¿será posible?

.6.

NARRA COSCU:

Me desperté por golpes en la puerta, abrí los ojos encontrándome con oscu a mi lado, durmiendo pacíficamente. Él estaba abrazándome como koala, estaba abriendo despacio sus ojitos. Los golpes en la puerta seguían, no sabía quien chota molestaba a esta hora.

-H-hola- me dijo oscu, rojo.

-Hola, ¿dormiste bien?- pregunté, no alcanzó a responder, porque los golpes de mierda se intensificaron- ¿Quién chota es?-pregunté ya muy cansado.

-Soy zeko- dijo sonando enojado- Abríme- mandó zeko.

-Paraaa, ¿Quién te crees que sos?- dije con un toque humorístico.

-Abríme, dale, no estoy de humor- dijo demandante.

-Para- le dije. miré para el lado de oscu, quien ya no estaba en la cama conmigo, sino que ahora estaba en el baño.

Me levanté, me puse nomás el bóxer. Abrí la puerta, detrás de esta, estaba zeko con el ceño fruncido.

-¿Se puede saber por qué tardaste tanto?- preguntaba, cruzándose de brazos.

-¿Ahora no puedo tardar?, zeko, no te tengo porqué dar explicaciones- dije ya muy cansado de su actitud rara. Él nunca se comporto así conmigo. Parece como si estuviera celoso.

-Vivimos en la misma casa, chabón. ¿Qué?¿te estabas cojiendo a oscu?¿por eso no me atendías?- me miraba con enojo. Como reclamándome algo.

-Zeko, me parece que te estas equivocando- dije ya enojándome.

-¿Equivocándome?¿seguro?- empezaba a levantar la voz- ¡Ahhhh! ¡el nenito coje y nosotros lo tenemos que bancar!, ¡no es justo ¿sabes?!- dijo con las manos en los bolsillos.-¡¿Qué?! ¡¿ya te lo cojiste?! ¡¿te gusto?!-le cerré la puerta en la cara, no sé que le pasa, pero no me va a arruinar el hermoso día que tengo.

Me senté en la cama, vi como se abría la puerta del baño. De ahí salía oscu, con su pelo húmedo, goteándole en los hombros desnudos, la toalla rodeándole las cadera. Era sexy ante mis ojos. Cuando me vio, sus mejillas se volvieron rojas al instante.

-Me-me vo-voy a vestir- dijo rebuscando entre sus cosas.

-Te ves re lindo- le sonreí, aunque no me haya visto.

-¿Gra-gracias?- decía mientras se iba hacía el baño.

NARRA OSCU:

Wtf, esto posta era extraño. Nunca recibí halagos de un hombre, mucho menos coscu. Yo igual estoy muy confundido, cojimos ayer, yo pensé que nomás íbamos a cojer y ya esta, pensé...que a él...le molestaría si yo...me termino... enamorando.

Me vestí y salí del baño, Martin ya estaba vestido- ¿No te vas abañar? sucio- dije con humor.

-Después me voy a bañar, total vos y yo nos vamos a volver a ensuciar- dijo riendo.

Yo enrojecí, porque entendí esa referencia.- ¿So-sos ta-tarado?- dije aguantando las ganas de comérmelo a besos.-Vamos- salí de la pieza, yéndome a la cocina.

Ahí estaba momo, zeko, drigo. Desayunando. Momo me miró y golpeó una silla al lado suyo. Entonces me senté ahí. Después vino Martin, zeko me miraba con odio. Me da cosita.

-Hola- decía coscu, sentándose al lado de drigo, quien estaba enfrente nuestro.

El ambiente era tenso, yo nomás comía y veía a Martin. Él me devolvía la mirada, haciéndome sentir bien. En una siento que tocaron la puerta, entonces va Martin.

Paso un rato largo, escuchábamos risas que se acercaban de a poco, era de la chilena y coscu. Martin tenía un brazo por arriba de los hombros de la chilena. Sentía una acidez en mi panza, miré a momo, quien miraba la escena con desconcierto, al igual que drigo. Llego a un punto que coscu se sentó y la hizo sentarse en su regazo. Ella feliz, él también. 

-Chicos, con Martin, planeamos hace días... volver- mi corazón explotó, sentía mis lágrimas caer, me levanté abruptamente, corriendo hacía la pieza.

Pasaron minutos, pero una persona tuvo que entrar, no quise ver. Estaba recostado sobre mis rodillas, en la esquina de la pieza, llorando. 

-Perdón- dijo, ese era Martin- No pensé que el sexo era significativo, y tampoco pensé que Belén iba a aceptar volver-dijo, yo sin mirarlo.-Perdón, podemos ser amigos- dijo.

Si claro, "amigos", justo cuando descubrí que me gustaba. Aunque tampoco puedo odiarlo.

Levanté la cabeza, él estaba al frente mío, mirándome. Con lágrimas en los ojos, yo lo miré- Esta bien, amigos-me seque las lágrimas, levantándome. 

Lo seguí hasta la cocina, donde nomás estaba Belén. Me senté a viciar un rato al minecraft con el cel. Me empecé a sentir re incomodo, celoso cuando Martin y Belén se empezaron a morfar las bocas el uno al otro. Levantándome, me fui al comedor. Ya es jueves, ya falta poco para irme, mejor ¿no?.

holiwiiii. espero y les guste. chausitoooooo.