Sidney
¿acaso me había equivocado al retarla? Para nada, arrepentirse era cosa de gente verdaderamente débil, yo demostraría hasta el final lo fuerte que era. La impotencia que aún tenía encima era notable, estaba completamente tensa, mi cuerpo lo demostraba con claridad. Había conocido parte de la historia de Elizabeth en las Diamantes, según mi madre la consideraban una segunda fundadora, ahora su líder de "reemplazo" era estúpido, bien sabía que no confiaba mucho en Elizabeth ahora mucho menos, estaría cerca de las cosas más preciadas que tenía. Scarlett, y lo que quedaba de mi verdadera familia, las Diamantes, el trabajo de años para mantener a flote una de las mafias más temidas de Ohio, para que ella tan solo fuera nombrada por qué si...por ser la favorita de mamá. Odiaba creer que algo como eso me afectase, ponerme celosa por no ser la favorita de la mujer que me abandonó luego de quedar en coma por un año, ni siquiera me abandonó solo ese año...me abandonó toda mi vida. Sino era Lia, era la mafia, o era su trabajo, o era el orgullo de mis hermanos, o era el tiempo que necesitaba...jamás era yo, jamás lo sería. Era increíble que me sintiera celosa por la atención de una mujer tan desagradable, tan...repugnante.
Negué rápidamente alejando esos pensamientos, no necesitaba más estrés del que ya producía el ambiente del momento. En una esquina de la celda las quejas de Camil estaban matándome, matándome, torturándome y lastimándome, su voz en ocasiones podía llegar a ser muy fuerte, ruidosa y sin duda alguna chillona, se notaba el estrés que también cargaba. No llevaba nada bien que Valerie le hubiera ocultado el embarazo, mucho menos que Jeyron le hubiera ocultado el embarazo, mucho menos que Madisson ahora fuera la líder del silencio, eso la tenía desesperada. La mire nuevamente de reojo volviendo la vista al pasillo, el silencio era porque Valerie no había vuelto, hacía dos horas los guardias se la habían llevado...no estaba aquí.
—Camil, deberías tratar de tomar aire, pensar en frío —murmuré levantándome de la butaca — créeme, la noticia fue impactante para todos
—Claro que no, ver la mirada de quienes he considerado mis hermanos toda la vida, ocultarme eso, ocultarme que iba a ser tía, y ver como una patética y arrastrada serpiente toma el poder... ¿podría calmarme?
—Camil, exageras un poco todo —quede en silencio cuando una almohada golpeó mi rostro — Venga ya, no tienes cinco años
—Es lo único que puedo lanzarte, o aun mejor
La joven tomó una de las butacas que se encontraba a su lado lanzándose contra mi cuerpo, esquive esta por suerte volviendo la vista enojada a la contraria.
—Saint, basta, ya para — murmure entre negaciones — se que estas frustrada, entiendo tu enojo, pero no soy un tablero de tiro para que practiques conmigo — mencione en un tono irónico
—Trato de estar calmada...simplemente es el estrés de la situación — murmuró cerrando los ojos
—Lo sé, es complejo per [...]
Mi voz se interrumpió ante un golpe seco, gire la vista a Camil, también se había quedado inmóvil ambas cruzamos miradas llenas de preocupación.
—No...no puede ser nada malo ¿cierto?
—No lo sé, deberíamos acercarnos a ver
—Si, es lo mejor...ti primero
—Claro, manda a la que está más cerca
Rodé los ojos. Tome los barrotes en mis manos acercándome a los mismos, no se veía nada, no se escuchaba nada, no había nada, al parecer una estupidez. Gire mi rostro en busca de la rubia, ya no estaba. Refregué mis ojos, debía ser una mentira, empecé a revisar por toda la celda, no había oportunidad que escapara entre esas cuatro, cortas y frívolas paredes, estaba soñando... ¿era cierto? Volví la vista nuevamente al pasillo, no había nada, tras darme la vuelta una mano impactó mi cuello, el golpe me mareo lo suficiente, tan solo bastaron unos segundos antes de caer al suelo semi inconsciente, aún todo me daba vueltas, con suerte veía manchas, en específico dos manchas, eso sería la última cosa que viera antes caer inconsciente.
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Phycothic Teens 2: The New Game
RandomAmigos, que dieron todo, que se mantuvieron juntos hasta el final, pero... ¿vencerán esta nueva amenaza? Aquella completamente inesperada, aquella que jugaba en las sombras, ocultando su verdad. Adentrate, ahora estos chicos tendrán que unir todas s...