Eren
Mis pensamientos flotaban como las nubes que apreciaba desde la ventana, no podía lograr concentrarme sabiendo que alguien que quiero demasiado estaba sola sin la protección que necesitaba. ¿Por qué todo lo que toco tiene que morir?, todo se marchita. Todo se echa a perder en mis manos, yo no disfruto de la felicidad por que ella teme de mi. Tuve dos clasificaciones de tres en esta semana y la verdad no me importo en lo absoluto, aunque mi madre si se preocupo por ello, pero ahora, no quería saber nada de estudios. Armin me ha ayudado mucho en tareas las cuales no he hecho y un "gracias" no era lo suficiente para tal esfuerzo.
-Iras al hospital.- asentí.
-Ire contigo, Annie nos puede llevar, tiene auto sera más factible para nuestro corto receso.-
-Genial- hasta ganas me daban de abrazarlos.
-Eren, estás tan vacío...- suspiro y me abrazo por el hombro.
-Gracias por darte cuenta.- suspire y volteé mi vista a la ventana del auto, fijando mi mirada en las calles por las que pasábamos.
❁
[___]
Un calor increíble se apoderaba de mí. No era
abrasador, como el fuego, sino algo distinto más maravilloso y perfecto. El shock en el que
estaba había desaparecido, estaba como antes
solo que, mis ojos ya no apreciaban más a este hermoso y cruel mundo. Aquel calor que me envolvía hace unos momento se posicionó en mi mano, su tacto lo reconocí al instante.-Eren- lleve mis manos a su rostro y con delicadeza lo acaricie, sus mejillas estaban
húmedas -¿Porque lloras?--Nada...- escuche un largo suspiro uno muy doloroso.
-Yo ya no puedo...-
-Lo sé, ya me informaron- tomé nuevamente su mano y me aferre a ella, no lo quería lejos de mi, peor ahora en mi estado, quería que se quedara, que me abrazara y nos besáramos de la misma forma en la que el mar besa la arena.
-Aveces... pienso que nunca debimos habernos conocido.- sorbí mis mocos.
-No digas eso...-
-Esta es la peor de todas las torturas... ningún ser humano merece esto, y tú, deberías estar preocupándote por tu vida, del futuro que te espera con los brazos abiertos. Pero no, estás aquí perdiendo el tiempo por mi culpa, mi maldita culpa.- mis sollozos se escuchaban entre las cuatro paredes blancas, si mal no recordaba, el silencio se hizo presente y la tensión en el ambiente era horrorosa.
-Es lo que tú crees, pero no es así, te... te quiero, enserio lo hago incluso te lo demostre
esa noche- su voz hizo eco en mi cabeza y sus
palabras me abrazaron el alma, recordé la
expresión de Eren cuando decia algo serio, su voz se volvía se volvía un poco más gruesa, estaba siendo sincero y no hacía falta ver sus ojos para estar en lo correcto, y aquel beso... sus labios, como olvidarlos. Empece a tocar sus
brazos con el fin de unirnos el uno al otro y él
se dio cuenta de mis intenciones, lo hizo, me
abrazo, nos abrazamos tan fuerte, tan fuerte
que sentía mis miedos romperse. Empece a palpar todo su rostro.-Quiero que te quedes...- acerque mi rostro a su cuello percibiendo su delicioso aroma varonil. Él asintió y yo sonreí.
❁
-Armin y Annie son pareja.- habló
-Te imaginas como seran sus hijos, que narices
se cargaran- me acomode en la confortable cama de Eren. volví a salir del hospital, le pedí a Nanaba que me dejara ir porque en serio no lo soportaba, ella acepto un poco insegura y dijo que la llamara si pudiera todos los días para saber de mi estado. Eren se acomodo a mi costado y comenzó a juguetear con mis dedos.-¿Tienes hambre?- negué y acaricié su cabello.
-¿Ya tienes avanzado algo con lo de tu proyecto?, me gustaría escucharlo.-
-Es que... Armin lo tiene pero en palabras científicas, yo lo redacte de otra forma- escuché las hojas a las cuales daba vuelta con tranquilidad -¿Quieres que lo lea?-
-Si, hazlo- suspire.
-La paciente de la cual les hablaré hoy es Zhacharias, una joven de 17 años de edad con insomnio familiar fatal. La vi por primera vez en una cafetería cerca de la universidad donde estudio, mi compañero, Armin y mi persona visitamos el lugar con la intención de hablar acerca de nuestro proyecto, cuando ingrese al local la señorita de orbes (color) no dejaba de observarnos, era algo incomodo pero Arlert me comento que ella vivía en el piso de arriba de su departamento y que era amiga suya.
-Armin me daba miedo ¿Cuándo dijo eso?-
-No lo recuerdo pero dejemos eso ahí- reí -Mi compañero me informo que él se percato de esto cuando la veía salir en las madrugadas y que ella se quedaba despierta hasta el amanecer, todos los días. Hablamos con ella para ganar algo de confianza y comentarle que la necesitábamos en un deber universitario, pero eso fue más allá de lo que pensamos y nos hicimos amigos. Progresivamente sufría de taquicardia, en ciertas ocaciones sus ojos se desorbitaban de la realidad. Olvidaba el nombre de los objetos que la rodeaba e incluso nombres de personas, incluyendo el suyo. Su primer bajón fue en el departamento donde vive con su madre, su diagnostico, presión arterial baja, bajísima.-
-¡Eren, Armin al teléfono!- grito la señora
Carla.-Aveces solo llama para joder, ya vengo- lo
escuche correr y aproveche el momento para
ir al baño, tomé de apoyo la mesa de noche y
las paredes, gire la perilla y pise un charco que
supongo era de agua. Salí con la misma
precaución de no resbalar y me lance en la
cama, el suelo mejor dicho, la nariz me dolía horrible pero no estaba rota, me subí a la cama y me acosté nuevamente.-¿De dónde te caiste?- me reí, oh vamos solo
imaginarme en el suelo...-Jajaja si, creo que fue gracioso- me enrollé en las sabanas y cerre los ojos.
-Ajá si, tiene un hematoma en la frente.-
-Que importa, ¿ya es de noche?-
-Si importa y si ya lo es, voy a salir, tengo que
ir a ver algo con Armin, le dire a mi madre que te coloque alguna crema para aliviar el dolor.--No siento dolor, espera Eren. ¿Y si aparece
una cucaracha?-Se amiga de ella.- volví a reírme y me despedí
de él aun sabiendo que volvería, estaba loca.La señora Carla me había traido unas colchas demás, algo de chocolate caliente y la crema que me puso la cual no fue necesaria, el frío era insoportable aun cuando estaba totalmente abrigada me sentía súper cansada, más de lo normal, toque con cuidado la bola que tenía en la frente y no dolía mucho, recordé una de mis canciones favoritas de Tv girl "Cigarettes out the window" no soy buena cantando pero comencé a tararear y a medida que lo hacía sentía que dormía tal vez era un milagro, el más deseado por muchos años, mis piernas se relajaban, en verdad tenía mucho sueño, demasiado diría yo. ¿Era algo bueno?, quien sabe, la sensación era increíble, tenía que aprovechar, lami mis labios con sabor a chocolate, era bueno pero no tanto como los labios de Eren... respire profundamente y solo
me deje llevar.Entonces tomo lo que es mío por derecho eterno.
Tomo tu alma en esta noche.
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𝐕𝐢𝐝𝐚𝐬 / 𝐄𝐫𝐞𝐧 𝐘𝐞𝐚𝐠𝐞𝐫 𝐱 𝐑𝐞𝐚𝐝𝐞𝐫
Hayran KurguMientras las horas pasan, te haré saber que necesito preguntarte antes de quedarme solo... como se siente descansar en tus labios pacientes. Eren jaeger x reader