Quizá fue todo repentino, absurdo y veloz.
Choi YeonJun; con las pequeñas hebras de su cabello tapando levemente sus ojos y siendo juguetonamente libres por la brisa fresca que nos brindaba el río frente a ambos. Sonriente, podría decirse que hasta lucia relativamente feliz.
Sus manos en mi rostro, en mis mejillas, en mi piel, acariciando esta con suavidad y tranquilidad, con sus ojos brillantes y dulces por la escasa iluminación del lugar. El amor brotando por cada uno de sus poros sin detenimiento alguno.
No iba a negarlo, quizá me había apresurado demasiado y mis pensamientos inmaduros sobre deshacer aquel sentimiento doloroso en mi corazón aún permanecían. Solo buscaba borrar todo rastro de cariño, amor o simplemente admiración que sentía sobre el Profesor Kim. Solo quería que todo aquello desapareciera de una vez por todas, aún si ello significaba hacer cosas que no creía buenas.
Besar e ilusionar a Choi YeonJun era una de esas.
Pues en cuestión de minutos había logrado convencerle de querernos mutuamente, en cuestión de minutos e incluso segundos había logrado callar sus cuestionamientos con simples besos sobre sus labios.
¿Me odiaba por hacer aquello? Una parte de mi lo hacía, pero la otra estaba feliz sintiendo que la imagen del profesor desaparecía de mi mente y en su lugar solo existía la sonrisa de aquel Hyung tonto, aún si aquello era momentáneo, me gustaba su sensación.
Despreocupado, tierno, dulce, completamente absurdo.
Después de todo, Huening tenía razón, quizá no sentí nada con aquel beso, pero los labios de YeonJun se sentían distintos, ¿esperanza a lo mejor? ¿Desesperación? ¿Deseo?
No importaba lo que fuese, solo sabía que tenía 17 años y podía equivocarme las veces que quisiese y aprender de ello. Porque la adolescencia era eso, dolor.
-Debemos irnos de aquí, Hyung - musité en cuanto nos separamos, pues al levantar la vista podía ver miradas llenas de disgusto provenientes de pocas personas al rededor del río que nos habían logrado ver a mitad de aquella escena que plasmamos como una vergüenza clara - terminaremos mal si seguimos aquí.
Él pareció entender a lo que me refería, pues a lo lejos se lograba apreciar como un hombre mayor se acercaba rápidamente a nosotros, sin embargo, nos había dejado el tiempo suficiente para que ambos pudiésemos huir.
Por un momento había olvidado que todo aquello estaba "mal", que demostrar aquella clase de afecto entre personas del mismo sexo era la aberración más grande para el tipo de país conservacionista en el que vivíamos. Pero a él no le pareció importar menos, pues una de sus manos tomó la mía entrelazandose entre sí para luego comenzar a correr lejos de allí.
Entendí que no me soltaria, ni en ese momento ni en ningún otro.
Entendí que lo que estaba haciendo con él le hacia feliz.
Comprendí que todo se me saldría de las manos en cuanto llegamos a un callejón oscuro y en medio de aquel escondite me besó sin pensarlo. Porque no le importó que nos estuviesen siguiendo, él solo hizo lo que quiso y con gusto.
Su emoción, su ingenuidad, su amor dulce me contagiaba. También quería sentirme de aquel modo.
Y entonces la idea de olvidar al profesor no era tan mala, enamorarme de YeonJun no parecía estar muy lejos de mi propio presente.
-Hyu...- rapidamente tapó mi boca, impidiendo que siguiera hablando, riendo por lo bajo ante aquella situación.
-No hagas ruido o alguien nos descubrirá.

ESTÁS LEYENDO
𝑺𝒖𝒎𝒎𝒆𝒓 1993 [𝑌𝑒𝑜𝑛𝑔𝑦𝑢/𝐵𝑒𝑜𝑚𝑗𝑢𝑛]
FanfictionUn día nublado, avisos en la radio sobre preparar paraguas ante la lluvia que iniciaría en cualquier momento, seguido de una de mis canciones favoritas del momento. Seo TaiJi And Boys interpretaban "Anyhow Song", sonando fuertemente, saturando mi me...