Capítulo 1: ¿Y si tenemos un hijo?
Luego de pensarlo por una semana, y por una semana se refiere a que literalmente estuvo una semana con la idea en su cabeza, se dedicó a averiguar todo lo que pudo y en caso de que Bokuto se negara definitivamente a adoptar, tenía la opción de una casa hogar que era básicamente lo mismo, pero podrían probar con varios niños y no estarían siempre. No como un niño adoptado que no tendría más padres, solo ellos y sería definitivo. En cambio, con los niños de las casas hogares tendrían que ser devueltos a sus padres en algún momento.
Primero propondría adoptar un niño, si Bokuto decía que no, ya tenía su plan B, pero de que tendría un niño en casa. Lo tendría.
Estuvo todo el día pensando la forma en que le soltaría la noticia a su esposo, pensó en quizás únicamente decir "quiero un niño en casa y si te niegas a adoptar lloro" a Bokuto no le gustaría para nada la idea de que Akaashi llorara, aceptaría, tendrían un niño corriendo en casa y él estaría muy feliz. Reflexionó en que eso claramente era soborno y lo descarto completamente.
También pensó en que debería mostrarle la página web de adopción donde los niños contaban sus historias y el porqué querían unos padres, pero eso también era soborno, disfrazado, pero soborno a fin de cuentas.
Al final decidió hacer su comida favorita y decírselo sin anestesia "quiero adoptar a un niño". Espero pacientemente a que Bokuto llegara a casa, no tardó mucho cuando escucho el típico:
—¡Keiji, estoy en casa!— sonrió inconscientemente y le dio la bienvenida desde la cocina.
En su mente todo sería un éxito, después de todo Akaashi siempre sobre pensaba las cosas y si no salían tal cual las planeaba se desesperaba, esperaba que este no fuera uno de esos casos, o se pondría a llorar de verdad.
Bokuto llegó al poco tiempo junto a él, cuando vio que la cena sería Yakiniku se puso a saltar por todo la casa, Akaashi creyó en el hecho de que ya tenía un niño en casa y lo único que haría ahora sería tener dos, la idea no le molesto del todo, se imaginó a Kōtarō pelear con el menor -que hasta ahora no tenía nombre, pero que sostendría la idea de que existiría- por quien tenía más carne en su plato, al final Keiji le daría la mitad de la suya a cada uno. Solo pensar en que eso era una posibilidad no muy lejana, le hizo sonreír.
Sirvió dos platos de comida, mandó a Kōtarō a lavarse las manos y en menos de nada Bokuto ya estaba sentado devorando la cena ¡era el momento perfecto! Estaba distraído y probablemente no lo procesaría bien, terminaría diciendo que si y Akaashi tendría su final feliz, en seguida se le vino la idea de Bokuto ahogándose y decidió guardarlo para cuando terminara de comer, si no lo hacía de esa forma terminaría tomando la decisión solo nada más porque Kōtarō habría muerto. No quería que Bokuto muriera, no cuando estaba por construir una familia con él.
Lo que definitivamente no se esperaba, era que su esposo le dijera al final de la cena que necesitaba hablar de algo muy importante con él, ¿y si tenía una enfermedad terminal y tendría que olvidarse de su sueño de tener una pequeña familia? ¿Y si finalmente se había aburrido de él y quería el divorcio? Cuando dijo "si a todo" debió especificar que al divorcio no, ¿verdad? Bueno, si, quizás Akaashi también tenía su lado dramático, pero nadie podía culparlo, vivía con Bokuto Kōtarō, el rey del drama, el mismo que si no conseguía lo que quería entraba en modo emo.
Espero paciente a que Kōtarō ordenará las ideas en su cabeza para que soltara de la forma más coherente lo que quisiera decir, al final diría alguna estupidez y Akaashi se obligaría a entenderle, siempre era así y a Keiji no le molestaba en lo más mínimo.
—Bueno, tú y yo llevamos muchos años en esta relación— empezó, molestando el anillo de compromiso, lo que le daba a Akaashi la señal de que estaba nervioso, decidió tomarle las manos para que supiera que no juzgaría lo que quería decir. —Keiji, ¿y si tenemos un hijo? Quiero tener un hijo, un hijo contigo.
A Akaashi siempre le decían que era el favorito de Dios, empezó a creer que era verdad. Se quedó estupefacto ¿qué se supone que debía decir?, ¿qué pensaba exactamente lo mismo?, ¿qué lo amaba por leerle la mente? Por favor Dios ayúdame a decir algo, pensó, cuando decidió que hablaría Kōtarō lo interrumpió.
—Está bien si no quieres, lo entendería totalmente, nadie querría un hijo conmigo—empezó, Akaashi pensó en interrumpirlo, decirle que no era cierto, pero es que estaba tan sorprendido que no salía nada de su boca. —Al principio pensé en adopción, por si decías que no, seriamos una ¿casa hogar? Bueno, trata sobre no quedarse con los niños, solo cuidarlos por un cierto tiempo... Sería más fácil—. Bokuto hablaba demasiado rápido.
Sin pensarlo dos veces Akaashi se abalanzó a Bokuto y empezó a dejar pequeños besos en toda su cara, quería gritar de felicidad, ¡Bokuto también quería una familia con él! AHHHHH.
—Sí quiero. —Beso. —¿Por qué no querría?—Beso. —Sí.—Beso— Y mil veces sí.
Diosito gracias por todo y perdón por tan poco, volvió a pensar. Esa misma noche, vieron el sitio web de casas hogares, Bokuto lloró con la historia de un niño, constaba de un pequeño de diez años que deseaba una familia que fuera a ver sus partidos de voleibol. Y como ese había cientos de casos, todos esos niños buscaban una casa en la que refugiarse mientras sus padres biológicos estaban en la cárcel, hospital o simplemente perdidos. ¿Lo mejor de todo? Bokuto y Akaashi estaban dispuestos a poner su casa y todo su amor para que esos niños no se sintieran solos.
El día siguiente Bokuto no tenía que trabajar y Akaashi había pedido el día libre, así que tenían todo el día para ir a averiguar los trámites y demás cosas, Akaashi no pudo dormir de la emoción que le generaba el creer que tendría una familia con el hombre que amaba.
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Instant family - Bokuaka
FanfictionBokuto y Akaashi llevan casados 3 años y quieren dar otro paso a la relación, tener un hijo. Todo un reto ¿verdad? Bokuto y Akaashi aman los retos. ●Inspirada en la película "instant family". ●Los personajes que se nombran NO me pertenecen. Person...