La forma en que me miras.

Antes de la celebración

Los capítulos de relleno son mi punto débil.
El anterior no me dejó del todo satisfecho (y quizás tampoco a ustedes)... Pero luchando contra mi pereza creo que he conseguido mejorar un poco. Espero lo disfruten.

Gracias por su apoyo. Queridos lectores.

Las tazas de café estaban siendo inútiles...

Take y yo continuabámos luchando una batalla perdida contra el sueño, despertándonos mutuamente para evitar caer en brazos de Morfeo.

Tambaleábamos torpemente mientras nuestros cuerpos buscaban por su cuenta dejarse caer... Nuestros párpados se abrían con dificultad absoluta y los bostezos salían uno tras otro.

Cada vez que uno de nosotros decidía ceder ante el cansancio, el otro lo sacudía y espantaba momentáneamente el sueño: Esto había resultado efectivo, pero simplemente que alguien te despertara se volvía estresante...

Una peligrosa mezcla de somnolencia e irritabilidad cargaba lentamente mi cuerpo (y el de Take también). A pesar de la maravillosa noche que tuvimos juntos tendré en cuenta no repetir nuestra pequeña travesura un día antes de ir a trabajar...

--Esto no puede seguir así, Iruru...

-- ¿De qué estás hablando?... -- Me tallé los párpados.

-- Mantenernos despiertos hasta las 6 P.M... --  Dijo Take sosteniendo su taza con ambas manos. -- Esta ya es nuestra tercera taza...

-- La cuarta, si cuentas la que se te cayó de las manos...-- Cuestioné dando un sorbo más al café. -- Al menos limpiar el piso nos distrajo un rato...

-- Tú rompiste el contenedor de la cafetera.-- Recriminó rápidamente. -- Creo que estamos a mano.

-- Ni me lo recuerdes. Espero poder conseguir otro contenedor antes de que la señora Tsubaki note que lo rompí.

-- Eso espero. Al menos espero que no se le ocurra venir hoy...-- Take sopló su taza de café. --... Empezará a hacerse preguntas raras si ve lo desvelados que estamos.

-- ¿Tienes alguna solución, señor serio?...-- Cuestioné altivamente mirándolo de reojo. -- ¿Quizás una sesión de preguntas picantes para espantar el sueño?...

-- Tentador, pero te recuerdo que este es un establecimiento familiar. -- El se esforzó por disimular una pequeña sonrisa, cambiándola instantáneamente por su habitual mirada apagada: -- Creo que en vez de luchar contra el sueño simplemente deberíamos rendirnos...

No pude evitar arquear un poco mi ceja: -- ¿Cerrarás pronto la tienda hoy?.

-- ¡Claro que no! ¡Mi abuela nos mataría si se enterara!. -- Respondió indignado meneando su café. -- Mi solución es más simple...

-- Suéltalo ya...-- Dije tras vaciar mi taza por completo.-- No podremos seguir mucho así.

-- Sugiero que durmamos en el cuarto trasero...

-- ¿Ahora? ¿Los dos?...-- Dije un poco desubicada ante la sugerencia. -- Supongo que nos mantendrá despiertos pero... ¿Que no este era un establecimiento familiar?.

-- ¿Ehhh?...-- Respondió Take con evidente confusión en su rostro. Tras verme unos segundos comprendió lo que quise decir. -- ¡Eso no, pervertida! ¡Hablo de tomar una siesta por turnos!.

-- Esa es una mejor opción: 90 minutos para  cada uno hasta el cierre...-- Asentí, antes de preguntar: -- ¿Quién empieza?.

Pude sentir como la prometedora solución tensó el ambiente: ambos veíamos al otro con una mirada retadora intuyendo nuestras intenciones de tener la primera siesta.