Capítulo tres

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«𝙰 𝚜𝚞𝚜 𝚘́𝚛𝚍𝚎𝚗𝚎𝚜 𝚙𝚊𝚝𝚛𝚘́𝚗»

•—Capítulo tres/[03]🌺

☁~ ~ ~☁

—¿¡GREGORY!?—Estella estaba maldiciendo a todos en ese instante.—¿¡P-Por qué apareces de frente!?—Se desconcertó el rubio al ver al chico frente a él.

A lo que Gregory sonrió a lo joto, y decidió abrazar de cuello a su gran amigo: "Christophe", alias el Topo; El cual respondió con un rodeo de ojos sarcástico.

Finalmente, miró a ambos rubios.

—Hey, ¿qué hay de nuevo?~.—Se relamió los labios el chico de cabellera color mierda pero hipnotizante.—Veo que vienes con la chica ruda. ¿Se les ofrece algo?—Invitó una pequeña cerveza.

—En realidad, vinimos para que nos ayuden en una maldita reconstrucción.—Estella retrocedió un poco para tener espacio con la cadena, y se cruzó de brazos.—Si no lo hacen, les juro que..—La interrumpe otro chico.—Agh.

—¿Una reconstrucción?—Habló esta vez Christophe.—Ni locos.

—Oh vamos ¡estamos trabajando para Satanás!—Pip respondió dando la contraria; Gregory se sacó de pedo, a Christophe le llamó la atención e inmediatamente pensó en sangre; Estella sonrió burlona.

—¿¡Ese viejo?!—Pip asintió.—¿¡El rey del Infierno?—Nuevamente asintió.—¿¡El que perseguían esos municipales?!—Asintió de nuevo, y Gregory se echó a reír. Era demasiado intimidante como para ser verdad.

A lo que su amigo se empezó a reír, ambos estaban borrachos y se notaba demasiado, Gregory sujetaba y abrazaba del cuello a su amigo mientras bebían.

—Pip, ¿en serio estos idiotas malparidos nos van ayudar?—Miró a su amigo rubio como si lo fuese a estrangular con solo la mirada, Estella intimidaba.—¡Son unos malditos bandidos!

—Estella, nosotros somos bandidos.—Respondió.

—Pero no nos alcoholizamos.—Alzó la ceja

—Bueno, eso es verdad en cierta manera.—Pip se rascó un poco la cabeza en la parte del cuero cabelludo.—¿Y bien?

Gregory y Christophe se miraron mutuamente para después sonreír y mirar al otro par de dos.

—Solo aceptamos.—Respondió Christophe esperando a que su amigo continúe la frase.

—Si beben con nosotros.—Gregory completó.

[. . .]

Horas después de esa condición antes mencionada, era realmente noche, demasiado como para que Satanás pensará que definitivamente se marcharon, cosa que realmente no pensó porque la cadena seguía moviéndose.

Era un indicio de fidelidad.

—E-Estella ¡deberías beber más ~..—Repitió Pip a su amiga; La cual estaba realmente incómoda, fingiendo beber, así que realmente no estaba borracha, solo fingía para que acepten su ayuda.

En cambio, Pip estaba más que borracho, se lo tomó en serio; Todo sea para que Satanás les deje vivir.

Que incómodo y horrible destino.

—¿Saben que estaría bien?~..—Habló uno de los chicos, por supuesto que no era Pip.—¡Una gran matanza mientras bebemos!—Sip, es obvio de quien es ese diálogo.

—C-Cállate, Topo~. —Ambos estaban tan borrachos, que estaban joteando más que casualmente. Efectos secundarios del alcohol, creen.

A lo que ellos se divertían; Exceptuando a Estella. Se acercó un chico entre las sombras y saludó de manera inadecuada, sacando el dedo de en medio.

—Papá dice que es hora de que vuelvan, Satanás se los ordena.—Mandó órdenes el chico pelinegro.—El hijo de Satanás se los ordena.—Un pequeño destello de luces rojizas rodeó los ojos y pupilas de Damien, con una pequeña aura intimidante.

—¿Y-y este imbécil?~..—Preguntó Gregory y Pip se acercó con una botella de alcohol y lo abrazó del cuello, tal como antes Gregory y Christophe.

—¡¡No idiota!! ¿¡Qué haces?!—Estella reaccionó y antes de que pudiera sujetar a su amigo; Christophe había empujado al chico rubio haciendo que besé la mejilla del híbrido humano.

Damien miró fijamente a Pip, y después a Estella.

—¿Qué no saben controlar a su amigo? nadie me toca, no al hijo de Satanás.—Damien odiaba un poco autodeclararse hijo del rey del Infierno aunque lo fuera, pero lo utilizaba a menudo para dirigir órdenes sin un "pero".

𝙰 𝚜𝚞𝚜 𝚘́𝚛𝚍𝚎𝚗𝚎𝚜 𝚙𝚊𝚝𝚛𝚘́𝚗Donde viven las historias. Descúbrelo ahora