Capitulo 9 T2

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El entierro de Takeomi paso entre sus más cercanos Mikey obviamente no asistió la verdad le importaba poco, rin, Ran, Sanzu Sorfen y Kakucho y unos más estaban dando aquella despedida final, todos poco a poco se retiraban de aquel cementerio, Sorfen quedándose al final, la lluvia se hacía presente, aunque sin importancia para ella, acaba de perder a su hermano, a su protector cuando niños, a su compañero y amigo durante su difícil infancia de ambos.

Sanzu: -este con una sombrilla se acercaba- Hermana debemos irnos

Sorfen: -su mirada seguía fija en aquella lapida con el apellido "Akashi"-

Sanzu: Sorfen -este tocaba el hombro de su hermana-

Sorfen: Takeomi se fue...

Sanzu: Perdóname hermana

Sorfen: -Los recuerdos invadían su mente- Takeomi idiota... por que

Sanzu: Vámonos te llevo a casa -este tomo la mano de su hermana para guiarle-

El camino a casa fue silencioso, ninguno de los dos dijo nada en el trayecto dentro del auto, al llegar ambos salieron entrando aquel apartamento, Wakasa quien les recibió a ambos notando a Sorfen empapada, fue por unas toallas dándole una a Sanzu y cubriendo a Sorfen quien aun seguía con su mirada vacía, Wakasa sabía todo lo acontecido, le había dolido haber perdido a su otro amigo, pero darle una despedida adecuada iba a ser difícil.

Sanzu: Y la bebé

Wakasa: Está durmiendo, Sorfen quieres algo

Sorfen: no.... déjalo así -decía yendo a la habitación de la bebe-

Sanzu: No quiso decir nada desde que salimos

Wakasa: Es obvio, Takeomi podría haber sido un gran idiota...pero fue su compañía antes de ustedes dos

Sanzu: Wakasa tengo que hablar contigo de algo

Wakasa: -este observaba al pelirosa-

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Sorfen entraba en aquella habitación notando aquella cuna, donde dormía su pequeña, al acercarse más podía ver a aquella beba dormida pacíficamente, un sentimiento se hacía presente, pues los momentos donde recordaba a Takeomi y ella de mas jóvenes dolían en su corazón, sus abrazos para mantenerla segura lejos de sus padres abusivos, las canciones de cuna que el componía para ella para poder dormir, aquella sonrisa de su hermano.

Cada recuerdo venía a su mente, las risas de ambos en aquellos escasos momentos felices que tenían ambos, todos aquellos recuerdos en su cabeza, había perdido a su hermano, al que quizás no fue el mejor de todos, pero Sorfen juraba que si volviera a nacer y tuviera que escoger lo que escogería a el mil veces más.

Cada recuerdo venía a su mente, las risas de ambos en aquellos escasos momentos felices que tenían ambos, todos aquellos recuerdos en su cabeza, había perdido a su hermano, al que quizás no fue el mejor de todos, pero Sorfen juraba que si volviera...

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