ᴘᴇʀᴅᴇᴅᴏʀ - ᴊᴀᴋᴇʜᴏᴏɴ

XXIV

-Lo siento...- Jake se disculpó mientras seguía sollozando de rodillas en el suelo -Y-yo... tenía miedo...

-¿Miedo? 

-S-sí, de que sea verdad... Tenía tanto miedo porque no me decías nada, esperaba y sigo pensando que es real.... ¿No lo es verdad? Por favor, aunque lo sea, dime que no, dime que sigues amándome. 

-Amor...- al percatarse que una niña pasaba por la calle, supo que no era el lugar indicado para hablar, tomó las piezas desparramadas de la manilla colocándolas en su bolsillo, tomó la bolsa de leche de fresa en su mano y con ambas sostuvo a Jake como un niño pequeño haciendo que enrede sus piernas en su propia cadera y que sus brazos se sostengan de su cuello. 

Jake tan solo sollozaba abrazado a Sunghoon quien parecía no tener ninguna dificultad para caminar con él en brazos, era una verdadera suerte que no haya nadie en esas calles, pues personas famosas como ellos no caminaban por barrios tan lejos de la ciudad como era ese parque.

Sunghoon llamó al hotel más cercano reservando la primera habitación disponible, aunque era algo cara y tenía sólo una cama, bueno, si Jake no quería dormir con él, podría dormir en la cama y él en el suelo, no le importaba. 

Por suerte aquel hotel estaba a solo 5 casas de ahí, entró al hotel y al ascensor, escuchó los sollozos de Jake y eso le destrozó el corazón, acariciaba su espalda levemente hasta que se abrió la puerta que daba a su habitación, las luces se encendieron automáticamente gracias al censor de movimiento. 

Sunghoon quiso depositar a Jake en la cama, pero este no quería separarse de su menor. 

-No... no me sueltes- ocultaba su rostro en la hendidura entre el cuello y hombro de Sunghoon. 

El menor sonrió para sus adentros sentándose él en aquella cama con Jake en su encima por pedido de este. 

-Amor, mírame- se sacó el barbijo para después acercarse a Jake y poder ver su rostro.

Jake no quería hacerlo o Sunghoon vería su rostro lleno de lágrimas y sus ojos hinchados por las mismas. 

-¿Es verdad?... Lo de ese artículo... ¿Es verdad? ¿Quiénes eran esas chicas?  ¿Porqué estabas con ellas? ¿Po-por qué nunca me dijiste a dónde ibas?

-Por favor, mírame y respondére todo lo que quieras, pero quiero mirar tu rostro. 

Y aunque a Jake le diera mucha vergüenza mostrar su rostro en ese estado, lo hizo. 

-No, no es verdad- respondía sus preguntas por orden mientras limpiaba los ojitos de su mayor -Una es mi hermana, la otra... una antigua compañera de danza con la que me encontré hace más o menos una semana- besó su roja  nariz -No te dije de ellas porque quería que te intereses por mí, que me insistieras un poco, bueno, al principio pensé que te enojarías si te lo decía, pero después querías que me insistieras un poco más, lo siento.

-M-me asusté tanto... quería que me llamaras, me sentí tan inquieto e inseguro...

-Si tanto te inquietaba ¿Por qué no me volviste a preguntar?

-Creí que te molestarías si invadía tu privacidad... que sientas que estoy siendo demasiado pegado a ti, tenía miedo de que te alejes aún más... dejaste de dormir conmigo, salías a cualquier hora y las veces que te pregunté... me evadías o ponías escusas. 

-Yo... lo lamento- se pegó a la clavícula de Jake aprovechando la posición en la que estaban -Dejé de dormir contigo porque... tenía miedo. 

-¿Qué?

-Sí... esa vez que te mordí... te dolió ¿no?... no quería que pasará otra vez, porque la vez que pasó, realmente no era mi intención hacerlo, así que para protegerte, tenía que separarte de mí, esa marca quedó ahí por varios días y con cada día que pasaba me sentí más y más culpable...

-Pffft...- Jake empezó a reír contagiando a Sunghoon con él, ambos estaban asustados, la falta de comunicación había provocado aquella  pelea de antes. 

-Ambos teníamos miedo, supongo que somos unos miedosos- Sunghoon volvió a unir sus frentes, pero ahora ambos tenían una sonrisa en los rostros. 

-Me gusta tu cabello- Sunghoon igual se lo había teñido junto a los otros miembros, ahora el cabello de Sunghoon era platinado.

-Y a mi me encanta el tuyo, ¿sabes? vi muchas ediciones de ENGENE y sabía que te quedaría bien, pero no esperaba que te quede tan bien, te ves hermoso- las mejillas de Jake enrojecieron ante las últimas tres palabras.

-Ya es tarde- se sintió tímido y nervioso- ¿podrías darme las piezas de la manilla? La arreglaré, se siente raro estar sin ella.

-Oh, claro, pero tengo algo que no se romperá. Aprovechando que Jake estaba de pie sacó una cajita de su bolsillo abriéndola dejando ver dos anillos, uno un poco más grande que el otro.

-¿Sunghoon?...

-S-son anillos de pareja...- se puso muy pero muy nervioso, esa era la razón por la que desaparecía casi todas las tardes y por la que no dejaba a Jake ver su teléfono, su hermana y él buscaban el anillo perfecto. 

-Pero nosotros...

-No somos... y eso es a lo que vengo- aclaró su garganta -¿Quieres ser oficialmente mi novio, Kim Sunoo? Sé que no soy perfecto, soy berrinchudo y algo infantil, soy posesivo y celoso, pero cualquier cosa que no te guste de mí, por favor, dilo y trataré de cambiarlo para ser el chico de tus sueños, lo prometo.

-Yo...