-Hermanastros- 🦋Gabe

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El señor después de un momento de silencio hablo.

-Bueno mire , le hablamos del centro médico de salud *****  lamentablemente su hijo tuvo un grave choque, necesitamos que venga a firmar las hojas que se necesitan para su cirugía de urgencias.

-E.....claro voy para allá -dije en shock.

-Quien era? -dijo llegando- que te paso, estas pálida! -toco mi rostro.

-Gabe está en urgencias, necesita firmar usted unos papeles para que lo operen de urgencia, tuvo un accidente -dije y corrí a mi habitación.

Tome a mis bebés y al bajar los acosté en su carriola de dos, tome mi bolsa y al salir Perla ya estaba abriendo el carro.
Después de subirnos le dije en qué hospital estaba Gabe, condujo lo más rápido que pudo, al llegar se bajó ella y se apuró, pues necesitaba firmar los papeles.

-mierda -hablé sin poder bajar la carriola de la cajuela por los niños.

-Gusta que le ayude? -dijo un chico y asentí.

-Gracias -dije después de que él sacara la carriola y cerrara la cajuela.

-No hay de que -sonrió- hasta luego .

Asentí acomode a los niños y camine rápidamente para urgencias.
Al entrar Perla estaba al fondo, abrazada de un señor que estaba vestido de azul.
Corrí a ella y al llegar me miro.

-Lo siento tanto....tanto mi vida -me abrazo y yo sin saber correspondí.

-Que sucede Perla? -dije y la separé para mirarla directamente.

-Fue muy tarde mi niña, Gabe no aguanto.....él falleció -al Perla decir eso mis piernas se bloquearon.

Estaba en shock, el pánico entró en mi y de inmediato negué. Perla me sostuvo y me sentó en las sillas de espera.

-Esto no es verdad -dije llorando- Perla dime....dime que es mentira! -estaba apuntó de colapsar.

Sentía la impotencia, el dolor, el enojo de no haber impedido que Gabe se fuera.

-Em....necesito que firme su acta de defunción...-hablo el enfermero.

-Ahora voy -entendía que Perla estuviera en shock, pues....Gabe había muerto.....

Después seguí llorando y sola ya que Perla se llevó a los niños, ella sabía que yo no podría cuidarlos , pues estaba en shock emocional y tenía una parálisis externa.
Unos minutos después llegó Perla, con sus lentes puestos.

-Vámonos mi niña...tenemos que ir a contratar un equipo de funeraria -hablo ayudándome a levantarme.

-Perla, es la una de la madrugada, no creo que algún lugar esté abierto -dije y trate de regular mi respiración.

-Vamos a casa reina...-me tomo del brazo y salimos del lugar.

Llegamos a casa, al bajarme de la camioneta y empezar a caminar mi respiración se empezó a agitar, sentí un sudor frío, mis rodillas se doblaron y me cuerpo cayó al piso.

(...)

-Amor....ey escúchame, necesito que me dejes ir, necesito cuidarlos a todos, pero para eso debes aceptarlo amor y también despertar -hablo mi esposo y me beso la frente delicadamente.