Registro de Contraataques de Transmigracion Rápida de la Carne de Cañon (3)

Capítulo 443: Mi Perla

Ji Jinyan empujó una exquisita taza de porcelana hacia Ning Shu. –Señorita Zhuang, por favor tome un poco de té.

Cuando su cuerpo se inclinó ligeramente hacia ella, Ning Shu sintió una fuerza opresiva aún más fuerte. Ella bajó la cabeza y dijo: –Gracias.

El sacerdote daoista preguntó: –Ya que ustedes fueron atacadas por el fantasma, ¿por qué están bien? ¿Y ustedes dos tampoco parecen estar gravemente afectadas por la energía yin?

Ning Shu no quería revelar la existencia de la perla del alma, por lo que no habló. Su Manyu dijo: –Yutong se fue a casa y encontró un chamán. La chamán le dio una medicina que disiparía la energía yin y la bebimos mucho.

El sacerdote se acarició la barba. –Así que fue así. Pero también deberías tener algo protector contigo. De lo contrario, no hay manera de que ustedes estén tan relajadas.

El sacerdote miró hacia Ning Shu y ella dijo: –La abuela me dio un talismán protector.

El sacerdote se acarició la barba sin decir nada más.

Ji Jinyan le preguntó a Ning Shu: –Entonces, señorita Zhuang, ¿tiene más de esa medicina? Quiero darle un poco a esa chica de arriba, debido a que es la mujer que le gusta a Ji Qingyan.

Su Manyu curvó los labios con tristeza, pero Ning Shu asintió. –Bien.

Los labios de Ji Jinyan se curvaron. Había estado oscuro afuera por lo que no podían ver sus rasgos con claridad, pero mirándolo ahora, su apariencia era realmente refinada. A pesar de que era el padre de Ji Qingyan, parecía tener unos treinta años y tenía una manera fuerte e imponente.

Este era un hombre extremadamente guapo, no era de extrañar que el fantasma lo amara tanto. Esa leve sonrisa pareció suficiente para derribar una ciudad.

–Entonces tendré que pedirle a la señorita Zhuang que entregue la medicina mañana–, dijo Ji Jinyan mientras la miraba.

Ning Shu respondió: –Em. Los hemos molestado bastante tiempo, así que nos iremos primero.

–No hay prisa. Ya es bastante tarde. Esperen hasta mañana para irse –, dijo Ji Jinyan.

Ning Shu: Pero no te conozco.

–Ya que eres amiga de la pequeña Su, no hay necesidad de ser educado. No es seguro para dos niñas caminar afuera por la noche –. Ji Jinyan levantó una taza de té de la mesa de café de mármol y tomó un sorbo.

–No hay necesidad–. Ning Shu tiró de Su Manyu y se fue. Sintió que la mirada en su espalda era como una sombra acechante.

¿Qué está pasando?

Ning Shu suspiró aliviada cuando finalmente salieron de la villa. Su Manyu estaba realmente feliz. –¡El fantasma finalmente se ha ido! ¡Haa, finalmente podemos vivir en paz de nuevo!

Ning Shu también sonrió levemente y se relajó. ¡Haa, finalmente podría dejar este mundo!

Todavía estaba oscuro cuando regresaron al dormitorio, así que se volvieron a dormir. Después de despertarse, Ning Shu finalmente se dio cuenta de que la perla del alma se había ido.

Rebuscó en sus cosas, pero no pudo encontrarlas y casi sintió ganas de volcar toda la habitación. ¿Podría ser que la había dejado caer en el camino de regreso? ¿O se la llevó ese sacerdote?

¡Joder! ¿Dónde estaba su perla?

–Zhuang Yutong, ¿qué estás buscando? –, Su Manyu captó la expresión de gran odio y agonía de Ning Shu.

–Nada. Perdí un par de zapatos –. Ning Shu estaba sintiendo tanta angustia que su voz cambió de tono.

–¿Qué diablos pasa con eso? ¿No es solo un par de zapatos? Te daré un par. Eso te bastará para comprar cien pares –, dijo Su Manyu mientras agitaba la mano con desdén.

*Ding*

–Tarea completada, dejando el mundo de la tarea –. La voz de 2333 apareció de repente.

Zhuang Yutong colapsó inmediatamente al suelo. Mientras tanto, Ning Shu seguía gritando –¡mi perla, mi perla...!

Ella todavía estaba llorando incluso cuando llegó al espacio del sistema, por lo que el espacio se llenó con el sonido de sus gritos.

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