La forma en que me miras.

Cochino

Take retomó la iniciativa e intento acercarse a mi (de un modo algo extraño si me lo preguntan, pero no debo ser quisquillosa si quiero volver a tenerlo cerca).

Se quedó mirándome fijamente un par de segundos... Yo sin más que hacer decidí preguntar:

-¿Tengo algo en la cara?...

- Mi mirada y toda mi atención, supongo...- contestó él como si no fuera vergonzoso decir eso en voz alta...

-¿Leíste esa frase de seducción en alguna revista pervertida?- dije arqueando la ceja mientras contenia una risita.

-No, lo inventé yo... ¿Te gustó?.

-Es terrible... Casi tanto como tú en los juegos que me enseñaste - dije sin poder contener una carcajada...

-No olvides que yo fui quién te entrenó...- dijo Take fingiendo que no había herido su orgullo. Se acercó lentamente y... - Además, ¡voy a enseñarte a no retar la autoridad de tu maestro!- ... ¡Me hizo cosquillas en la barriga!

No tuve más remedio que suplicar por piedad:
-¡No maestro! ¡Pido clemencia!- Una parte de mi no quería que se detuviera, pero creo que eso me hizo perder un poco el control de mi forma y mi cola se materializó un par de segundos y la sacudí inconscientemente mientras recibía las cosquillas...

Fue cuando Take se detuvo abruptamente: -¿!Viste eso Iruru¡?

-No se de qué me hablas, Take...- Desvíe un poco la mirada por qué no puedo mentirle muy bien teniéndolo así de cerca...

El se agachó a la altura de mis muslos...

-¿¡Take que estás haciendo!?...- dije yo con horror y vergüenza viendo su cara a algunos centímetros de mi entrepierna...

El estiró la mano e hizo enfasis en el espacio detrás de mis piernas y la pared: -Juraria que ví algo rojizo moverse detrás de tí...

-Cochino... - dije yo con la boca tapada y la cara roja.

Entonces el me miró desde abajo y se sonrojo al instante dándose cuenta de la posición en la que estábamos... Y la parte de mi que tenía frente a él.

-¡Ay perdón Iruru!- Dió un salto hacia atrás con la intención de levantarse rápido pero solo consiguió tambalear agachado cuando chocó con el banco de la recepción....

-¡TAKE CUIDADO! - y estiré mi mano para poder sostenerlo antes de caer... pero el bobo se colgó de lo primero que vieron sus ojos: El escote de mi camisa.

...

Ahora estaba cambiándome en la parte de atrás de la tienda. Take me prestó una camisa que le quedaba grande, aunque en mi caso apenas fue suficiente para cubrir mis pechos...

-¿ESE MÉTODO PARA VER UNA CHICA EN SOSTÉN TAMBIEN LO INVENTASTE TÚ?- Le grite sarcásticamente algo molesta.

-¡YA TE DIJE QUE LO SENTÍA!- Respondió Take desde la caja: asumí que aún seguía limpiando su hemorragia nasal...