El ángel de la guarda. (bnha x male!reader)

diecinueve.

Tenshi hizo una mueca. Su primera pelea sería contra Iida, después contra Tokoyami o Momo. Habilidades fuertes y, que si ellos usaban bien, podría ser fatal para él.

De igual forma, al haber resultado herido y consumido de energía para curarse, había acabado muy cansado. La siesta que se había echado en el camerino le había ayudado un montón a recargar las pilas, descansar su abrumada mente y luego mentalizarse durante un buen rato. Nada más salir, fue enfocado por las cámaras, aunque no le prestó mucha atención y se puso a calentar en lo largo del edificio para despertarse todo lo posible y mantener sus alas calientes.

Luego de unas cuantas vueltas, comenzó a mover las alas en sincronización y, al ver a los niños, sonrió incendiandose para hacer muchos animales que jugaran con ellos. Cogió un mechero que Aoi le tiró y procedió a encenderlo sobre su mano, comenzando a absorber todo el fuego mientras que seguía caminando y batiendo las alas. Iba a necesitar lo justo y necesario en plus, pero lo guardaría sola y únicamente de reserva.

Luego de un rato, recogió los animales, absorbiendo su fuego, y le devolvió el mechero a Aoi con agradecimiento. Le guiñó un ojo a Kaida, sin siquiera pensarlo, y se giró con una sonrisa muy amplia hacia la arena ya hecha.

Con un trote ameno, se acercó a Iida, que dejó de hablar con Midoriya y Uraraka para girarse hacia él. Tenshi, sintiendo las cámaras encima de nuevo, sin prestarles atención, acogió la mano de Iida para darse un apretón con una sonrisa amplia y un breve abrazo.

- Te deseo suerte - le dijo Iida con una sonrisa inevitable, pues Tenshi era alguien demasiado amable y contagioso para los demás. Su sola sonrisa era como un chute de alegría para cualquiera que lo viera.

- Igualmente, Iida-san, tengamos una buena pelea - se inclinaron frente al otro y se dirigieron a sus puestos, pues el primero en participar sería Midoriya y luego ellos -. Midoriya - se acercó a él rápidamente -, ten cuidado con Hitoshi-kun - sonrió brevemente al ver la cara de susto del peliverde -. Ten una buena pelea - le revolvió el pelo y se metió a los pasillos.

Un poco alejado de sus compañeros, para continuar haciendo pequeñas carreras, saltando en su lugar y moviendo sus alas brevemente para mantenerlas en caliente y listas para cualquier cosa. Iida había optado por irse a un camerino a mentalizarse y crearse una estrategia. Tenshi no se podía mover mucho allí, así que no había vuelto por eso mismo.

Su entrenamiento se vio interrumpido por Todoroki, que le había tocado el hombro para llamar su atención algo avergonzado.

- Tenshi, ¿tienes un momento?- el peliblanco asintió con una sonrisa y se alejaron un poco de la clase, que les miraban tensos - Quería pedirte disculpas por...

- No has hecho nada malo - le cortó Tenshi, apoyándose en la pared con una sonrisa relajada y amigable, cruzándose de brazos sobre su pecho -. No tienes que pedir disculpas, Todoroki-san - negó con la cabeza unos segundos -. Te di un consejo como tu compañero y persona que soy - puso una de sus manos sobre los hombros del muchacho, que se quedó callado mirándole fijamente -. Está más que claro que Endeavor-san es un héroe que no tiene buena relación social y de lejos puedo oler que la familia tampoco es uno de sus fuertes - colocó el otro cuando los hombros de Todoroki se tensaron, mirándole más intensamente -. Ni debo, ni quiero meterme en los problemas que tengas personales, pero me preocupa tu bienestar y el hecho de que no comprendas que los de tu alrededor, por mucho que compitan para el mismo puesto que tu quieres, son tus aliados, no tus enemigos - volvió a separarse, apoyándose en la pared de nuevo, mirando al bicolor -. Para ser un héroe, primero tienes que saber qué son los amigos - rió suavemente -. Y sobre todo ser tú - posó su dedo en el pecho del muchacho -, porque tu poder es tuyo y tú tienes que saber cómo usarlo - le dio pequeños golpecitos cada vez que decía "tú" -. Tú eres Shoto, el chico mitad-mitad, el tercero en el puesto de las clases en poder. - esta vez posó ese dedo en la cabeza -. Grabatelo de una vez, Todoroki-san, ciérrales la boca con tu poder y acéptalo porque eres tú el que lo posee. - se relajó en su lugar y observó que ya le estaban llamando para salir -. Ten una buena pelea - se despidió sin dejarle hablar, comenzando a trotar hacia dentro del edificio, saliendo al centro del edificio, sonriendo grandemente de forma inmediata.