Capítulo Doce

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POV: __________.

Las clases habían terminado finalmente, y como eran viernes, descansarían a gusto y sin pendiente alguno. Caminaba con Heavy hacia su casa y cuando entramos con sus llaves, vimos a Vicky en la cocina comiendo la especialidad de Glam el cual al mirarnos nos saludó.

Glam: Hola niños.

Heavy: Hola papá, invité a __________ a jugar videojuegos.

Glam: Está bien, ella es bienvenida cuando quiera.

Heavy: —sonríe asintiendo la cabeza y saludando a su mamá— Hola mamá.

Vicky: Hey.

Heavy subió las escaleras y cuando iba a subir, Glam me llamó deteniéndome.

Glam: Por cierto __________. Me gustó mucho tu cuento que escribiste en la escuela. Dee llegó temprano a casa avisando que saldría y me mostró el periódico. Excelente historia.

__________: Oh gracias Glam. Me alegra que le haya gustado. —dije sonriendo—

Glam: Y otra cosa. Ches está preocupado contigo y... Quiere que vayas a casa lo más pronto posible así que...

__________: Dile a Ches que llegaré antes de las siete. Y que por favor, me avise cuando no haya otra mujer ahí. —dije para después subir las escaleras—

Glam se mantuvo callado en un instante y solo ignoró eso y siguió con lo suyo.

Al rato me divertía jugando con Heavy en línea en equipos y pasábamos la tarde haciendo corajes por qué nos mataban nuestros avatars o riéndonos por qué nosotros matabamos a los suyos y así fue hasta que dieron las siete de la noche. Decidí irme de ahí y salir para dirigirme a casa. En mi camino vi de lejos a Dee dejando a Lif en la entrada de su casa, ambos estaban hablando y cuando estaba por acercarme, me di cuenta que Lif le había dado un beso en sus labios. Me detuve en el momento y sentí algo raro en mi interior. No podía describirlo, pero fue... ¿Doloroso? O ¿decepción? Y sin más, caminé yendo a otro lado más corto y evitar que me vieran.

Fue imposible, sentí que alguien me miraba y no sabía, por otro lado, Dee se dio cuenta de mi presencia. Solo decidí ignorarlo. El camino corto se volvió largo debido a que tomaba atajos y algunos eran cerrados y tenía que regresar por dónde venía.

Al final llegué a casa pero vi un auto estacionado ahí, no tomé importancia y al llegar a la puerta del departamento, saqué mis llaves y abrí esa puerta, encontrándome con algo el cual me dejó paralizada. Estaba Ches discutiendo con... Mi tía ¿Erika?

Ella le estaba gritando e insultandolo y cuando ellos notaron mi presencia, ella corrió hacia mí y me abrazó fuerte.

Erika: ¡Dios mío __________! ¿¡Dónde demonios estabas!? ¡Estuve llamándote por casi dos malditos meses!

No sabía que decir y noté que Ches estaba algo nervioso ante la presencia de ella y su reacción.

Erika: ¡Y en cuanto a ti! ¿¡No sabes que ella es una niña y no puede estar sola!?

Ches: La niña está bien, Erika. Ella solo venía de casa de mi amigo, él me avisó que estaba ella allá.

__________: Tía... ¿Que haces aquí?

Erika: ¿¡Que hago aquí!? Vine a buscarte, no sabía nada de ti, y ni se que hacías o si estaba bien. Y ahora veo que no tienes los cuidados que se necesitan con este perdedor. —dijo mirando mal a Ches—

Ches: ¿Perdedor? ¡Estás oyendo lo que dices!

Erika: Hija, arregla tus cosas, nos vamos de aquí.

__________: Espera, ¿¡Que!? ¡No tía! No quiero irme de aquí. Aún estoy en la escuela, falta aún para que salga.

Erika: Solo es un año de que tardará. Pero se recupera, vamonos ya de aquí.

