cuatro.

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- ¿Proverbio chino? - la voz de Endeavor se materializó a su lado.

Con parsimonia, intentando no caerse allí delante del número dos y el número tres, se lamentó por no poder incendiar sus alas para no estropear la camiseta e ir más rápido. Así que se dejó caer, esquivando las plumas de Hawks como se podía, y elevó el vuelo a ras del suelo para perderles de vista. No sabía porqué le seguían, ni quería saberlo.

Endeavor, un hombre que cualquiera reconocería a simple vista por su cara de estar oliendo mierda cada vez que se cruza con una persona cualquiera. Teniendo una maltratadora en casa, era inevitable no poder reconocer a los externos. Hawks también es bastante llamativo, alguien que enerva a Tenshi porque parece caminar con una falsa humildad que no le agrada, aunque jamás negaría que un dios griego es un dios griego. Tenía una especie de competencia con Hawks que ni el propio héroe sabía. El héroe más joven que montó su propia empresa, ya era reconocido a los dieciocho y con tan solo veintidós estaba en el top tres de los héroes más fuertes de todo Japón. No envidiaba eso, Tenshi no quería grandes atenciones, no quería ser el número uno ni quería ir repartiendo sonrisas falsas con esa actitud de que todo era de color de rosa. Él quería una empresa, Hawks la tenía desde joven. Si bien en parte era una inspiración a seguir, el medio rubio o castaño claro, lo que fuera, no le olía del todo bien.

No le conocía personalmente, pero en esos momentos no había tomado su café y resultaba ser un día estresante para su mente, estaba irritado por no haber dormido sus horas habituales y eso le pasaba bastante factura.

- Es un buen truco - Hawks había aparecido a su lado de nuevo, Endeavor no se hizo esperar con su ceño más fruncido que antes. - Vamos al mismo sitio, no te contengas - habló burlón.

El mundo no era rosas, lo dicho.

- No quiero saber porqué me estás siguiendo - le cortó de forma tranquila, sonriendo igual de hipócrita que el castaño, haciendo que Endeavor voltease la mirada escondiendo una sonrisa. -. Deberías de tener cuidado con eso.

- ¿Eh?

PUM.

Y Hawks chocó contra el muro de la U.A, iniciando el protocolo de seguridad como ataque a la escuela. Tenshi se posó delicadamente en el suelo y resguardó las alas, aunque moviéndolas en todo momento, e ignorando a Endeavor notablemente. Bostezó antes de beber café y continuó adentrándose en la U.A con tranquilidad y los ojos entrecerrados.

Un rubio y un castaño con gafas, salían alarmados del edificio seguidos por un par del personal, sus caras cruzaron confusión al verle entrar con tal actitud frente a ellos y susurrando un simple "Buenos días" como si no importase el sonido de la alarma. Nezu, desde su despacho, la apagó con una pequeña sonrisilla mientras que veía por unos binoculares por la ventana. Despreocupó a los profesores, que se habían puesto alerta por la alarma, y les indicó que tomasen asiento. Sin duda, sería una mañana muy muy interesante.

Comenzó a tararear por lo bajo alguna canción japonesa, que parecía ser bastante movida, y Endeavor lo siguió de cerca, observándole fijamente mirar el mapa de la U.A en la entrada para saber donde se tenía que ir. Si bien el mayor conocía bien el edificio, no dijo nada y se limitó a seguirlo, ¿qué tan importante sería ese muchacho como para que el director le llamase y decirle que le interesaba ir? La respuesta a porqué había aceptado a ir era porque había visto el vídeo de su prueba. Su hijo haría eso con la particularidad del hielo y los ojos cerrados, esos robots eran una completa tontería para él y parecía que la sonrisa del chico indicaba lo mismo. La elegancia con la que había hecho cada cosa, la fuerza y la preocupación de no destruir el ambiente. Sin duda, teóricamente -su examen lo demostraba-, estaba más avanzado que su hijo. Quizás debía concentrarse también en eso, después de todo All Might no había llegado a ser el Símbolo de la Paz por entrenar su don, ¿no?

El ángel de la guarda. (bnha x male!reader)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora