𝑺𝒖𝒎𝒎𝒆𝒓 1993 [𝑌𝑒𝑜𝑛𝑔𝑦𝑢/𝐵𝑒𝑜𝑚𝑗𝑢𝑛]

◇VIII◇

—¿Por qué finges no verme?

Pude escucharlo detrás de mi, el fin de semana había pasado rápidamente y el día lunes había llegado nuevamente para torturar mi vida con las clases que empiezan a la hora que debería de seguir durmiendo

Lo habia visto en la entrada del colegio, si, había visto que me miraba y aún así no pude evitar ignorarlo, borrandole esa sonrisa que había soltado en cuanto me vio. Pude escuchar a su voz haciéndole reclamos a mi persona, ¿Cómo que fingí no verlo?

—Lo hiciste la semana pasada en el autobús y lo vuelves a hacer ahora, incluso el profesor de literatura me acaba de decir en la cara que no te molestara, ¡Que no te molestara! ¿Por qué te estoy molestando? ¿No eras tú el que quería pasar más tiempo conmigo?

—¿Por qué gritas? De hecho, ¿Por qué me reclamas algo tan tonto? Simplemente ignora mi existencia y ya, no creo que sea tan difícil.

—¿Acaso no éramos amigos? ¿Acaso no era yo tu punto de partida para contestar tus incomprensibles preguntas? ¿No fue eso lo que me dijiste la noche en la que estábamos en el parque?

Me encogí de hombros sin tener nada que decir, simplemente acepté que yo había dicho todo eso pero las personas cambian de pensamientos muchas veces, yo cambio de pensamientos muy seguido, hay decisiones que las cambio a mi antojo, hay promesas y planes que olvido o que no cumplo. Ese soy yo, el que no se hace responsable de sus propias acciones, ¿No se supone que eso también le había dicho aquella noche?

—Finjamos que te creí todo el papelito ese de chico bueno que quiere ser mi amigo y todo lo que gustes, ahora, no llegaremos a ningún lado y te aburriras de mi fácilmente, así que dejemos todo aquí y ya, tú te olvidas de mi y yo de ti, sencillo, ¿Verdad?

—¿Qué estupidez estás diciendo? ¿Cómo que papelito?

—Ya no lo ocultes, es algo tonto si sabes perfectamente que te vi con mis abusadores, ¿Acaso no eres uno de ellos también? Ya muestra tu verdadera cara.

—No soy tan idiota, BeomGyu.

—Sabes que por más que digas un millón de cosas no voy a creerte, ellos me arruinaron, me denigraron, me lastimaron y me humillaron sin que yo les hiciera nada, JAMAS en mi vida les he hecho daño y aún así buscaron verme infeliz cada vez que se les daba la regalada gana, y verte ahí junto a ellos, riendo, pasándola bien... Dime tú, ¿Enserio esperas que te crea una sola palabra de lo que digas?

No supo qué decir, pude ver su rostro completamente en pánico pero en silencio y con su silencio me decía todo, era claro que había dicho verdad tras verdad y él no tenía formas de refutar mis palabras.

—Es mejor que quedemos así, Choi YeonJun, sin arrojarle mas leña al fuego. Puedes ir a ver a tus amigos y yo me quedaré en silencio y tranquilo como le he hecho estos últimos dos años. Yo jamás te conocí y tú a mi tampoco. Adio-

Sentí su mano sostener mi brazo, yo quería irme pero él me había detenido, habían muchas personas al rededor que iban entrando al colegio,  parando a ver la escena que de la nada se había formado. ¿POR QUÉ ESTABA DETENIENDOME?
Si debía de gritar en algún momento, tranquilamente podía ser en este, pero no me lo permitió, rápidamente fui arrastrado por toda la entrada, por los pasillos del colegio hasta terminar en uno de los salones que normalmente no se utilizaba. Soltandome luego de haberme obligado a sentarme, y siendo sincero estaba asustado, si, me habían hecho y deshecho a su gusto en aquel salón pero YeonJun, Choi YeonJun jamás había puesto una mano sobre mi, jamás me habia tratado de mala manera y era casi imposible pensar en algo que él hiciera para dañarme.