part 10. un mal encuentro

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"quiero que recorras conmigo el camino,

sin que nos importe cual sea el destino"

(iseo)


















- Y había pensado celebrar una pequeña fiesta en mi casa, ¿que te parece?

- ¿Qué?

Jessica había tomado a Leila del brazo desde el momento en el que esta puso el primer pie en el aparcamiento del instituto, y no la había soltado en ningún momento.

La pelinegra había tratado de prestarle atención, en n intento por ser un poco educado, pero había terminado por desconectarse por completo.

- Que había pensado celebrar una fiesta en mi casa: los chicos, Ángela, Bella, tu hermano... Y tú, si quieres, claro. Y puede que alguien más. Nada muy grandioso, sólo para divertirnos. ¿Vendrías?

- Oh, yo... - miró a su alrededor en busca de alguien que la pudiera sacar de ese aprieto, pero no encontró a su mellizo. En otras circunstancias no habría tenido problema en decirle que no, que ni de broma. Pero en aquel momento, al ver la mirada de ilusión de la pobre chica, lo tuvo un poco complicado - Jessica...

Antes de que pudiera formular una simple frase sintió un brazo pasar por su cintura y alejarla con sorprendente fuerza de Jessica.

No tuvo que mirar hacia un lado para saber que se trataba de Rosalie.

- Lo siento, pero Leila ya tiene planes para ese día - la escuchó decir en el tono más frío posible. La pelinegra podía sentir con total claridad en su pecho toda la molestia que Rosalie estaba sintiendo.

- Pero si aún no le he dicho el día - se defendió Jessica - Y creo que ella es mayorcita para hablar por si misma - añadió, cruzándose de brazos en una actitud ciertamente desafiante.

- Lo cierto es que ya tengo planes, Jessica - intervino Leila, siendo consciente de que como la cosa siguiera así no acabaría bien - Y no me gustan las fiestas. Lo siento.

Rosalie sonrió triunfal antes de tirar de su compañera para alejarla de la humana. Cuando dieron la vuelta a la esquina Leila se liberó suavemente.

- No tienes porque estar celosa de Jessica.

- No estoy celosa. Estoy molesta. Porque es una persona molesta.

- Si estás celosa.

- ¿Y tú que sabes? ¿Te lo dice esa voz que tienes en la cabeza? - golpeó la frente de la pelinegra con el dedo índice, haciéndole sonreír mientras negaba.

- No necesito que me lo diga. Se nota.

Rosalie abrió la boca para replicar una vez más pero se detuvo al ver a Tommy aparecer por detrás de su hermana para abrazarle.

- ¿Cómo está la mujer más bella de todo el instituto? - Leila puso los ojos en blanco - No te ofendas, Rosalie, pero es que mi hermana...

- Estoy bien, Tommy, ¿y tú?

- Estoy bien también. Pero podría estar mejor. ¿Y sabes cómo?

- Cuéntame.

- Si me acompañaras a La Push hoy por la tarde.

La rubia frunció el ceño pero no dijo nada.

- ¿Para que quieres ir allí?

- Ayer fui a sar un paseo por el bosque y me encontré con Jacob Black. Me invitó. Bueno, nos invitó. ¿Qué me dices?

La hija de la Luna {Rosalie Hale}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora