❝La desaparición de N☹ra❞
Ansiedad, miedo e impacto.
Tres simples palabras, tres principales efectos que descubrí luego de pasar casi veinticuatro horas sumido en completa oscuridad, con el frió traspasándome los huesos como el taladro a una pared, o con las ratas despertándome al morderme los pies.
En el silencio de la ofuscación, cuando todo esta en repleta calma, la soledad me busca y me impregna para atraerme con ella, regresándome los recuerdos, las penas que en mi corazón se clavan...los pensamientos que me duelen, sombras que del cielo bajan.
Y es ahí cuando viene esa soleada mañana de diciembre a mi cabeza, me veo a mi mismo en el parque intentando balancear a aquella rubia que me sonríe con picardía en los columpios y otros juegos infantiles en vez de mi sesión de contabilidad en la oficina de papá que seguro me aburriría por completo.—Se que, la última vez dijiste que ni siquiera podías mirarme.
—Y heme aquí—dije actuando tranquilo.
—Domink y yo decidimos darnos otra oportunidad—me confesó y yo detuve mi acción de golpe, el columpio dejó de moverse—Me pidió que fuera su novia luego de disculparse y yo acepte.
—Genial—murmuré y volví a empujarla como si el tema no me afectara en lo absoluto.
—¿Sólo eso vas a decirme?.
—Bueno, no sé qué quieres escuchar de mi Sophie. Sabes lo que opino acerca de ese tipo.
—Te amo—soltó dejándome sin aliento.
La chica se bajó del columpio para mirarme de frente. Sus ojos conectaron con los míos al momento. Sentí mi mirar cristalizarse, pero había decidido no derramar ni una sola gota esa tarde.
—¿Juegas conmigo?—cuestione sin expresión alguna—¿Te burlas de mi?
—No podría. Sabes que sin ti no vivo y sin ti no muero. Pero no encuentro paz en ningún lugar, y no puedes estar con este demonio enfermo.
—No, ahora lo sé.
—Eso no me impide dejar de sentir lo que siento ahora.
—¿Cómo puedes decir algo tan fuerte con tanta simplicidad?
—Porque me es sencillo amarte. Y sé que tú también lo haces, me amas.
—Si, es verdad. Te amo Sophia. Pero soy feliz sin ti—respondí causando que su rostro se contrajera—Amo lo que soy cuando estoy contigo. Y se que soy un cobarde por huir, pero...creo que ya no te necesito y tú debes aprender a no necesitarme.
—Prometiste no dejarme.
—Y no lo haré. Tú amigo siempre va a estar para ti, pero el hombre que acumula sus sentimientos de amor dentro suyo, ese, está desapareciendo por completo.
—¡Jungkook!—escuchó un grito acompañado de una fuerte cachetada propinada en mi mejilla, y luego un fuerte ardor le acompaña.
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Porque si el L⃨O⃨B⃨O⃨ aparece...
FanfictionNora, una chica amante de los libros, el arte, la escritura. Jeon, el chico nuevo y extraño con problemas para controlar su ira. Ambos intentando escapar de un internado estricto, sin saber que se avecina un perturbador secreto. Sólo habrá una únic...