ଽ extra uno

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Liam escondió su carita entre el peluche de colores, sus orejas rojitas resaltaba por encima de la cabeza del oso, y sus pecas también se pintaban de un color café bajito tan dulce. El día de hoy brillaban con más emoción, resaltaban de forma preciosa, o tal vez era su amor por Liam hablando y haciéndole saber que estaba muy enamorado.

El moreno quiso abrazarlo y besarlo en ese momento. Pero era un idiota cochino con olor a vomito que no podía hacer nada más que mirarlo y adorarlo desde lo lejos.

Zayn recuerda que días atrás estaba llorando de la desesperación en su habitación, gruñendo y pidiéndole al universo que todo saliera como él deseaba. Y otras veces donde chillaba y se emocionaba con tan sólo saber que Liam le miraba.

Pero más que nada, lo que más en ese tiempo deseaba era tenerlo a su lado sonriendo y sintiéndose bien. Hacerlo sentir cómodo a su lado.

Al parecer sí, por algo Liam seguía ahí después de un mes.

Era eso, o le tenía lástima.

Pero él sí se sentía cómodo, bien, y era de ese bien, bien, que le hacía chillar y abrazar el cuerpo de su novio, aquel chico que le tenía las puertas de su corazón abiertas, por más cursi que llegue a sonar.

Aww.

— Lo siento. — Susurró viendo hacia abajo con enojo, ya que no podía molestarse con Liam porque él no tenía la culpa, él solo quería divertirse y reír allá arriba.

Pero él de menso que quería impresionar al chico lindo de su clase que ahora era su lindo novio que besaba sus cachetes y le decía halagos que lo ponían rojito.

— Ya cállate, no me importa. — Rizó sus ojos con suavidad. — Eres muy lindo. — Liam empujó al mayor con suavidad, era un dulce coqueteo que hacía reír a Zayn, le parecía tierno aquello.

— Tú eres más lindo, cariño. — Liam sonrió con sus cachetes rojitos. Zayn sonrió aún más ante ello.

Sus manos iban rozándose de forma pausada, pero ninguno de los dos parecía que tomaría la iniciativa de entrelazar sus manos, pero eso no cambiaba el rumbo de sus pasos, que aunque fuera recto ni siquiera sabía a dónde estaban yendo.

Era una cita, una cita que había comenzado en un parque de diversiones donde Zayn había salido llorando, sumado a que había vomitado en su ropa y parte de los tenis de Liam, los cuales veía y tenía ganas de meter su cabeza en el bote de basura, tal vez su cuerpo y que nadie lo sacara de ahí.

Miró los zapatos de Liam con vergüenza, sintiendo su cara quemar ante lo que veía. — ¿No te da asco?

— Mmm, — Dudó entrecerrando su ojito derecho. — algo, no puedo decirte que no porque es algo cochino. Pero no te preocupes, podré limpiarlo.

—Deberías dejar que lo haga yo por ti, es lo mínimo que puedo hacer después de que nos sacaran de ahí.

Liam rio y negó, sacudiendo su cabello que hoy se miraba más largo. — No, está bien, Zayn.

Para Zayn no estaba bien si le permitían decirlo porque, ¿CÓMO SE IBA A SENTIR BIEN CON ESA SITUACIÓN?

— Está bien nada, Liam. Huele feo esa madre y tú pareces despreocupado, cuando me miras no pareces enojado con lo que te hice, siendo que fue lo más ridículo que pude haber hecho.

— Zayn, sólo vomitaste mis tenis, no fue algo sorprendente. Cuando era pequeño y teníamos que ir a visitar a mi abuela a su pueblo, solíamos viajar en bus, y yo no puedo con los lugares cerrados, por lo cual terminaba vomitando encima de mí. — Fue él. Esa era la respuesta. Porque su mano gordita se entrelazó con la de Zayn con suavidad, hasta estar más juntitos.

El moreno quería llorar porque no quería que lo oliera, suficiente tenía con olerse él mismo.

›› Entonces, da ew pero no importa mucho.

— Eres demasiado lindo para esto.

— Zayn, — Llamó con fuerza, apretando su manito. — me gustas. Me gustas mucho, mucho.

— ¿Y?

Vamos, la pregunta estaba de más, pero le gustaba cuando Liam decía cosas lindas y le subía el autoestima con ello.

El castaño jugó con sus pies mientras sonreía, Zayn lo veía de reojo, sin perder la vista del camino. — Eso debería ser suficiente, Zay. Me gustas y que me gustes me hace feliz. Tú eres muy lindo, tienes muchas cualidades que sobresalen por sobre lo que crees que es malo, entonces, ¿Por qué todo eso debería de cambiar porque vomitaste, baboso?

— El baboso estaba de más.

— A ti te gusta que hable de más y te diga cosas que ya sabes. — Volvió a golpear con su hombro el brazo del mayor.

Zayn sonrió mientras asentía, de todos modos no era mentira lo que decía.

— Me hace feliz escucharte.

— Entonces sólo dímelo. No le des vueltas para llegar a eso. — Caminó más rápido, llevando por detrás a Zayn que lo veía aferrarse al peluche con la otra mano. La sonrisa del moreno no podía comparse con ninguna otra, se sentía tan feliz que poco le importaban los demás. — Y cállate. Te quiero.

— Te quiero. — Susurró después de un rato, sin dejar de sonreír.

Liam le hacía feliz, esperaba que el otro se sintiera igual.

♡ ──

quería algo cortito y
relajante, y quiero
creer que logre mi
cometido <3

no tenía planeado subir
extra aún, pero la moti–
vación me ganó. aún
tengo en mente hacer
más, así que esperen
por ellos. <3

los amo mucho,
gracias por estar aquí.

¿𝖢𝗈́𝗆𝗈 𝖹𝖺𝗒𝗇 𝖾𝗇𝖺𝗆𝗈𝗋𝗈́ 𝖺 𝖫𝗂𝖺𝗆 𝖯𝖺𝗒𝗇e?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora