Capítulo 420: ¿Qué tiene de bueno Lin Qianqian?

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Ning Shu miró a Ji Qingyan. Probablemente estaba conectado con este fantasma de alguna manera. El fantasma siempre había estado jugando con ellas como si estuviera jugando al gato y al ratón, pero hoy, estaba inusualmente agitado.

Ning Shu comenzó a caminar hacia la ventana, pero Su Manyu agarró su camisa. –¿Qué estás haciendo? No vayas allí.

Ning Shu no prestó atención a Su Manyu, por lo que Su Manyu pisoteó con enojo y la dejó ir. Estaba demasiado asustada para seguirla hasta la ventana.

Con cada paso que Ning Shu daba, el fantasma se alejaba de la ventana. Finalmente, giró y corrió, luego el viento se detuvo.

–Vaya, no está mal, Zhuang Yutong. ¡Te las arreglaste para asustar a un fantasma hasta la muerte! – Su Manyu se secó el sudor frío de su frente.

Ning Shu estaba bastante molesta con este fantasma. Si guarda rencor contra alguien, debería vengarse. ¿Por qué las estaba metiendo a ellas, gente inocente, envueltas en esto?

Mientras tanto, el rostro de Ji Qingyan estaba mortalmente pálido mientras murmuraba: –No puedo quedarme aquí. Lin Qianqian no puede quedarse aquí.

–Entonces deberías darte prisa y llevártela. Sería mejor que se fueran. El hecho de que el fantasma quiera matarte significa que definitivamente estás relacionado con el fantasma de alguna manera –, dijo Ning Shu con un gesto de desdén.

Ji Qingyan: ...

Ning Shu cerró la ventana. – Ni siquiera ha amanecido aun, ¿debería volver a dormir? – En su camino, tocó la frente de Lin Qianqian y descubrió que se estaba quemando.

–¿Vas a llevarla al hospital? Está enferma –, dijo Ning Shu.

El rostro de Ji Qingyan estaba completamente pálido y sus ojos estaban ligeramente en blanco. Sintió que su visión del mundo acababa de ser destruida. Cuando escuchó lo que dijo Ning Shu, se sintió aún más confundido y no sabía qué hacer.

–¿Ella está enferma? –, Ji Qingyan comprobó apresuradamente la temperatura de Lin Qianqian, luego la preocupación llenó su rostro. Sin embargo, tenía miedo de salir cuando todavía estaba tan oscuro.

–Ji Qingyan, deberías llevar a Lin Qianqian al hospital. Si sigues retrasando las cosas, la fiebre simplemente empeorará –, dijo Su Manyu.

Ji Qingyan parecía vacilante, por lo que Su Manyu dijo: –Ya que todavía está muy oscuro, déjala beber la medicina de Zhuang Yutong por ahora.

–Bien–. Ji Qingyan se frotó la frente. Se sentía agotado, pero aún estaba aterrorizado.

Ning Shu curvó los labios con desdén, pero fue a preparar la medicina y la vertió en la garganta de Lin Qianqian. –Si lo hubiera tomado antes, no habría habido tantos problemas. Será mejor que la lleves al hospital una vez que aclare–, dijo Ning Shu con suavidad.

Nadie durmió bien esa noche. Ji Qingyan ni siquiera durmió y sacó a Lin Qianqian tan pronto como amaneció.

Cuando Su Manyu vio lo preocupado que estaba Ji Qingyan por Lin Qianqian, hizo un puchero con envidia y le preguntó a Ning Shu: –Dime, ¿Lin Qianqian es realmente tan buena? No es particularmente bonita y tampoco tiene una buena formación. A lo sumo, su familia cuenta como acomodada y su personalidad no es tan buena. A ella le gusta mantener una fachada de loto blanco mientras pisotea secretamente a los demás. ¿Qué tiene de bueno ella? –, Su Manyu no pudo aceptarlo.

Ning Shu: ...

La forma en que lo estaba expresando era como si su personalidad fuera tan buena. Tenía una lengua afilada y era autoritaria y arrogante. Sin embargo, tenía el capital para ser arrogante. Era hermosa, provenía de una familia adinerada y era más fuerte que Lin Qianqian en todos los aspectos, excepto por el hecho de que era la protagonista femenina de apoyo.

–¿Qué tiene de bueno Ji Qingyan? ¿Qué te gusta de él? –, preguntó Ning Shu. –¿Porque es guapo?

Su Manyu lo pensó y luego dijo: –Yo tampoco lo sé, simplemente me gusta.

Ning Shu se burló. –Eres hermosa y tu familia es tan rica como la de él. ¿Por qué tiene que gustarte?

–Eso realmente tiene sentido–. Su Manyu asintió. –Ahora que algo tan peligroso como un fantasma está aquí, en realidad ya no estoy tan preocupada por estas cosas.

Ning Shu pensó por un momento, luego le preguntó a Su Manyu: –Dime, ¿hay alguna manera de ver fantasmas?

–¿No hemos visto ya al fantasma? –, Su Manyu apoyó la barbilla. –Si esto no cuenta como ver fantasmas, ¿qué cuenta?

–Estoy hablando de poder ver fantasmas de forma voluntaria. Escuché que si pones las lágrimas de una vaca en tus párpados, podrás ver fantasmas –. Ning Shu se volvió hacia Su Manyu. –Su Manyu, ¿puedes conseguir algunas lágrimas de vaca?

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