el mejor amigo de mi novio

15. Mas tiempo con èl ♡

Quedo embobada por la estructura de la institución. Hay puertas de vidrio en la entrada, el color verde musgo de las paredes adornado por dibujos en siluetas en negro, rodean una parte del establecimiento, sigo con mi mirada cada línea, las cuales forman siluetas de personas bailando y cuando entiendo al fin todo el retrato siento como los nervios me invaden poco a poco cada parte de mi cuerpo llevándome a detenerme cuando siento la valentía que sentía cuando me anime a venir. No, quizá no debí venir porque estos nervios no los considero como bueno y el pánico me hace voltearme pero me detengo con los ojos desconcertados de mi acompañante que me observa como veo fugazmente el lugar detrás de nosotros y vuelve a mirarme, repasa la vista por ambos ojos queriendo estudiar mi mirada, que no expresa otra cosa más que temor al seguir.

Me da pánico y no lo entiendo del todo. No me ha pasado cuando me he ido a inscribir a los cursos, en ninguno pero por alguna razón estar aquí parada me congela y el par de ojos oscuros me observan suavizándose.

— Tengo miedo...miedo de equivocarme o quizá sea el camino correcto y eso es lo que más me asusta—su respuesta es tomarme de la mano muy lentamente y temeroso a mi reacción. Me aprieta la mano cuando ve que no me alejo, lo contrario siento calma con sus manos sobre las mías.

— No estás sola, estoy aquí contigo—dibuja una sonrisa tan bella que hace que respire buscando calma. Asiento tomándome segundos para aceptar el hecho que estoy por tomar un paso.

Puede que falle, pero al menos lo intentare y eso es un montón. Si me equivoco del lugar será solo eso pero hay un hilo en mi cuerpo que me dice que no me equivocare, el hilo me incentiva a devolverle una sonrisa amplia. Y volvemos a nuestro camino hacia el lugar.

— Gracias por acompañarme Kyle—lo miro de lado cuando ambos pasamos de lado y saludamos al portero que nos indica el área administrativa.

— A ti por dejarme hacerlo, el hecho de que me eligieras para hacerlo es perfecto de verdad.

Me detengo un momento y él nota cuando me quedo atrás. Sus palabras logras caer como una bola pesada que me llena de un sentimiento acogedor para con él, quien ya se ha metido y quedado en mi corazón. Sin duda tengo un gran amigo a mi lado. Quiero estudiarlo, saber de él y mi mirada fija en él hace ver todo medio raro. Pero me desconecto cuando la música en alto y la canción que reconozco al momento nos hacen buscar el lugar de donde viene la música. Camino casi sin hacer ruido y encuentro una pared de vidrio, en el cual se ve un grupo en fila del otro lado mientras una pareja se pone en el centro de la sala.

Set Fire to the Rain de Adele suena.

Me quedo como encantada mirando como la pareja se va alejando a pasos lentos, la chica se toca el pecho unas cuantas veces para dar un giro en punta de pie que me hace abrir la boca de sorpresa y fascinación. Se mueve como si fuera la dueña del baile, pero también baila con el sentimiento de la canción en ella, hace las expresiones de dolor que siente cuando se acerca, al igual que esa mirada decepción que mientras baila sola muestra, el chico solo se centra en mirarla, querer tomarla y cuando lo hace la hace acostarse y la levanta. Es como ver al viento bailar, como se mueven al compas. La manera en la que bailan me hace sentir la canción profundamente en el pecho, como si la letra cobrara vida y ellos logran transmitir lo que la canción verdaderamente quiere decir.

Me encuentro con el brazo enroscada al de Kyle, que también ve lo que yo fascinado con cada paso que dan.

Todo termina, la profesora los felicita, es lo que logro ver por la sonrisa de ambos y el aplauso de todos. El grupo se dispersa y casi me caigo cuando un rostro aparece a través del vidrio. Por el susto permanezco con la mano en el centro de mi pecho. Casi me da un infarto. Hasta que el chico sale y viene hacia nosotros. Saluda a Kyle y luego su sonrisa se agranda y es cuando lo reconozco como el chico que me agarro en aquella calle y me unió a su grupo de baile.