{ 1 }

514 64 292
                                    

—¡Recuerda no quedarte despierto hasta tarde! No necesito otra llamada de la dirección para justificar tus tardanzas.

—¡Solo fueron dos veces! —dijo Luke desde el segundo piso, soltando un sonido de fastidio antes de cerrar la puerta. Bueno, quizá, fueron más de dos veces, pero, sin duda, su madre no necesitaba esa información.

Recargándose en la parte trasera de la puerta de su habitación, tomó una profunda respiración, manteniendo los ojos cerrados y concentrado en los lentos patrones de su respiración. Estaba cansado.

El total de horas que permaneció con los ojos cerrados el día de hoy fueron alrededor de seis (si no contaba con las pequeñas siestas entre Literatura y Algebra), y realmente no tuvo el suficiente tiempo para tomar una siesta en la tarde porque, al parecer, su profesor de Historio creyó que hoy sería un gran día para dejarle un proyecto de investigación que solo tenía un plazo de tres días.

La escuela lo estaba consumiendo lentamente.

Dios, solo tenía diecisiete años, estos deberían ser los mejores años de su vida. Estaba seguro de que seguía a más personas en Instagram con mejores Historias en destacados, llenas de fiestas, amigos y viajes, en comparación a las suyas que solo se resumían en letras de canciones o absurdas fotos del cielo. Esta no era la vida adolescente que soñó.

De todas formas, tampoco era como que tuviera unas altas expectativas teniendo en cuenta su círculo social que se basaba en su mejor amigo y el chico de la clase de Laboratorio que siempre parecía olvidar traer un estúpida lapicero extra.

Quizá, solo necesitaba escapar de aquí; de esta ciudad, de este país. Tal vez, hasta del mundo. Iniciar de cero.

No, no podía iniciar de cero solo porque no tenía demasiados amigos y su vida era completamente aburrida.

¿O sí?

Negó con la cabeza, para eso todavía faltaba alrededor de un año. Todavía tenía que terminar la secundaria, encontrar algo que le apasionara (lo cual parecía algo realmente difícil teniendo en cuenta que, por ahora, lo único que le apasionaba era dormir), comenzar una lista de universidades, presentar cartas a ellas, esperar a ser aceptado, mudarse de la casa de sus padres y-

De acuerdo, eso ya sonaba demasiado real y aterrador.

Lo mejor que podía hacer por ahora era mejorar su horario de sueño, acabar con sus trabajos pendientes, dejar de llegar tarde si no quería que esto quedara marcado en su historial académico e hiciera que sus oportunidades para postular a una buena universidad, como sus hermanos lo hicieron, se fuera por completo a la basura y-

Sacudió la cabeza. De nuevo, pensando demasiado en el futuro; en escapar y esperar que su miserable vida se arreglaba mágicamente.

No, Luke, así no funcionaba.

Necesitaba concentrarse en el presente; problemas que podía resolver. Y, no entretenerse con cosas fuera de su control como-

—Sin duda, ese fue un largo monologo interno —los ojos deLuke se abrieron en ese momento, mientras daba un leve salto por el susto. Una suave risa se escuchó ante su acción, para que luego la figura echada sobre su cama mirara en su dirección —. Por la cantidad de movimientos de cabeza, imagino que estabas pensando demasiado. No lastimes tu cerebro, Hemmings, la escuela tiene fe en que sigas elevando tu promedio y les una buena imagen.

Luke blanqueó los ojos, acción que posiblemente la otra persona no era capaz de ver debido a la oscuridad que invadía su habitación. La única luz que entraba era la de la redonda luna por su ventana.

La misma ventana que daba hacia esa vieja casa de árbol que su padre construyó para su hermano mayor, la cual fue pasada hacia su otro hermano, antes de que él creciera, se fuera a la universidad, y se la heredara de cierta forma. La misma que no usaba desde los doce.

Waiting for us { Muke }Donde viven las historias. Descúbrelo ahora