¿Enserio no hay más que hacer que llorar? Cuando todo se acumula, cuando todo empieza a desbordarse, cuando todo pequeño error o problema se convierte en algo monumentalmente enorme. No que más que hacer que llorar?
En esos momentos en los que estás harta de la escuela, harta de los problemas en casa, harta de los problemas familiares, harta de los gritos, harta de los golpes, harta de las peleas, harta de la vida misma. No queda más que llorar?
Cuando todos creen que sus problemas individuales son más importantes que los tuyos, queriendo que solo que los escuches, entiendas y consueles a ellos sin darle importancia a tus sentimientos. ¿No queda más que reprimirnos y llorar en silencio y soledad?
Cuando todos te tachan de fría e insensible, porque aparentemente no tienes problemas solo porque tienes una estúpida sonrisa marcada en la cara todo el día y una actitud alegre. Solo porque la vida te ha enseñado qué es mejor callar que hablar, solo porque nunca saben qué decirte si les cuentas solo un poco de tus problemas, solo porque has aprendido a fingir con tanta facilidad que ya no sabes cómo es que en realidad te comportas. ¿Lo único que queda es esperar a que las luces se apaguen y el reloj marque las 3:00 y llorar?
Cuando no puedes expresarte porque muchos te odiarán y te dejarían olvidada como un recuerdo no deseado y te ves obligada a seguir la corriente de gente. ¿Lo único que queda es bajar la cabeza y llorar en tu habitación?
Cuando intentas algo con todas tus fuerzas y solo te dicen que eres un inútil, cuando lo pones empeño a todo lo que te piden, ya sea académico, familiar o de parte de tus amistades y solo te repiten una y otra vez que eres inútil, que no sirves para nada, que no puedes hacer nada, que nunca vas a lograr nada. ¿Solo nos queda llorar en nuestras camas hasta quedarnos dormidos con la música a todo volumen?