Un Estudiante desesperado en un juego. En Tloz.

Capitulo 8: El inicio de la leyenda.

Una alimaña se encontraba satisfaciendo su hambre y propagado su infección a través de un viejo y noble árbol.
Consciente que su tiempo se aproximaba, pidió ayuda a una amiga suya, un hada salió a socorrer el pedido del árbol, buscar y traer a aquel niño que no tenía un hada.

El hada voló por todo el bosque Kokiri pasando por debajo de las piernas de Mido quien fungía como guardian a la entrada de la pradera del árbol, paso por casi cada uno de los Kokiri presentes, algunos tiraban de piedras, hierbas y hacían saltos, otros jugaban encima de plataformas elevadas, mientras otra se encontraba observando todo en el punto más elevado del bosque Kokiri jugando con una ocarina.

El hada pudo ver una casa apartada del resto en la parte superior de un árbol y se dirigió a ella aunque en el proceso chocó contra una serca, aún así había logrado encontrar al niño quien parecía no poder despertar de una pesadilla.

Tras varios intentos había logrado capturar su atención para después presentarse como Navi, el hada, quien le obligó a dirigirse a ver al Gran Árbol Deku.

Al salir Link de su casa fue interceptado por Saria, feliz por la noticia no tardó en hablar con él. No solo el hecho de que su amigo tenía un hada también el Gran Árbol Deku le había convocado.

Aunque unas palabras resonaron en su arrebató de alegría.

«Ahora ya eres un Kokiri»

A pesar de que Link se encontraba pensando en esas palabras, la Hada le apuró a ir a ver al Árbol más sin embargo al acercarse a la pradera Mido les negó la entrada.

Mido, más atento a los detalles pudo ver qué tenía un hada consigo, tenía que preguntarle el porqué, pero no deseaba saberlo, de alguna forma las cosas cambiaban.

Los niños sin Hada ya no están presentes, link tenía un hada y Henkis había desaparecido, Saria parecía distante y el resto de los Kokiri parecían estar tristes.

Afirmó que, actualmente el Árbol Deku se encontraba enfermo y que no recibiría visita alguna, que era peligroso para cualquiera ir y más para aquellos que no tuvieran el equipo necesario, una espada y un escudo por lo menos.

Link salió disparado buscando el equipo, tras un tiempo de investigación supo que podía comprar un escudo Deku por 40 Rupias y que existía en alguna parte del bosque Kokiri una espada, solo fue cuestión de revisar la zona de entrenamiento para encontrarla, en comparación el conseguir aquel escudo en venta fue mucho más fácil.

Mido no pudo negarle la entrada ahora, y vió como más temprano que tarde Link desaparecía en el pasillo hacia el prado del Gran Árbol Deku.

El imponente árbol le contó lo que se avecinaba para Hyrule, un mal al que incluso su poder sobrepasaba, le contó también que una maldición se encontraba dentro de él, cuya existencia atenta contra la suya, le pidió que enfrentará con todo coraje a la alimaña dentro de él para así vencer al mal dentro del bosque.

Dicho eso, una entrada se tallo en el árbol Deku, dando acceso al interior del Árbol enfermo.

Algo a lo que sorprendentemente Link no se negó, y partió a combatir a aquella amenaza para su hogar....

Mientras el rubio entraba, el Árbol Deku no dejo de pensar en si era correcta la extraña profecía del chico que días previos abandonó el bosque, tenía fé en él, en ambos, en que harían lo correcto y demostrarían su coraje.

Confía en sus hijos. Este nuevo Henkis no era uno de ellos, pero aún así, alguna vez fue su hijo.

El tiempo avanzo, su embrague se hacía notable cuando los rayos del amanecer emprendieron vuelo al momento de pedirle ayuda a Link y ya casi era medio día, estaba preocupado por lo que tendría que enfrentarse Link por haberle pedido ayuda.