Instant family - Bokuaka

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La familia de Bokuto. [Parte 2]

El fin de semana había llegado, Akaashi estaba más allá de asustado y nervioso, sentía que en cualquier momento vomitaría todo el desayuno que habían hecho sus hijos para él, había sido una semana ciertamente estresante, Akaashi tenía mucho trabajo y eso lo tenía más allá de sus límites, pues ahora siendo padre de tres pequeños, llegaba y no podía solo pasarse la comida, tenía que si o si preparar algo para los pequeños, pues sabía que los tres eran bastante comelones, a veces Kōtarō lo ayudaba con ello para que pudiera descansar, pero al igual que él esa semana había tenido mucho trabajo.

Kaori sería una gran ayuda, pero la menor decía que podía ayudarle con cualquier otra cosa que no fuera cocinar y él la entendía, la verdad es que cocinar tampoco era su cosa favorita en el mundo. 

 Así que con el estrés de la semana, aun en su sangre y sistema, subió al asiento del copiloto del auto de su esposo, los niños ya estaban en el auto al igual que Bokuto, solamente faltaba él para poder marcharse a casa de los padres del mayor. 

Apenas subió, sintió como Bokuto tomaba su mano y entrelazaba sus dedos para empezar a conducir. Los niños iban atrás hablándoles a ellos sobre la escuela y demás cosas que se les vinieran a la cabeza, pues cuando los menores estaban emocionados por algo hablaban mucho.

 Eso hizo a Keiji sentirse en cierto modo feliz, aunque sabía que quizás el encuentro podría ser "destructivo" no podía evitar sentir alegría por el encuentro con la familia del mayor... ¡Oh por dios, sus suegros y cuñados conocerán a sus por el momento hijos!  

—Kōtarō, por favor, detén el auto. —El mayor lo miró extrañado, sin embargo, accedió a la petición, y pronto sintió como la puerta del copiloto era abierta y Akaashi se agachaba... y oh su Keiji estaba vomitando.

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Luego del pequeño pare que tuvieron que hacer por razones obvias Keiji tomo una botella de agua y siguieron su camino a su destino, el problema es que ya estaban allí, fuera de la casa, a fuera, moriría, le daría un paro al corazón y hasta ahí había llegado. 

Todos bajaron del auto y antes de siquiera llegar a la puerta para tocar, esta fue abierta dejando ver a un peli gris que corrió hacia ellos y abrazó al mayor con todas las fuerzas que tenía, Yaichi quien estaba tomando la mano de Kōtarō tuvo que soltarla cuando inevitablemente Bokuto alzó un poco al menor y dio un par de vueltas con él en sus brazos, fueron dos o tres antes de bajarlo y tomarlo por las mejillas.

  —Que grande estas, vas a alcanzarme pronto. 

 —Sabes que es mi meta de vida.

Luego del abrazo emotivo Kōshi había saludado a Keiji con un abrazo también, de igual forma había saludado a los menores y los había invitado a pasar a su casa, dentro los padres y hermanas de Bokuto también los habían abrazado, excepto a los menores quienes aún no estaban en confianza. 

 El día pasó entre charlas, juegos y demás cosas entre ellos; sin embargo, antes de sentarse a comer, alguien tocó la puerta, Kōshi corrió a abrir y cuando lo hizo un moreno se dejó ver al otro lado de la puerta. Kōshi sintió sus piernas temblar al instante y también sintió morir por dentro, ¡no estaba arreglado para esto!

—Daichi, hola, que sorpresa no esperaba verte por aquí, ¿qué ocurre? 

 —¡Kōshi!, ¿quién está en la puerta? —Kōshi pudo reconocer la voz de su hermano. 

 —¡Es solo un amigo, ya voy! 

—¿Ahora nada más somos amigos? —preguntó el mayor alzando una ceja, Koshi únicamente señaló su boca para que estuviera en silencio. —Bueno, pues es que ¡ayer dejaste esto en mi casa y quería traerlo! —Kōshi podría matarlo, lo haría, cuando estuvieran solos, sería hombre muerto.