Capítulo 41

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–¿Tienes todo lo esencial empacado?–el chico asintió repetidamente, balanceando su gran bolso. 

–Bien, entonces, vamos. 

A continuación el brujo abrió un portal a Idris, más específicamente a la academia de cazadores. 

Jungkook y Taehyung cruzaron tomados de las manos, el vampiro estuvo así estos últimos días, sin despegarse un sólo segundo. Era comprensible, el chico se ausentará por seis meses. 

Seokjin conectó miradas con el brujo a su lado, se veía algo divertido, quizás siguió casi el mismo hilo de pensamientos.

Los recibió un extenso terreno verde, casi boscoso y una enorme edificación de estilo antiguo. Al menos dejaba de parecerse a una iglesia. El brujo creía que ellos no ocupaban otras edificaciones que no fueran esas. 

Avanzaban tranquilamente por el terreno en dirección a la academia. Justo en ese momento salía una esbelta mujer por la gran puerta de entrada, avanzaba a elegantes pasos en dirección a ellos. Una vez que se toparon de frente, la mujer inclinó la cabeza educadamente en señal de saludo. 

–Bienvenidos a la academia de cazadores de demonios. Soy Kim Jisoo, una de las entrenadoras, un gusto–su expresión era serena, sus ojos amables, aunque tampoco era todo sonrisas. 

–Kim Namjoon, gran brujo de Seúl, un gusto–sonrió y se inclinó un poco frente a la mujer. 

–Soy Jeon Jungkook, líder del clan vampiro de Seúl–Se giró hacia el chico. 

–Kim Taehyung, sólo eso, supongo–dijo lo último inocentemente. 

La mujer sonrió y su mirada se mostraba divertida. Era el efecto del chico, su aire encantador, espontáneo y natural. 

–Y...Kim Seokjin, del instituto de Seúl–el nefilim acarició los cabellos del chico. 

Estaba divertido por el hecho del que el chico apenas se estaba presentando y ya andaba ganándose hasta a la entrenadora. 

–Eres quien viene a entrenarse para ser un próximo cazador ¿no?–Jisoo miraba en dirección al chico humano. 

–Lo soy–Taehyung inclinó un poco la cabeza a un lado, sin desviar su mirada de la mujer. 

Estaba curioso por ella. Tenía un aire de adulto mayor, pero se veía tan bien que dudó. 

Es extraño que todos los nefilim sean tan condenadamente atractivos, como si fuera un requisito.

–Bien. Kim Taehyung, bienvenido, espero que te sientas a gusto aquí. Puedo acompañarte para que vayas junto a la orientadora, ella te explicará todo sobre cómo funciona la academia. Aunque primero puedes pasar por los dormitorios, te mostraré los que están libres, son compartidos así que tendrás algunos compañeros. 

El chico asintió y se giró hacia el vampiro, quien le miraba con una expresión interrogante. 

–¿Kookie me acompañas?–lo dijo en un susurro muy bajito como para que sólo él lo escuchase. 

–Lo lamento, pero la academia está protegida al igual que los institutos y no podrá ingresar–Jisoo cuidó sus palabras para no sonar ni un poco grosera. 

Pero por supuesto, los nefilim tenían buena audición, incluso similar a la de un vampiro cuando se hacían runas. 

Los ojos de Taehyung reflejaron tristeza. 

–Esta bien, yo te acompaño–Seokjin posó una mano tranquilizadora en su hombro–Te vas a ver genial al entrar con un nefilim al primer día en la academia. 

Cazadores de demoniosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora