Umbra | Sombras [Jasper Hale]

𝐂𝐚𝐩𝐢𝐭𝐮𝐥𝐨 ３

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ʜᴇ༄

Durante la noche, Alice había empezado a sentirse increíblemente descompuesta, mucho más que en los días anteriores, haciendo que todo el clan se sintiese preocupado por su salud. Cuando Carlisle le preguntó qué era lo que la pequeña vampiresa estaba sintiendo, ella alegó sentirse como si hubiera comido alimentos humanos y esa sensación le provocaba una gran necesidad de regurgitar todo el contenido de su estómago, aun sabiendo que no tenía nada en su interior.

Por toda la semana que había pasado, las visiones de Alice hacia los vampiros de ojos violeta había aumentado de potencia, sintiéndolos moverse o respirar nuevamente el aire, y su malestar empeoró cuando en una visión, la vampira no pudo salir del trance, preocupando a todos los presentes, incluyendo a Edward que pudo ver todo lo que estaba pasando, y sintiendo como su poder mental era absorbido por aquellos desconocidos.

No sabían si había sido por pura suerte o coincidencia cuando finalmente se liberaron del frío agarre de acero, cuya sensación le provocaba escalofríos a Edward. Un sentimiento terrible invadió su pecho cuando esa misma noche fue a visitar a Bella, algo que incluso la propia humana se percató de ello, más no preguntó, por lo que Edward se sintió completamente agradecido por ello.

Bella sentía que algo no estaba yendo del todo bien. Los Cullen estaban alertas y tensos todo el tiempo, al punto en que una vez que cerró la puerta principal de un azote, provocó que los vampiros aparecieran corriendo hacia la entrada preparados para atacar. Cuando la chica preguntó, le dieron vagas excusas, y por un momento, Bella llegó a pensar que tenía algo que ver con las desapariciones y asesinatos que se estaban efectuando en Port Angeles y en Seattle.

Jasper, por otro lado, estaba dando todo de su poder para calmar la situación, especialmente cuando Bella estaba en casa, todo con el fin de no preocuparla y asustarla más de lo que ya se encontraba, pero... ¿Cómo no estarlo? En cierta manera la muchacha se molestaba por la falta de confianza por parte de los vampiros, pero a la vez estaba algo agradecida por mantenerse en la ignorancia. Si estaba sucediendo algo terrible que incluso los Cullen se sentían intranquilos, ¿cómo podría ella estar bien siendo una simple humana? Si al menos fuera una vampiresa todo sería distinto...

—Creo que vomitaré—Balbuceó la pequeña vampiro mientras se sentaba en el sofá con las piernas estiradas.

—¿Has vuelto a tener visiones de ellos? —Preguntó Esme ingresando al salón con ropa recién doblada y calientita, pues la había sacado del secador.

Todos estaban presentes en el salón, como era costumbre en los fin de semana, por lo que Esme empezó a entregar las prendas que lavó con tanta delicadeza. Cada uno de los integrantes de la familia corrieron a guardar su ropa, especialmente Rosalie, pues alegó que debía preparar su outfit para el día siguiente, haciendo que una enfermiza Alice también fuera corriendo a su dormitorio a hacer exactamente lo mismo.

Jasper se encontraba preocupado por la chica, tanto que empezó incluso a investigar en la biblioteca de Carlisle un montón de libros sobre mitología y leyendas europeas, esperando encontrar alguna respuesta después de todo lo que Alice informó sobre los desconocidos.

La vampiresa seguía muy de cerca a los cuatro vampiros, al punto en que parecía como si una parte de ella se encontrara con ellos, como si los estuviera guiando hacia su hogar, algo por lo que Jasper se preocupó de averiguar, aunque siempre terminaba fastidiado pues no encontraba absolutamente nada.

Carlisle también ayudó a Jasper en lo que más podía, pues tenía que asistir diariamente y de vez en cuando, en la noche, al hospital, por lo que gran parte del tiempo Jasper se encontraba solo en la biblioteca leyendo o investigando en internet.