Leyend of Fuyao 2

96.

La persona detrás de Meng Fuyao parpadeó y respondió: "De nada. Sigue adelante."

Ambos echaron un vistazo a ese cuenco de arroz y se dieron la vuelta al unísono.

La celda de la cárcel estaba oscura y húmeda, con telarañas y heces de ratón a su alrededor. También había almohadillas blandas de algodón y pajitas de arroz en el suelo. De vez en cuando, había ratones negros que pasaban corriendo, y sus figuras y apariencias eran completamente incomparables con las del Señor Yuan Bao.

Cuando Meng Fuyao pateó a uno de los ratones, se frotó la nariz y murmuró: "Espero que ese tipo recuerde enviarnos comida. Quiero comer carne de mantequilla al vapor con jamón y la aleta seca de tiburón auspiciosa..."

Zhangsun Wuji se rió. "Lo único que puedes comer en este momento parece ser yo". Sacó la mano de las mangas y su exquisito hueso de la muñeca brilló en la oscuridad como una pieza de jade. Mientras lo escuchaba y miraba su muñeca, Meng Fuyao se sonrojó y miró a su alrededor. Sin embargo, Zhangsun Wuji de repente presionó las arterias de su muñeca e inmediatamente presionó las de él también. Ambos usaron sus artes marciales únicas para permitir que su energía interna circulara dentro del cuerpo de la otra persona. Momentos después, se soltaron y compartieron una sonrisa.

Ambos sintieron que la sonrisa de la otra persona era excepcionalmente hermosa y radiante en la oscura celda de la cárcel.

Debido a la píldora de Zong Yue, la energía interna de Meng Fuyao y Zhangsun Wuji se fusionó cuando sus energías internas aumentaron. Sus cuerpos contenían rastros de la energía interna mixta, y esto les permitió reponerse mutuamente cuando se estaban recuperando. Por lo tanto, sus fortalezas podrían complementarse entre sí.

Otra ventaja: podrían recuperarse y soltarse simultáneamente si sintieran peligro. Ya no había necesidad de hacer arreglos especiales para que alguien los protegiera, lo cual era una pérdida de tiempo.

Cuando Zhangsun Wuji acarició suavemente su mano, de repente dijo en un tono desolado: "No sé por qué de repente tengo este sentimiento. Puede haber muchos lugares para explorar en mi vida, pero todos esos lujosos lujos, hermosas residencias o montañas, ríos, mares, templos y palacios no son nada comparados con esta celda de prisión. Se siente excepcionalmente agradable..."

"Eres realmente ..." Meng Fuyao también se rió, pero se interrumpió y cambió de tema. Murmuró para sí misma: "Esta vez, no creo que volvamos a encontrarnos con Gale, ¿verdad?".

Sintiendo que este pensamiento era bastante cómico, sonrió y miró a su alrededor, pero no había nadie a su alrededor. Luego, sintió que su máscara no se usó correctamente esta vez, por lo que le pidió a Zhangsun Wuji que la ayudara a bloquearla mientras se quitaba la máscara y comenzaba a ajustarla.

Se sentaron uno frente al otro y miraron hacia arriba. Sintiendo el calor de la espalda del otro y oliendo el aroma corporal único del otro, pensaron con calma en el caótico Xuanji, las cosas que harían cuando estuvieran afuera y los enemigos que estaban escondidos entre las sombras. Meng Fuyao jugueteó con su máscara y, un rato después, suspiró. En voz baja, dijo: "Dame tres días, solo tres días..."

Antes de que pudiera terminar de hablar, una figura negra brilló frente a sus ojos. Una mano delgada y huesuda salió de la barandilla de madera adyacente y agarró el cuenco de arroz. Los dedos fueron muy ágiles mientras barrían el arroz caído en la palma, y ​​luego, la mano se retiró a la velocidad del rayo.

Cuando Meng Fuyao miró hacia atrás, vio a un prisionero en la celda adyacente que vestía túnicas grises que estaban tan sucias que no se podía distinguir el color. Mientras se metía rápidamente el arroz en la boca, le sonrió tontamente.