Capítulo 52

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Taehyung

Estaba sentado en un alto tejado de un segundo piso, ya se había aburrido de merodear la zona, esperaría a que el resto se reuniera allí para ir a explorar en otro lugar.

Divisa un lobo negro de mirada brillante, trotando a ligeros pasos y acercándose a él. Ese lobo, ya lo había visto. Eran un poco confusas sus memorias, incluso recuerda habérselo topado siendo un humano.

Al alcanzarlo muta a humano y con una increíble agilidad sube al mismo tejado.

–Tiempo sin vernos–saluda el chico licántropo, con ese aura ligera y hasta podría decirse juguetona que lo caracteriza.

–Minho–saluda con un asentimiento. El otro toma asiento a una distancia prudencial de él.

–Kim Taehyung. El chico licántropo que pasó a ser nefilim de milagro–podía notar cierto tono jocoso.

–Parezco ser la novedad del mundo de sombras ¿Será que seré portada de revista?–con esto pretende que el otro no se tome tantas confianzas como para creer que le diría algo sobre aquel tema– ¿Tienen alguna especie de revista?

–Serías popular–el licántropo mantiene un rato de silencio y suspira– ¿Dónde está tu aterrador ángel guardián diabólico?

Taehyung voltea con expresión de confusión, cree saber de quién habla, pero se hace el tonto.

–El vampiro–insiste el otro.

Taehyung se encoge de hombros.

–Siendo líder, supongo.

– ¿Cómo es que mantenían una relación estrecha antes? No me parecía posible hasta que conocí tu caso.

–Supongo que hay cosas más poderosas o influyentes, por así decirlo, que una rivalidad instintiva, no creo que nadie de tal naturaleza se considere un animal.

–Ay, el amor, el amor–sonríe Minho. En cierta parte admiraba a este chico, lo consideraba casi como una leyenda. Quizás el impacto sea aún más significativo si se conociera su historia a fondo.

De pronto se para en el lugar de un salto a la velocidad de la luz, aun así no puede prever aquel empuje que lo lanza al suelo desde el segundo piso.

–Fuera, perro sarnoso–escupe Jungkook. Quien apareció en segundos, de la nada, apenas siendo presentido.

Taehyung enfunda de nuevo sus armas y observa sorprendido al vampiro. Jungkook apenas lo observa de reojo, pero se vuelve a enfocar en el licántropo allí abajo, se mantiene en una pose defensiva mientras se escuchan fuertes gruñidos. Al nefilim le recorren escalofríos de tan mal recuerdo, eso y que visualiza los blancos colmillos de su chico.

–Deténganse– ordena con voz firme.

Minho deja de gruñir y retrocede un poco. Jungkook abandona su pose y lo mira con expresión de disgusto, pero mirada culpable.

–Parecen perros y gatos–el nefilim sacude la cabeza en negación–No pueden simplemente sacarse las garras apenas se encuentren a metros de distancia ¿Acaso no son humanos completamente racionales?

El vampiro aparta la mirada algo avergonzado. No pensó demasiado cuando vio a un licántropo cerca de Tae, sus emociones al parecer lo nublaron.

–Disculpa, no fue nada educado de mi parte lanzarte. Sólo...despierta en mí un instinto al ver a un licántropo cerca...de Tae–Jungkook se dirige al licántropo con voz parsimoniosa.

–Bien, si lo pones así, no te puedo culpar–Minho deja de lado sus ojos lobunos y con ello sus dones–Bien, me retiro... Por la paz.

Taehyung lo mira directamente.

Cazadores de demoniosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora