ESPECIAL I

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8 de febrero del 2026, día antes del cumpleaños de Jungwon

-Sí, mamá, iré a casa el viernes de la semana siguiente- Jake habló por teléfono con su madre -yo igual te quiero, adiós- y después de decir aquellas palabras sintió una mano pasearse por su torso, una mano.  bastante conocida.

-No me dijiste que irías a tu casa la próxima semana- Sunghoon levantó su otra mano y así abrazó el torso y cintura de su lindo novio. 

-Acabo de planearlo hoy, además, no es nada del otro mundo, mi cuñada dio a luz hace casi dos semanas, aún no puede salir del hospital y cuando salga iré a casa unos dos o tres días a visitarla, puedes ir conmigo, mamá  quiere conocerte, mamá quiere conocerlos a todos, tenemos esa semana libre así que podemos ir todos. 

-Conocer... a tu mamá- nervios, eso era lo que Sunghoon sintió ¿y si no le agradaba? ¿y si los separaba? Ay, no, no, no.

-Sí, pero en persona, ya te la presenté en una videollamada hace 8 meses- se dio la vuelta y como su novio estaba apoyado en la cabecera de la cama, aprovechó para sentarse en sus piernas y acostar su cabeza en el hombro de  su pareja. 

-Sí le agrado... ¿no?- sostuvo el cuerpo de su noviecito en un abrazo.

-Claro que le agradas, no por nada quiere conocerte, además ¿recuerdas lo que me dijiste hace 4 años?  "Es mi felicidad, no la de ellos, tú me haces feliz"- repitió aquellas palabras que tanto le habían encantado.

-Bien, si quieres que vaya, yo iré- apretó un poco más el cuerpo que estaba entre sus brazos, y se acomodó en la curvatura del cuello y hombro de Jake, plantó un pequeño besito y entonces alguien tocó la puerta de su habitación,  Sunghoon se quejó un poco pero finalmente habló -pueden pasar.

-¿Hay algo en especial que quieran comer? saldremos a comprar comida con Sunoo- Ni-Ki acababa de entrar a la habitación. 

-¡Quiero un Gimbap!- aún en su posición, Jake levantó sus brazos, hace unos días que ya tenía antojo de esa comida. 

-Yo quiero Yakitori, por favor- se abrazó a la cintura de Jake mientras miraba a Ni-Ki -ahora sal, nos interrumpes- su rostro estaba pegado el cuello de Jake. 

-Si, si, si, adiós- rápidamente se dio la vuelta y volvió a cerrar la puerta -¡volveremos en menos de una hora!- gritó desde afuera de la habitación. 

Sunghoon sonrió satisfecho de estar solos nuevamente mientras Jake suspiraba. 

-Sunghoon sabes desde hace 5 años que somos pareja, no tienes porqué portarte así- se separó del abrazo, mas no bajó de sus piernas.

-Solo quiero tener tiempo a solas contigo.- lentamente tomó su mano mientras su labio inferior se abultaba, como un berrinche. 

-Eres un niño mimado- Jake tampoco podía contra los berrinches de Sunghoon, no eran tan comunes y esa era la razón por la cuál eran tan apreciados por Jake.

Hace un mes que estaban "comprometidos" no pudieron hacerlo oficial, pues no era legal en corea, pero Sunghoon se lo indicó el 27 de febrero del 2025, en unas vacaciones que tuvieron, era invierno en Corea y pese a la baja temperatura, ninguno  sintió una pizca de frío, ambos estaban cálidos esos días, no viajaron, se quedaron en casa junto a sus demás compañeros y aque día, en el anochecer, cuando el sol se estaba escondiendo, Sunghoon se lo propuso, no le importó a ninguno que su boda no fuera legal, acordaron que sería el 23 de noviembre del 2025, bonita fecha. 

-Ese anillo se ve muy bonito en tu dedo- Sunghoon sonrió recordando la noche que le propuso "matrimonio"

-Todo lo que tú me das es bonito.

-No, solo se ve bonito porque tú lo tienes puesto- habló con total razón, pero de igual forma, las mejillas de su novio se enrojecieron. 

-Mañana es el cumpleaños de Jungwon- cambió el tema antes de sentirse más avergonzado.

-Así es. 

-¿Tienes algo planeado?- Jake quería regalarle un nuevo televisor, pero no estaba muy seguro. 

-Jay, Ni-Ki y yo queremos hacer una fiesta aquí, comprar sake, alcohol, cerveza, esa clase de cosas- eran mayores de edad, no había problema con tomar alcohol. 

-Yo no soy resistente al alcohol y lo sabes. 

-Sí, pero estarás en casa, no pasará nada malo, te lo prometerá- alzó su meñique. 

-Esta bien, creeré en tí- y unieron sus meñiques para después estar acurrucados en la cama mientras esperaban la comida. 

No es como si algo malo fuera a pasar en una noche ¿no es así? 

ᴘᴇʀᴅᴇᴅᴏʀ - ᴊᴀᴋᴇʜᴏᴏɴDonde viven las historias. Descúbrelo ahora