Polaris 💫°Larry S° [EN EDICIÓN]

CAPÍTULO 4

Antes de que Louis cumpliera la mayoría de edad, sabía que tendría que dejar ese lugar, no siempre iba a ser un niño pequeño, debía tener una vida y vivirla.

Louis quería seguir aferrándose a ese amor infantil y tonto, pero con algo de madurez entendió que jamás sería posible. Ya no deseaba nada, ni pensaba mucho en la Navidad. En cambio, Harry al ser elfo, se aferraba mucho a esos deseos Navideños.

En los años jóvenes Louis nunca le vio una novia elfo a Harry, no sabía cómo sentirse, lo que si es que Harry tenía pretendientes. Mujeres elfos babeaban por él, y quien no lo haría.

Un alto y fornido Harry, con hoyuelos en las mejillas al sonreír, una dentadura perfecta y sonrisa exquisita. Los ojos más hermosos que Louis pudiera ver y una vibra tan gentil y a la vez explosiva. Obviamente todos estaban detrás de Harry, pero a él parecía no importarle eso.

- Harry ¿con quién iras al baile este año?

Estaban caminando hacia el taller ya que la hora del almuerzo había terminado. Al sentir el tono de voz a la pregunta de Louis, freno el paso y lo observó.

- ¿Estás pensando ir al baile?

- No lo sé, pero papá dice que al ser mi décimo octavo cumpleaños debo hacer presencia, ya no podemos seguir posponiéndolo.

Harry pareció pensarlo e hizo un ademan de aceptación a la demanda de Santa.

- Bien, entonces podríamos ir un rato y ya sabes, huir con los postres de coco y jengibre, unas mantas del taller para hacer un picnic de medianoche en el lago o en el techo de mi casa.

- Yo no creo. Bueno. Podría ser. Si, si, está bien.

Después de esa tarde cuando Louis dejó a Harry en el taller y marcho a su casa no volvieron a hablar del baile. Louis pensó que al sentir un poco rara la reacción sobre ir con alguien más al baile no se imaginaba cómo reaccionaría Harry al saber que Louis se iría pasando las festividades.

Nunca lo había hablado, a excepción de cuando tenían diez y estaban mirando las estrellas por el telescopio de Louis en su habitación.

- Louis, ¿alguna vez te irás de aquí?

La pregunta lo sorprendió, y observó a Harry demasiado tiempo antes de responder.

- No me gustaría irme, no quiero dejar a nadie atrás, pero Papá dice que debo irme. No me dijo cuándo pero no creo que él cambie de opinión.

Desde esa vez nunca han mencionado el exterior ni habían hecho planes de irse juntos, pues ¿cómo viviría Harry siendo un elfo en la ciudad con humanos?

Esa misma noche Louis empezó a diseñar un regalo especial de despedida para Harry. Para cuando la ocasión se acercará se lo diera.

Los día y las tardes, se encontraba con Harry para su rutina habitual, mientras por las noches Louis iba al taller y se encerraba en el espacio de su papá para trabajar en el regalo de Harry.