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El teatro que usaba la facultad de artes para sus eventos era el más grande de la ciudad, allí tenían lugar las obras de culto y recitales importantes. Sin embargo, en esta ocasión, se llenaría un cuarto de éste con los estudiantes y sus familiares.




El eco de sus murmullos retumbaba por el lugar casi vacío, de donde Beth ocupaba asiento en la primera fila, entre Iris y Meredith. Las dos jóvenes platicaban animadamente de lo que harían luego del evento pues había una fiesta planeada con meses de anticipación, una en la que ella no estaba interesada en ir más se los había prometido.



Miró sobre su hombro el par de asientos vacíos junto a su mamá y Marcos —quien había pedido el día libre en cuanto supo la fecha—, ni Bruce o su padre estaban allí aún.



—Si llegará—dijo Iris robando su atención al notarla distante—te quiere un montón.



—¿Hablas de Bruce o su papá?—preguntó Meredith confundida.



—Definitivamente de Bruce—respondieron ambas al mismo tiempo.



—Oh...no sé si eso es triste o lindo. Y me da miedo decidirme.



—Ya me da igual—le restó importancia con un movimiento de mano—mientras mi papá insiste en que consiga trabajo y deje la casa, Bruce me ofreció mudarme con él.



Sus amigas, cada una a un costado, le miraron con los ojos abiertos de par en par.



—Obviamente aceptaste ¿verdad?—giró la cabeza hacia Iris pero bajó la vista—¿VERDAD?



—Desde pequeña quise vivir en una torre...para sentirme princesa—fantaseó Meredith con una sonrisa—y tú hasta príncipe tienes. Digo, por algo lo apodan así ¿no?



—Yo quería ser jedi de pequeña. Quiero hasta la fecha.



—No cambies de tema, Bethany—exclamó otra vez la morena, haciendo que Beth y Meredith se callaran.



—Le dije que lo pensaría. Quiero hacerlo pero...—las luces se apagaron indicando que estaba por iniciar la ceremonia.



—Habláremos de tu miedo al compromiso más tarde.



—No le temo al compromiso.



—Ajá y yo soy Batman—respondió rodando los ojos.



—No, no lo eres—murmuró perdiéndose entre la música de inicio.



Se cruzó de brazos pensando lo dicho por Iris. No le tenía miedo al compromiso ¿o si? Giró de nuevo la cabeza a donde su familia estaba y una sonrisa se dibujó en su rostro al ver uno de los asientos ocupados. Bruce usando una camisa negra bajo una chaqueta de cuero le devolvió el gesto estando al lado de su madre. De pronto todo se sintió mil veces mejor.



Poco más de una hora después la ceremonia había terminado por lo que Beth se dirigía hacia sus tres invitados fuera del teatro. Sostenía el diploma en sus manos y trataba de no tropezarse con esos tacones negros que usaba una o dos veces al año para ciertos eventos.



—¡Y allí está la estrella de la generación!—exclamó Marcos tomándola en un cálido y algo sofocante abrazo.



—No es tan así...—dijo en cuanto le soltó y acomodó su cabello de vuelta por sus hombros.



—Claro que si. ¿O no, Bruce?



Él asintió con una pequeña sonrisa haciéndole encogerse de hombros algo sonrojada. Eran cerca de las cinco de la tarde y habían acordado  que Bruce acompañaría a Beth a la fiesta pese a que ninguno tenía ánimos de ir. Toda una sesión de fotos por parte de Faith y unos cuantos chistes de Marcos después, se encontraban en el auto de Bruce.



—¿Estás bien?—preguntó insertando la llave en su lugar, más aún no la giraba.



—Claro—le miró tras acomodar un poco la falda de su vestido.



Todo intento de mentirle a Bruce era inútil. Aparte de tener conocimiento en el campo, saber cuando Beth no le decía la verdad era muy fácil. Solía mantener una expresión neutra pero el temblor en su voz la delataba. No hizo falta que dijera algo pues a los segundos bajó la mirada suspirando.



—Pensé que por una vez en la vida se interesaría por mis logros, ¿sabes?—jugaba con el encaje de su vestido—es tonto, parezco una niña con un berrinche o algo así.



—Por supuesto que no, es totalmente válido...aparte, es él quien se lo pierde. No al contrario.



Finalmente giró la cabeza y sonriéndole se acercó para besar su mejilla. Sabía que era su manera de agradecer el apoyo al tener un nudo en la garganta.



—¿Te digo otra cosa?—habló tras unos segundos—no quiero ir a la fiesta.



—Lo sé. De hecho, ya tengo algo planeado.



Su preciada sonrisa de lado hizo presencia, emocionando a Beth al doble; ¿qué mejor que rentar el lugar de patinaje que tanto le gustaba para ellos dos solos? La música y Bruce en patines de cuatro llantas bajo luces de colores era todo lo que necesitaba para regresar a casa al anochecer con el rostro doliendo de tanto reír. Su pecho tenía ese hormigueo que asociaba con la felicidad y la chaqueta negra de su novio le cubría por los hombros.



Cerró la puerta detrás suyo respirando hondo luego de toda la emoción acumulada. Sin embargo, el ruido de la televisión robó esa sensación soñadora que le perseguía. Era un partido de fútbol lo que escuchaba y lo verificó al llegar a la sala de estar.



—¿Y tú de dónde vienes?—preguntó Paul apenas girando la cabeza para verle.



—Me gradué hace unas horas.



Sostuvo con una mano el dije que colgaba de su cuello, esa estrella plateada que tocaba cuando los nervios le invadían en búsqueda de fuerza. Sabía que podía llegar a su graduación si se daba el tiempo, estaba a sólo dos horas de distancia de Gótica.



—¿Era hoy?



—¡Claro que era hoy!—exclamó desesperada—mi mamá te llamó anoche para recordarte. Mi tío vino de Metrópolis agendando el día desde hace meses ¿y tú no lo recordaste?



—Bueno, estaba trabajando. Haciendo algo productivo. Justo para poder seguir pagando tus gastos porque a ese paso...—negó—a tu edad yo estaba a nada de casarme con tu madre, mientras tú...tú apenas tuviste novio hace seis meses.



—Casi dos años—dijo con voz temblorosa—Bruce y yo estamos juntos desde hace casi dos años.



—Eso no cambia las cosas, Bethany. ¿Ahora que harás? Ya te graduaste, felicidades.



No hacía falta pensarlo mucho.



—Mudarme, eso es lo primero que haré. Será mejor que vaya recogiendo mis cosas, no quiero molestar más.



Faith apareció bajando las escaleras encontrándose con la expresión rota de su hija quien le pasó de largo yendo a su habitación. Había escuchado lo suficiente.

afterglow     ⸺     bruce wayneDonde viven las historias. Descúbrelo ahora