Capítulo 53

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—¡¿Qué mier—se oye un gruñido en medio de la noche.

—Espera ¡Espera! Vengo en son de paz—la luz de la luna, a pesar de la espesa oscuridad, le deja ver un joven muchacho de pelo castaño alborotado y una mirada felina, podría compararse con un tigre.

—No he roto ninguna sola regla, nefilim—responde con disgusto aquella criatura nocturna, sintiéndose acorralada.

—Lo sé, solo...—el joven suspira y se acerca con cautela a aquel vampiro—Sólo quiero conversar. Intentaba encontrar un vampiro, y me he topado contigo.

¿Qué podía querer de él? Se preguntaba aquella criatura.

—Bien, que te quedes en un perturbador silencio también me sirve. Juro que no tengo ninguna intención escondida, aparte que estoy sólo y sería un poco estúpido planear atacar a un vampiro así, en fin. Sólo necesito...un favor—Taehyung tomó una respiración profunda, de los nervios comenzó a hablar demasiado.

El hombre vampiro se paró recto y relajado, parecía curioso ahora. Lo más importante es que no parecía querer atacar.

—¿Qué puede necesitar un glorioso nefilim de una criatura como yo?

—Bien, no sé qué tan serio sea, pero en serio podemos hablarlo con tranquilidad—el nefilim se acerca a lentos pasos y ahora el vampiro lo puede ver perfectamente, cada detalle, a pesar de la densa obscuridad. Pero pronto hace un sonido de disgusto y se cruza de brazos.

—Creo saber quien eres—interrumpe con disgusto—Y no sé qué tan buena idea es hablar contigo pequeño cazador. Nada más y nada menos que el protegido del gran brujo y pareja del líder vampiro de la ciudad, con más razón ¿Qué podrías necesitar de mí? Kim Taehyung.

—Bien, hora de las presentaciones—balbucea el otro, incómodo. No estaba realmente al tanto de lo conocido que era en el mundo de sombras, pero tenía lógica, él era algo así como intocable, no sólo por influencia de su familia, a eso se sumaba que era un nefilim, era un paquete viviente de algo que debería ser tratado con precaución—Lástima que no sé su nombre...

—Mira chico, soy un viejo vampiro, solitario y pacífico. Ni siquiera dimensionas lo que sucede contigo y tu alrededor. Estaría demente si me involucrara secretamente contigo, y conozco bien el tipo de riesgos que no hay que tomar. Así que, adiós.

—¡Quiero saber cómo transformarme en vampiro!—suelta desesperado.

El vampiro reaparece un poco más cerca, lo examina brevemente.

—¿Realmente eres normal? ¿Estas en tus cinco sentidos? Simplemente estas soltando disparates. Sólo vine a advertirte que si me vuelves a ver, no me hables.

—Pagaré lo que sea, o regresaré el favor. Incluso conoces mis influencias, algo haz de querer.

—No lo vale—responde el vampiro con un tono más grave—¿Por qué un nefilim querría ser un vampiro? o quizás esto es otra cosa ¿Estas probando a ver si te muerdo y luego inculparme de algo? Estoy seguro que no tengo nada que ver contigo.

—No, no y no. Es en serio, mira—suspira y se mece impaciente, no sabe qué más hacer—sólo no quiero morir ¿No es eso acaso natural en un mortal como yo?

El hombre vampiro se queda pensando. Todo esto simplemente no tiene pies ni cabeza, se estaba planteando la posibilidad de que este chico fuera un demente, quizás convertirse en nefilim le quemó las neuronas. ¿Por qué buscar un vampiro? ¿Acaso no estaba constantemente con un mismísimo líder de clan? Y en esos breves segundos, una sospecha creció. No lo saben, seguramente, ni el brujo ni el vampiro, quizás hasta se oponen a la idea. Una risa quiere escaparse por lo hilarante de la situación, y cómo terminó en medio de esto, sin provocar absolutamente a nadie ni a nada.

Cazadores de demoniosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora