una confesión?

-Por que mierda la parada de Autobús es tan grande?— Wilhelm se quejó

—Will no te muevas de ahí— Simon salió de su casa olvidándose por completo de August

Al llegar a la parada del autobús un borracho Wilhelm peleaba con el retrato de una imagen publicitaria

—Sabes soy el rey y mis guardaespaldas te harían pedazos— Will se tambaleó mientras seguía discutiendo

—Wilhelm"!— Simon se acercó hacia el mientras Will lo miraba

Will ni siquiera intento dar una explicación lo rodeo con sus brazos al rededor de su cuello y lo besó profundo.

Simon parpadeo un par de beses para después entregarse a ese beso sabor amargo, era realmente real lo que estaba sucediendo, Will se le había confesado y ahora estaban besándose bajo una brisa de nieve.
La nariz de Will estaba helada pero sus labios estaban húmedos y calientes.

Ambos suspiraron para después mirarse a los ojos.

—Te necesito— Will se aferró a Simón