Ches: Erika, no. Ella está perfectamente bien, y no puedes quitármela, apenas y estoy conviviendo con ella.

Erika: Si claro, ¡Ni siquiera sabías de ella desde antes!

Ches: Doris nunca me dijo nada, ¡ni siquiera me llamó!

Erika: ¡Ella si te llamó, pero nunca contestaste!

Ches: ¿¡Cómo no lo haría si se trataba de ella!? Mira, si hubiera sabido que estaba embarazada, iría donde ella y la ayudaría con todo eso.

Erika: ¿Estás diciendo que solo irías por responsabilidad y no por amarla?

Ches: ¿¡Que!? ¡No! ¡Todo lo contrario!

Veía que mis dos únicas familias estaban luchando por mí sin saber que hacer. Sin duda ya no podía recordar más por qué en ese momento terminé desmayando me ahí mismo. No pude saber que más había sucedido. Pero lo único que logré escuchar, fue que Ches decía que no permitiría que me alejaran de el por qué yo era su hija y si hacia eso, le quitaría a mi tía mi custodia por tenerme con él como su hija y que nadie más se acercara a mi. Y después de eso ya no oí más.

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Más tarde desperté en mi cama escuchando la misma discusión pero con voz baja, era en vano que no pudiera escuchar todo lo que decían. Me levanté de mi cama y salí de mi habitación descalza para ir donde ellos. Ches aún le reclamaba a mi tía que él no permitiría que me fuera con ella sin ninguna razón. Ellos me miraron y entonces por fin hablé.

__________: ¿Que está pasando?

Erika suspiró y la miró sería.

Erika: Tenemos que regresar a Canadá __________, aquí no estás bien y segura. Así que empaca tus cosas y vámonos.

__________: No.

Erika: ¿Que?

__________: Dije que no. ¿Por qué razón me iría de aquí? ¿Para que vuelva a esa casa donde me deprimí y estar sola todo el tiempo mientras tú trabajas? ¿Para que vaya a la escuela y me molesten en todo momento y se burlen de mi? ¿O por qué crees que aquí todo lo que hago está mal solo por qué no obedezco a Ches de que él se preocupa de mi en todo momento?

Ella se mantuvo callada y me miró a los ojos. Cuando iba a hablar, Ches se adelantó y le mostró unas cartas en la mesa serio.

Ches: Por si no lo sabes. Tu sobrina tiene la mejor conducta de toda la escuela, las mejores calificaciones y hasta escribió un cuento que fue el ganador en todo y está en el periódico estudiantil. Ella no está echando a perder su vida, al contrario. Ella está haciendo mejor aquí. A comparación de las primeras semanas cuando no hacia nada. ¿Y dices que soy un mal padre ahora?

Ella lo miró mal y luego me vio a mi, recibí una llamada de parte de Lif, sabía que no era buen momento. Pero para no incomodar más el ambiente, tuve que contestar la llamada e ir a mi habitación.

Mientras tanto, Erika miraba las notas de aquella chica y se impresionó tanto que también leyó el título de su cuento.

Erika: Conmigo nunca tuvo ese mayor de notas... ¿Cómo es que mejoró estando contigo? —dijo con un poco de desagrado—

Ches: Por qué yo estuve al pendiente de ella. No le di toda la atención, pero hice todo lo que pude con tal que su futuro fuera el mejor.

Se mantuvo callada aquella mujer mirándolo seriamente. Y no tuvo opción que suspirar pesado.

Erika: Volveré mañana en la mañana y hablaré con ella. Esto no se queda así.

Ches solo la miró mal y rodeo los ojos sin más para ver qué la mujer se fuera de ahí y soltara un suspiro.

Y en la habitación de la joven, se había quedado dormida sin contestar la llamada ya que al sentirse muy presionada por la situación, decidió no hablar con su amiga y esperar a que todo mejorará hasta mañana.

La chica ¿De mis sueños? (Dee x Lectora)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora