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Yue Muzuhara fue una de las primeras hechiceras en el mundo, hace más de 1000 años, sin embargo entre los demás hechiceros, ella era conocida como una bruja al poseer más tecnicas malditas que otros hechiceros. Yue ha sido considerada u...
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—¡¿Que tu que?! —exclamó el líder del clan Zenin más que molestó, estaba furioso.
—Embarace a su hija, ya se lo había advertido de jóvenes. —respondió Satoru sonriendo.
—Maldito mocoso, ¡te voy a matar! —se fue sobre él sin embargo Satoru rápidamente lo evitó activando su técnica y evitando que lo tocará.
—No podías joderla más, ¿Satoru Gojo enserio? —le preguntó molestó Naoya a Hana que estaba sentada en un sofá de la residencia de los Zenin.
—Callate.
—Eres la decepción de la familia, aún que claro, las mujeres sólo sirven para traer hijos al mundo. —río el mayor gañéndose una mirada de odio de parte de su hermana.
Naoya seguía riendo cuando algo lo golpeó la cabeza, se giró rápidamente solo para ver un libro caer al suelo rodeado de una "energía" de un llamativo rojo, haciendo evidencia que fue Hana quién usó su técnica para golpearlo.
—Tienes suerte de que estas embarazada si no ya te habría metido una paliza. —la amenazó el mayor y está solo río.
—¿Que piensan hacer? —preguntó Naobito viendo a Hana y Satoru.
—Me haré cargo del bebé, claro está. —respondió Satoru.
—¿Y Hana?
—Pues tendre al bebé y me haré responsable, ¿que más espera que haga?
—No, me refiero a ustedes dos. Tienen que casarse.
Satoru miró a Hana y esta negó con la cabeza.
—Sobre eso... —dijeron ambos.
—No vamos a casarnos. —terminó la oración Hana.
—¿¡Que!? ¿Como que no se van a casar? ¿Estás demente? Ya es una aberración que te hayas embarazado antes del matrimonio y ahora resulta que no piensas contraer matrimonio. ¡¿Así te crié?! —Hana y Naoya se vieron pensando justamente lo mismo— no respondan. —les pidió y estos rieron en voz baja.
—Usted tal vez no lo entienda pero no pensamos contraer matrimonio y es posible que no criemos al bebé juntos.
—¿¡Que!? Hana, ¿estás pensando en matarme? —preguntó Naobito tocando su pecho.
—Papá, no estoy enamorada de Satoru y él lo sabe.
—Yo estoy bien con eso. —respondió Satoru sonriendo.
—¡¿Entonces porque te embarazaste de él si no estaban enamorados?!
