MI Dulce y Tierno Fruto Prohibido (Lucifer X Lilith)

Dulces sueños mis Hijos

Es extraño, no siento mas ese horrible dolor, solo siento paz, que agradable, Padre se a quedado hasta que Michael se durmió, su regalo para el fue una noche estrellada en el techo de la habitación, y cuando por fin se quedo completamente dormido volteo a mi con una sonrisa en su rostro y me dijo.

Dios: mi pequeño ángel, uno de los mas preciados por mi, dime que es lo que te a llevado a cometer ese acto, ¿por que salir a hurtadillas de casa?, ¿por que quitarle el brazalete a tu hermano?

Esas eran preguntas, para las cuales no tenia respuesta, o tal vez si la tenia, pero puede que fuera un cobarde para admitir que amo a la mujer que a creado, que la amo y que no me importa el castigo que me pueda dar por tener sentimientos,  digo los humanos los tienen, ¿por que yo no podía?, si es por ser un arcángel, pues renuncio, porque preferiría la muerte en los brazos de un ser amado a ver toda mi vida pasar sin una pisca del amor y la alegría que ella me causa con una simple sonrisa, ¡pero como decirle a mi señor que estoy enamorado!, algunos dirán: "es fácil, el es Dios, el te ayuda y te entiende", si y es verdad no lo niego, pero estando aquí arriba me a tocado aprender que a veces la respuesta es un rotundo NO, así que yo solo agache mi cabeza ante la mirada de mi señor y con lagrimas en mis ojos empecé a decir.

Samael: Pa...se que te he  decepcionado y que no he sido del todo honesto contigo (exclame viendo mis grilletes) se que a ti te debo mi vida, lo que soy y lo que tengo, he tratado de cumplir tus expectativas, pero...pero...¡he fallado padre! (exclame llorando, pero en ese momento sentí una gran calidez rodear todo mi ser, era mi padre  quien me abrazaba) 

Dios: Samael hijo mío, tu... 

Samael: ¡No soy tu hijo! 

Mencione rompiendo en llanto, ya que no me creía merecedor de dicho nombre, pero tu solo me miraste con una sonrisa me abrasaste mas fuerte y me dijiste.

Dios: ¡Claro que eres mi hijo y no importa que, nunca dejaras de ser mi hijo! (pero luego me miraste con gran amor y  poniendo tu frente con la mía me sonreíste diciendo), hijo tu no fallaste, solo estas enamorado y eso no es un pecado, si tal vez les quite la opción de amar, pero no es porque el amor sea malo, es porque para ustedes es peligroso, ¿recuerdas como te pusiste al ver a Lilith ser besada por Adán?, eso es lo que les quiero evitar, el dolor, la desesperación, pero ahora veo que no te puedo dejar solo, por que sino estaría fallando como padre, así que hagamos lo siguiente, si estas de acuerdo claro; te permitiré ver a Lilith y si ella se enamora de ti en 15 días, tendrás mi permiso para estar con ella, ya sea como humanos o como ángeles, lo aceptare.

mi cara se ilumino al ver que mi padre entendía lo que sentía y que estaría de acuerdo conmigo en cortejar a la señorita Lilith, eso me puso  muy contento, me limpie las lagrimas y abrazándolo le dije.

Samael: gracias padre, muchas gracias.

Dios: no tienes que agradecer hijo mío, siempre velare por tu felicidad, bueno no quiero arruinar este bello momento, pero ya es hora de dormir, descansa.

En este mundo tan cruel

yo siempre los 

protegeré

DIOS