CAPITULO CLXXXIV

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En ese momento, en un bello apartamento en Bogotá, Armando se despertaba junto a su esposa.
Al mirar el reloj vió que prácticamente era el mediodía, así que se levantó lentamente para no despertar a Betty.
En el comedor estaba muy feliz doña Julia preparando la comida para todos, sonreía ya que no podía creer que sus rezos fueron escuchados y le devolvieron a su niña por fin. Al verlo entrar, le sonríe y le dice;
Julia:" Armando mijo como está mí Bettyca?"
Armando:" Está bien doña Julia, la dejé dormidita en la cama estaba cansada por todo lo sucedido"
Julia:" Que bueno mijo, estoy cocinando algo rico para el almuerzo. Quiere comer algo?"
Armando:"Si doña Julia, pero no se hubiera molestado"
Julia:" No te preocupes, me encanta cocinar. Ven siéntate aquí que te sirvo algo para picar, hago unos pasabocas para ir comiendo algo mientras esté el almuerzo."
Armando:" No se preocupe, por favor no se moleste"
Julia:" No es molestia mijo, usted sabe que lo quiero como un hijo también"
Armando:" Gracias y es un honor para mí serlo. Sabe algo doña Julia, me va a disculpar si no se lo dije antes pero usted realmente se ha comportado conmigo todos éstos años, como si fuera mí verdadera madre. Es más, usted se comportó mucho mejor que ella porque me dió cariño que jamás recibí de ninguno de mis padres sabe. Mí infancia y adolescencia la pasaba mayormente con los empleados y la nana, por eso nunca supe lo que era amar a alguien. Y ese fue el motivo del cual no me di cuenta al principio que estaba enamorado de Betty, se acuerda ese día que hablamos?(Julia asiente con la cabeza)yo le hablé con el corazón en la mano y eso es gracias a ella doña Julia. Gracias a ella, a mí Betty, al gran amor de mí vida es que descubrí el amor y yo sin ella no soy nada "
Julia (Con lágrimas en los ojos):" Yo ese día lo noté sincero y por eso le dije dónde estaba Betty. Lamento mucho todo lo que le sucedió mijo pero sabe que lo aprecio muchísimo y puede contar conmigo sinceramente siempre."
Armando:" Muchas gracias doña Julia "

Ésta le acercó los pasabocas y Armando empezó a degustar, siguieron hablando plácidamente. Lo que no notaron era que Betty los había escuchado ya que se había despertado y se diría a la habitación de los bebés, pero al escuchar las voces le dió curiosidad y se acercó allí. Lo que dijo Armando le llegó al alma, en todos éstos años pudo comprobar lo que siempre se dió cuenta. Que nunca tuvo un calor de hogar, con el paso de los años, terminó de entender toda esa vida que tenía anteriormente a enamorarse de ella. Siempre notó que él necesitaba la aprobación de su padre, que éste le diera afecto y entendía perfectamente porque Armando actuaba así, porque detestaba tanto a Daniel Valencia y era por el mero hecho de que le había quitado el amor de su padre. Eso también había sucedido con su hermana Camila y su madre, ella tampoco le perdonaba que la reemplazara por Marcela. La misma Camila le había comentado aquella vez cuando fueron a Suiza a que Armando le presentara al amor de su vida. Entre ellas hubo química al instante, en tan sólo pocos minutos parecían mejores amigas de toda la vida, cosa que a Armando le encantó porque ni siquiera pasó eso con Marcela y eso que se conocían desde pequeñas.
Se acerca lenta y pausadamente detrás de su amado, sin que él o doña Julia la vieran. El primero porque estaba sentado de espaldas a Betty y doña Julia la vió pero ella le hizo señas para que no le diga nada a él.

Al llegar cerca a él, lo abraza fuerte y Armando salta del susto pero la da vuelta hasta quedar frente a ella y le da un beso apasionado delante de doña Julia que los miraba con una sonrisa en la cara.
Armando:" Y eso porque fue, mí amor?"
Betty:" Tiene que haber una razón para amarte?"
Armando:" No mí vida, bueno en realidad sí(Betty se queda mirándolo extrañada)que soy un hombre guapo, excepcional, excelente esposo, gran padre, hijo, amigo y el hombre que te ama con locura "
Betty sonríe al escucharlo decir todas esas vainas tan románticas y decide aportar algo más a su ego.
Betty:" Y te olvidaste decir un gran amante (lo besa) me parece que el sr Mendoza está muy creído hoy ah?" Sonríe
Armando:" No eso jamás mí vida, ven a comer algo rico que nos preparó doña Julia"
Betty:" Umm que rico, huele delicioso mamá"
Julia:" Siéntate mija, ven a comer algo"
Armando:" Hay que llamar a Matheo y a Samanta para que nos acompañen"
Julia:" Matheo se fue a la casa de Fiamma, lo invitaron a almorzar. Voy a llamar a Samanta para que venga"
Cuando Julia se fue a buscarla y se quedaron sólos, aprovechando la oportunidad para decirle lo que pensaba hace rato.
Betty:" Mí amor?(Armando la mira), no te parece que Samanta se comporta muy extraña?"
Armando:" Cómo así? A qué te refieres mí vida?"
Betty:"Es que te mira demasiado, te sonríe a cada rato, no se me parece que le gustas mucho"
Armando:" La verdad que no me di cuenta mí amor y sabes porque?(ella niega con la cabeza), porque sólo tengo ojos para la mujer de mí vida y esa eres tú"
Betty:" Ay no podes ser tan bello mí vida"
Armando:" Nada comparado contigo cielo. Comemos algo ahoritica si?"
Betty:" Esperemos a mamá y a Samanta vida"
Armando:" Cierto, esperemos vale?"
Ambas llegan y los cuatros se disponen a comer la apetitosa comida que doña Julia preparó con tanto esmero.

Continuará

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