Me dejo ser en la miseria, tanto como me sea posible.
Me sofocan los ayeres, que hirientes resplandecen tal cómo el semblante jovial emanando de tí tras la honestidad de los tenues atardeceres.
El desgaste es notoriamente preocupante en mi rostro.
Vestigios que el tiempo suele dejar por costumbre.
La pérdida, la presión que ejercen las molestas masas por salir y presenciar las estaciones actuales.
Un porvenir nombrado hasta el cansancio, mismo que admito, jamás ansié con urgencia.
No busco redención, no me interesa en lo absoluto.
Al saber qué, soy quién debería estar de rodillas suplicando.
La precariedad del tiempo, el aire, la vida misma, poco me importan ya.
Sustancias indeseables, al ser mi causa un recuerdo, no pareciera haber razones suficientes para seguir respirando.
Lo siento [no lo siento.]
Fué llevada hacía el silencio, no hay dichas honestas que igualen el vacío que crece en mi vientre.
Al final, la soledad nace de ausencias, ya sean voluntarias...o no.
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arrecife de ilusiones
Puisisentires vulnerados. ' obra original. ' la portada y las imágenes las obtuve de pinterest, créditos a quiénes corresponda. ©Todos los derechos reservados. No se permiten copias, adaptaciones, pdfs, traducciones, comercialización o derivados sin mi a...
