La chica ¿De mis sueños? (Dee x Lectora)

Capítulo Quince

POV: Dorothy.

Rusia era uno de los lugares más grandes de todo Europa, y mi mejor amiga Erika al volver del Campamento católico me invitó a un viaje con ella debido a que su concierto favorito tocaría aquí, y mi familia no sabe de eso. Sabían que iría con ella, pero no aquí en Rusia, sino en Francia donde supuestamente ella se iría a estudiar diseño de modas.

Ellos no sospecharía de nada por qué confiaban en ella y conocían a sus padres, y al igual que sus padres, pensaban que fuimos realmente a aquél sector donde ella se inscribiría para estudiar.

Como sea, estábamos en el hotel donde nos hospedamos y ella se estaba arreglando algo cómodo para poder ir al concierto, mientras que yo me sentaba en la cama escribiendo mi diario como de costumbre. Ella salió con una ropa muy metalera, era raro de que ella tuviera esas vestimentas oscuras, parecía gótica...

Tomó su bolso y me miró sonriente como siempre.

Erika: ¿Lista para tu primer experiencia en un concierto metal?

Doris: Va a ser una larga noche... —dije en un susurro—

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Llegamos al concierto donde había muchas personas bebiendo y fumando hierba, sabía que era eso por que Erika al tener una apariencia como niña buena, es todo lo contrario. Pero al ser mi mejor amiga, no la delataba, teníamos mucho en conocernos y era la única persona que tenía en quien confiar.

Toda la noche fue de locura, yo simplemente estaba a lado de mi mejor amiga escuchando y observando, y admitía que estaba demasiado aburrida, no era mi estilo de música. En unos momentos me empezó a dar mucha hambre y decidí ir a un puesto de comida rápida que estaba ahí mismo del concierto.

Había puestos donde vendían solo comida chatarra, y por mi dieta no podía simplemente comerla... Solo desearía que mi vida no fuera una total mierda para siempre. Y aunque solo pedí una botella de agua, el hambre no se me quitaba.

Habían pasado casi diez minutos y el concierto había terminado, pero no veía a mi amiga, la busqué por todas partes y por fin la vi con alguien, un chico un poco mayor que ella coqueteando le. Ella le correspondía y decidí no acercarme a ella para no interrumpir, y cuando iba de nuevo a los puestos de comida, alguien me había sujetado del brazo. Era un tipo igual mayor que yo y me sonreía de una forma rara.

Tipo: Hola linda, ¿Estás perdida?

Doris: N-No... Vengo con mi amiga, pero ya me voy. Permiso. —dije intentando apartarme de el pero seguía sujetandome con fuerza—

Tipo: Vamos, ven conmigo, esta noche te la pasarás mejor en mi casa. No seas grosera.

Él empezó a jalarme con un poco de fuerza y no podía liberarme, pero una voz hizo que lo detuviera de su fuerza.

Ches: Amigo ya dejala, ella no quiere ir contigo. —dijo serio—

El sujeto seguía tomándome sin querer soltarme y cuando iba a ser un escándalo, los de seguridad pasaron en nuestra dirección,lo cual provocó que el tipo me soltara bruscamente y se fue.

El chico que me ayudó se acercó a mi algo preocupado.

Ches: ¿Estás bien?

Doris: —asentí— Gracias...

Ches: De nada, ¿Tu no eres de aquí, verdad? Digo, es que no te he visto antes.

Doris: Ah... No, yo soy de Canadá. Vine aquí con mi amiga por qué insistió en qué la acompañara.

Ches: Ya veo... Debes tener cuidado andar sola. Hay muchos pervertidos rondando por este lugar, ¿Te llevo donde tu amiga?

Yo simplemente asentí y él me ofreció su brazo para que no me separara de él. Pasamos buscándola por todas partes pero en lo que la buscábamos, me hacía mucha plática para que yo entrará en confianza. Me dijo que él tenía una banda con un mejor amigo que conoció hace años y que vino aquí para disfrutar su descanso. Me hacía reír, podía admitirlo. Y también me platicó acerca de su madre, que como se había vuelto una mala mujer con el y como pocas veces se insultaban entre si, pero el la entendí por qué pasó por un abandonó hacia su padre. Me sentí un poco mal con el, pero no podía dejar de mirarlo por un buen rato, sus ojos era un color oscuro y hermoso.

Cuando Erika volvió de no se dónde, ella me buscó preocupada y fue directamente a abrazarme.

Erika: ¡Por dios niña! Te he buscado por todas partes. ¿¡En donde estabas!?

Doris: Estuve con Ches un rato. Te vi con alguien y no quise interrumpir.

Ella miró a Ches quien éste solo la saludó con la mano y ella me miró.

Erika: Mejor vámonos a descansar, ¿Si? Esta vez ya no te dejaré sola.

Doris: —yo solo asentí y me acerqué donde él para despedirme— Un gusto en conocerte Ches. Y gracias por ayudarme hace rato.

Ches: Oh si, no hay de que. Si quieres, después nos podemos ver. ¿Te parece? —dijo nervioso rascándose la nuca—

Yo sonreí y le puse el número de la habitación donde nos hospedabamos y como muestra de agradecimiento, besé su mejilla tiernamente, eso me hizo sonrojarme y al separarme me fui de ahí.

Ches por su parte estaba sorprendido de tal acción que dió la chica, y cuando quedó unos momentos quieto, su mejor amigo llegó donde él.

Glam: Ches, ¿Dónde estuviste todo el rato?

Ches lo miró y caminó con Glam para regresar a casa.

Ches: Estuve con una chica. Estaba en peligro y la ayudé.

Glam: Bueno, pero no te desaparezcas de nuevo. —dijo mostrando su típica sonrisa en su rostro y caminaron para después irse—