Leyend of Fuyao 2

12.

Little Seven estaba a punto de caer cuando de repente se detuvo. "Ella ni siquiera es mi esposa, ¿por qué debería golpearla? Naturalmente, Su Majestad debería ser quien lo haga", murmuró para sí mismo.

Golpeando su muslo, Little Seven "inteligentemente" se giró para irse. Cuando estuvo fuera de las puertas, ordenó bruscamente a los guardias: "¡Vigilen bien este lugar, ni siquiera se debe permitir que una mosca escape!"

"¡Sí, señor!"

Meng Fuyao escuchó mientras la voz de Little Seven se alejaba cada vez más. Su boca se torció ligeramente: ¡todavía había personas en este mundo que estaban cansadas de vivir!

Arqueó la espalda y se estiró perezosamente; dada su fuerza combinada con la medicina de recuperación del médico mongol, había recuperado su condición original hace mucho tiempo. Incluso si no estaba en las mejores condiciones debido a su constante ajuste de su estado, la medicina antidopaje inferior de Little Seven no fue suficiente para noquearla. Incluso marearla un poco ya era un logro.

Meng Fuyao extendió la mano y le dio unas palmaditas en la cabeza, frunciendo el ceño. La losa de piedra sobre ella era extremadamente pesada y, dada su postura actual, sería bastante difícil romperla. Por lo tanto, solo podía usar otra forma de salir. Se calmó y analizó cuidadosamente la habitación de piedra. En ese momento, se dio cuenta de que la habitación de piedra no parecía una simple habitación subterránea. Más bien, parecía ser un pasadizo antiguo. Probablemente habían pasado varias generaciones desde que se utilizó el pasadizo. Las paredes estaban picadas y la capa de polvo en el suelo era muy espesa; no parecía que la gente entrara o saliera con frecuencia.

Escaneó la habitación de piedra una vez más, el conocimiento y los trucos obtenidos del maldito viejo sacerdote taoísta y el príncipe heredero le resultaron útiles. La mirada de Meng Fuyao se fijó en un símbolo de Kirin en la pared. Extendió la mano y le dio un pequeño giro a las patas traseras que sobresalían. Inmediatamente, se escuchó un ruido bajo y retumbante, así como un leve giro de algún mecanismo. Sintiendo algo extraño por el sonido, Meng Fuyao instintivamente retrocedió. Acababa de enderezarse cuando escuchó el sonido de algo afilado perforando el aire. ¡Una lluvia de agujas/flechas salió disparada como una tormenta eléctrica con gran fuerza, dispersándose por las cuatro esquinas y cubriendo toda la habitación de piedra!

Las flechas volaban en todas direcciones, tan densas como una espesa niebla negra. No importa dónde mirara, había flechas por todas partes en el espacio que incluso era difícil de dar la vuelta. Más letales que un puercoespín, las agujas se dividen aún más en varias agujas más pequeñas. Incapaz de escapar a ningún lado, Meng Fuyao solo pudo pegarse firmemente al techo de la habitación, hundiendo frenéticamente su estómago y su pecho y acostándose lo más plana que pudo. En la oscuridad, las flechas de aguja silbaron junto a su nariz, hasta el punto en que podía oler el leve olor a veneno en la punta de la aguja. Las flechas de aguja pasaban a su lado incesantemente como una tormenta de granizo, y sintió frío hasta los huesos.

Sintió como si incluso una sola pestaña quedara atrapada entre las agujas: ¡esa arma oculta era demasiado densa!

Meng Fuyao yacía allí como un lagarto, con miedo incluso de respirar o moverse. Después de un rato, Meng Fuyao finalmente escuchó un clic. El arma oculta había terminado su ataque, y las cuatro paredes emitían un leve ruido retumbante. Meng Fuyao saltó y se controló a sí misma, todavía conmocionada, solo para darse cuenta de que había varias lágrimas en el área del pecho de su túnica. Estaba a milímetros de recibir un disparo.

Amén... Afortunadamente, su pecho era solo 34B...

En ese momento, Meng Fuyao sintió profundamente que, para alguien en el mundo marcial, era mejor tener un cofre más pequeño, reduciendo el área de contacto. En tiempos de emergencia, era realmente una cuestión de vida o muerte...