Cazadores de demonios

Capítulo 19

Yoongi

Estaba frotando una toalla secando el agua de sus negros cabellos.

Salió del baño con ganas de tirarse a la cama y dormir. Hoseok los hizo entrenar demasiado, más pesado de lo normal, él estaba muerto.

Se tira boca para abajo pero inmediatamente tocan su puerta.

Ahora no por favor.

–Quiero dormir, ni te atrevas a abrir la puerta.

Como si de un sordo se tratara, Jimin entra al dormitorio.

Yoongi cierra los ojos y suspira con cansancio. Ahora no podría llevar una conversación tranquila.

–Yoongi ¿por qué estas molesto conmigo? ¿Qué te hice?–Jimin se sienta al borde de la cama.

–No estoy molesto contigo–responde Min, sin abrir los ojos.

–Y ¿entonces?–a Jimin le entran unas ganas violentas de agresión, no le gusta que no lo mire.

–Sólo necesito mi espacio cuando estoy muy enojado. Si te acercas seré cruel y diré cosas que no quise decir, no quiero hacer eso–Min al fin abre los ojos.

–Hoseok entró. Incluso se quedó a dormir–reclama Jimin.

–Él es mi parabatai–responde Min, entrecerrando los ojos en advertencia.

Peleará incluso con él si se atreve a decir algo de Hoseok.

Jimin nota la tensión de Min. No parece buena idea hablar sobre su parabatai. Se mantiene en silencio, no sabe cómo continuar así que aparta la mirada.

–Debes pensar más en lo que dices. Fuiste muy idiota al suponer algo entre nosotros, Hoseok parece una persona de trato fácil, pero no lo es demasiado, hay cosas que lo sacará de sus casillas. Realmente esperé que te estampara un puñetazo en la cara, pero es más tolerante que yo–agrega Yoongi–. Debes llevarte bien con él, como dije; es mi parabatai.

–No tengo por qué–dice Jimin algo irritado–. Estoy contigo, no con él.

–Estará siempre conmigo–responde Min.

–Bien, hay una cosa importante que siento...debería hablarlo contigo–dice Jimin algo nervioso.

Yoongi se levanta, se sienta de piernas cruzadas y hace un gesto para que Jimin continúe.

–Yoongi...–suspira, es algo difícil decir esto–. No intentaré ganarme a Hoseok, no hay por qué, tampoco es que busque pelearme con él, me disculparé si la situación lo requiere.

Jimin juega con sus manos nerviosamente, la siguiente cosa que dirá quizás cambiará todo.

–Esto no es una relación formal. No somos ni seremos pareja.

Yoongi se queda mudo, abre la boca pero no sale ninguna palabra y frunce el seño.

Jimin aparta la mirada. En gran parte le duele pero no tiene alternativa.

–Entonces sólo era para satisfacerte–dice Min maliciosamente–. Ah la lujuria. No creí eso de ti Jimin. Tampoco es que me hiciera un ideal, como tú lo haces conmigo al parecer, yo quería conocerte.

Jimin traga fuerte al escuchar que Min hace énfasis refiriéndose ya a un pasado.

–No soy algo a tu disposición, te equivocaste, no recibiré migajas como un perro–Yoongi llega al tope de su enojo–. Así que ahora puedes largarte y dejarme en paz ¿si? Hazme sólo ese último maldito favor.