CAPITULO LXXIV

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Al día siguiente Camila llega a la empresa, saluda a las secretarias y luego entra a su oficina, prende el computador pero es como si no viera nada, sus pensamientos hacia Julio no la dejan concentrarse en sus tareas y eso jamás sucedió, ni siquiera cuando estaba con su ex antes de la tragedia que este le causó, todo lo que la lastimó física y mentalmente, nunca se había sentido así por eso la tenía tan perpleja, obnubilada ya que no sabía cómo manejarse con lo que estaba sintiendo por él.
Entonces coge su celular y busca un número de teléfono, luego llama, del otro lado contestan;
Srita:" Consultorio buenos días, en que le puedo ayudar?"
Camila:" Si srita para confirmar mí sección con la licenciada Aristizabal Contreras por favor, soy Camila Mendoza Pinzón"
Srita:" Si, su turno es para hoy a las 2pm srita"
Camila:" Muchas gracias srita" luego corta la llamada y piensa en eso:" Será mejor que hable de Julio con mí terapeuta, necesito que me ayude, no puedo estar así" se decía para adentro.
En ese preciso momento, llega a Ecomoda Julio, saluda y se dirige a su oficina, prende el computador y empieza a trabajar, pero se detiene un momento a pensar en lo sucedido la noche anterior y en su cara se esboza una sonrisa ya que sus recuerdos son felices para él.
Julio:" Ay Camila que bella estabas anoche, corrijo siempre estás bella, ay Dios mio no te puedo dejar de pensar, estás en mí mente siempre que voy a hacer, te entraste sin querer a mí corazón como jamás nadie lo ha hecho en toda mi vida, me enamoré hasta los huesos y no se como actuar ante éste sentimiento, Dios ayudame a poder lograr que Camila se enamore de mí, me haría el hombre más feliz del mundo. Bueno Julio ya deja de pendejadas y ponte a trabajar ya" se coloca enfrente del computador y empieza a trabajar.

Continuará

Ecomoda XXIDonde viven las historias. Descúbrelo ahora